CHASTITY
Sigo sin comprender porque me dice dinamita, pero tampoco digo nada, salgo y me meto a la camioneta en la que un Voyeviki me abre la puerta, dentro no hay nadie, lo que me deja tranquila, y nos ponemos en marcha hasta el aeropuerto, por un momento pienso que iremos en avión pero cuando veo un jodido helicóptero me detengo en seco.
—¿Quién irá ahí? —le pregunto al mismo Voyeviki.
—El Underboss y tú, niña —responde mirándome extraño.
Comienza a caminar y trato de seguirle el paso.
—¿Y quién manejará? —pregunto con insistencia.
—El Underboss —me responde de mala gana.
Cierro la boca cuando veo que el mafioso de mierda está alistándose dentro del enorme helicóptero, trago grueso, una cosa era viajar en avión pero dejarle mi vida a un hombre que está claro que buscará todos los medios posibles por aniquilarme, es más extremo que incluso avent
EDMONSoy el Underboss, siempre supe que el peso de llevar ese título desde que estaba en el vientre de mi madre, vendría con responsabilidades, unas más que otras, pero al final mi único deber era seguir al Boss para algún día ser digno de ese mando, soy su legado, su sangre, su hijo, y la lealtad junto con la pleitesía van de la mano, pero esto ya era pasar mis límites. Si alguien me viera en esta situación probablemente sería la burla de los clanes enemigos, el rival más débil de la pirámide y por supuesto, la vergüenza de mi padre.¿Cómo es que pasé de estar planeando mi vida y la siguiente guerra de territorios, a estar cargando a una mocosa mimada a la orilla del río? La corriente fue un problema, y cuando caímos al agua el primer pensamiento que se cruzó por mi mente fue el quedarme viudo antes de tiempo, su muerte acomodaría mi rumbo pero el hecho de que Viera me hubiera desobedecido, llevándome no solo la contraria
EDMONEscupe sin escrúpulos y la observo en silencio mientras sale del agua, su cuerpo queda expuesto ante mí y tengo que girar la vista a otro lado prosiguiendo con indiferencia mientras escucho que camina hacia su lado de la orilla, la pierdo de vista y decido alejarme buscando refugio bajo uno de los árboles, permanezco alerta por si acaso, por esta zona no había peligro de intrusos, pero sí de animales, así que trato de mantener los ojos abiertos hasta que el cansancio y el sueño comienzan a vencerme y me pierdo en la oscuridad que me abraza como una madre a su hijo.No sé cuánto tiempo llevo dormido, pero el grito de alguien me hace abrir los ojos y ponerme en modo defensa de manera inmediata, suena como a alguien que está luchando por su vida, las quejas provienen de la dirección en donde está Chastity, camino hasta allá pensando con encontrar a un animal comiéndose su pierna pero no es así, está dormida, se remueve in
EDMONLa luz de la luna reverberaba la zona, iluminando gran parte del lago cristalino y de los alrededores, haciendo parecer el bosque como un jodido cuento de hadas, ella sigue el movimiento de mi pulgar con sus ojos mientras trazo su labio inferior, hace algunas muecas que me dejan ver el cuestionamiento constante de lo que estoy haciendo, pero tampoco hace algo para detenerme.Nuestra lucha interna por detener esta mierda era grande, pero aquí, sobre ella, viéndola directo a los ojos, me deja claro que estamos jodidos los dos, ya nada nos puede detener, nada, es demasiado tarde, no lo hago y ella no lo impide.Solo la probaré…Me repito, acerco mis labios a los suyos y antes de que intentara discutir, me inclino y presiono mis labios en los de ella, probando la llama de un infierno diferente al que estaba acostumbrado. Intenta poner distancia empujando con sus manos mi pecho, pero
CHASTITYObservo con detalle como el doctor me hace la curación del hombro, hace un par de minutos sacó la jodida bala de mi interior y duele una mierda, Viera la loca tiene buena puntería, yo ni en mil años le hubiera dado en la cabeza, nunca fui buena para las armas de fuego, pero sí para las otras. El hombre que permanece sumido en un silencio sepulcral mientras hace lo suyo, no es viejo pero tampoco joven, lo rubio de su cabello me recuerda al helado de caramelo con chispas de chocolate que solemos comer mi padre y yo cuando estamos descansando en casa.Mi cabeza no deja de repetirme las imágenes de lo sucedido en la noche con el mafioso de mierda, me muerdo el labio inferior, todavía puedo sentir sus lenguazos en mi coño, fue la primera vez que recibí un beso tan intenso, tan posesivo, tan… lleno de vida ¿qué había pasado con nosotros? De algo estaba segura, y es que no iba dejar que este error vuelva a ocurrir.
CHASTITYHago lo que me pide no porque tenga miedo de lo que me pueda pasar, sino, porque estoy agotada, necesito un buen baño de agua caliente, probar alimento y dormir en una cama decente. Con ojos curiosos observo la camilla en la que estaba sentada mientras el doctor joven y apuesto me hacía curación, y tomo la misma posición y actitud silenciosa, viendo como el mafioso camina de un lado a otro pasándose una mano por las hebras de su cabello.—Por la noche es la cacería, no te quiero ahí, así que más vale que no me causes más problemas y te mantengas encerrada en la habitación que te será designada —comienza a informarme sobre mi confinamiento y cruzo los brazos siguiendo con mi silencio—. Uno de los Voyevikis se encargará de mantenerte vigilada, no te quiero merodeando mi casa, te recomiendo que no digas ni una palabra de lo que pasa aquí cuando lleguemos a la fortaleza, si el Boss pregunta, estuviste en la cacerí
CHASTITYEs la primera vez que me dan ganas de tocarme, nunca antes lo había hecho, no me daba tiempo o simplemente tenía otras cosas en mente que provocarme un maldito orgasmo masturbándome, una vez lo intenté con Livy pero la idea de que ella me tocara no me producía nada que no fuera el sin sabor de que estaba mal por el simple hecho de que no era un chico quien me metía mano.Comienzo a tocarme, primero un dedo, luego dos, los adentro, froto, intento pensar en cualquiera de los chicos con los que me manoseaba en la universidad, pero sus rostros parecen borrosos y poco atractivos.—Joder.A los dos minutos desisto, no siento nada, no me siento tan excitada como cuando Edmon me tocó, mucho menos siento esa descarga de electricidad que me recorrió el cuerpo a tal punto de erizarme la piel cuando me besó. Aburrida, frustrada y convencida de que mañana haré un último intento por con
EDMONNo veo claro, he olvidado cómo respirar, las articulaciones me duelen, la rabia me consume y todo me da vueltas en la cabeza, camino con prisa, los pocos Voyevikis que se supone tenían que resguardar las entradas y salidas, se apartan en cuanto me ven, la boca se me seca, no hay nada que me quite las putas ansias y los deseos de matar a la mocosa y de castigar a Viera por no acatar una puta orden, solo una. Levanto la mirada mientras me dirijo a la sala de mando en donde podré tener una mejor vista de cada uno de los rincones del laberinto en el que se meten a las presas para que luchen por su vida, veo al Voyeviki que estaba a cargo de la cría de mierda y lo encuello con fuerza descomunal, azotando su espalda contra el frío muro que yace detrás de él.—¡Di una puta orden! —Ajusto mi agarre y el miedo se apodera de sus pupilas—. ¡¿Acaso has olvidado quién soy?!—No, ella se ha escapado, es escurridiza y
EDMONNos miramos fijamente el uno al otro por un par de segundos antes de dirigirme al área que me lleva hacia la zona que he indicado, el corredor es angosto con paredes lisas de un color verde militar, no hay cuadros que adornen, solo un par de lamparillas a los extremos de cada metro por metro, emitiendo una luz chillante y abrumadora. Dos Voyevikis me acompañan, cuando llegamos hasta la puerta que ya tienen abierta para mí, me preparo y les ordeno quedarse en donde están. Asienten con la cabeza baja solo porque saben que no estoy en uno de mis mejores momentos, y cualquier cosa que me crispe significa una bala entre ceja y ceja de la persona que me desafíe.—¿Debo guiarte? —pregunta en tono burlón Lukyan, por medio del chícharo pegado en mi oreja.No era necesario, yo mismo hice los planos de este laberinto, conozco sus entradas y sus salidas, así mismo como sus atajos, los pasajes secretos y la localiza