Uzziel Corro buscando a Nila o a Denara, la primera que me encuentre con el cachorro en brazos, que anda feliz a todos lados, sin saber los problemas que abundan en la casa. Y tal vez, aunque los sienta, no hay forma alguna de que le afecte, porque son tan puros que no hay manera de arruinarlos. Ellos aunque son corrompibles, es muy difícil que eso pase y todo lo que pasa es por culpa de los humanos que los usan para fines macabros o no los saben criar. Los míos no es que son unos ángeles, Pero son los perros de un hombre lobo y un gruñido los controla porque yo también soy si alfa, y lo mismo va a pasar con el que tengo en brazos. Entro en el comedor y enfoco mi mirada en Nila sentada con Denara. Ellas deben sentir mi presencia, porque detienen su conversación y se giran para verme. Nila como siempre tiene una expresión de que no le importa nada, con su perro mediano sentado en sus piernas, completamente relajado hasta que yo llego a ellos y me gruñe. Es igual que su madre. -A
Ashley Mi supuesta madre invoca sus poderes, y aunque nada sucede, yo me lleno de nervios y lo único que hago es lanzar un hechizo que congela la mitad de su cuerpo, y también le tapa la boca, porque ese me hace sentir mejor, hasta que recuerdo que las brujas celestiales tienen un poder mental tan fuerte que pueden invocar hechizos con los susurros de su mente. En pocas palabras, si ella tiene el poder de hacer magia en un domo que me protege de la magia de otro ser, pues estoy jodida, simple. La veo lanzar su cabeza atrás y sé que se está riendo em silencio de mi. -Aunque no lo creas, yo no quiero hacerte daño.- le digo y me acerco de a poco a ella, lanzando un hechizo a mi misma para proteger a mi bebé de cualquier golpe que pueda llegar a mí. - Solo quiero respuestas.- hablo con un tono más tranquilo y menos nervioso. "Este hielo no está tibio querida, me estás haciendo daño" - habla en mi mente y yo salto de la sorpresa para verla negar con la cabeza.- Mírate, ni siquiera e
Ashley Me sumerjo en un sueño profundo mientras siento que mi cuerpo todavía está lo suficientemente activo para sentir el brusco movimiento en el que estoy sometida, como si me llevaran en una camioneta, tirada en el suelo de la misma, mientras pasamos el camino más destruido del planeta. Así de agitada estoy. Cada vez que trato de despertarme, alguien como que vuelve a darle lo mismo que me dieron para someterme en un sueño, porque simplemente me sigo desvaneciendo hasta el punto que ya no sé cuánto tiempo ha pasado o si siquiera han pasado días. Así de confundida estoy. Solo espero que realmente no hayan pasado días, porque cuando vuelva (porque voy a volver), me van a matar todos, ya lo veo todo, de verdad. Bueno, en realidad, lo más probable es que si tan solo han pasado horas, lo cierto es que de igual forma me van a matar. De solo imaginarme lo preocupado que deben estar todos, me hace sentir horrible. Yo de verdad soy la peor persona tomando decisiones, porque cuando tr
Ashley. Trato de pedir un informe más detallado de lo que Drag me acaba de decir, pero un golpe fuerte en el rostro me hace caer al suelo. Llevo mi mano al lugar y Drag se levanta corriendo hacia mí, para ayudarme a levantarme. -Tienes que volver. Tienes que hacerlo ahora. - otro golpe hace que mi rostro gire a otro lado y mi mejilla se vuelve caliente del dolor. - No me pueden despertar como gente civilizada.- me quejo y llamo a la inconsciencia. -No estás dormida y ellos lo saben... Voy a buscar la ayuda. Iré hacia por tí.- asiento y aunque trato de darle las gracias, todo se vuelve borroso de repente. Cierro mis ojos para ver todo mejor y tratar de estabilizarme, porque todo se siente como si se estuviese yendo de lado. Abro mis ojos nuevamente y cuando vuelvo a una realidad completamente diferente, no puedo evitar sentirme nerviosa por lo que veo. Varias personas están cubiertas por túnicas enfrente de mí y mi "madre" está al frente, con un hombre con expresión simple junto
Ashley Asustada comienzo aparecer las cosas que obtuve poco a poco mientras estaba en la casa, comenzando con la sangre de Nila que obtuve cuando tuvo la discusión con Louis. Su sangre se quedó en la uña del hombre lobo cuando la tiró al suelo y yo al darme cuenta, se la pedí y la coloqué en un recipiente. Lo segundo es la flor congelada, ya que no quería que se marchitara, por lo que la mantuve presa y solo tuve que teletransportarla hasta aquí con la garra de Uzziel. Saco el envase con mi sangre y respiro profundo cuando coloco el cuchillo con la sangre de mi madre encima de un recipiente para que gotee, orando para que sea suficiente. Veo todo lo que necesito en la mesa y me giro, viendo a todos lados. Me aclaro la garganta y cuando estoy a punto de hablar, encima del laboratorio se comienzan a escuchar pasos apresurados y gritos, lo que me acelera el corazón a millón y los nervios me erizan la piel entera. Miro hacia donde tengo todo y los agarro, pidiendo que esto sea lo cor
Ashley Algo diferente crece de mí, algo que a pesar de todo lo que he vivido no se había presentado como tal y eso era el cansancio, cansancio por todo esto en general, que no importaba que tanto hiciera o dejara de hacer, todo simplemente se complicaba cada vez más.Desde que Uzziel me encontró. Todo ha ido de mal en peor. He de admitir que hay muchas cosas buenas, como estar consciente de un mundo diferente y que aunque alguien no te conozca al 100%, sea capaz de amarte con tanta fuerza que es capaz de arriesgar su vida y la de toda su gente solo para ayudarte. Porque eso es lo que está haciendo Uzziel en este momento.Y eso me tiene al borde de la histeria donde estoy parad, escuchando habla a un hombre que resulta ser mi padre sin ser realmente mi padre, porque aunque lo pienso y lo pienso, todo es demasiado confuso para entenderlo a simple vista.El esposo de mi "madre", la reina de las brujas, por así decirlo, ayudó en mi creación dando un poco de esperma, del cual salimos Nila
Ashley Nila aparece de la nada y absorbe por completo el poder como si nada, incluso sonriendo hacia nuestra madre en el trayecto, que la mira con más odio del que me ve a mi. Realmente odia a sus hijas, ¿Cómo puede ser eso posible? Nosotros no pedimos nacer. Si ella escogió traernos al mundo, ¿Por qué tanto odio? "No es odio, es celos" me giro para ver a la criatura infernal desaparecer en un humo. Sacudo mi cabeza y comienzo a correr hacia Uzziel, lanzando un hechizo de transformación a la bruja que se hace dañar mi madre para que quite la atención de Nila. Ella se gira y sonríe, lanzando un hechizo hacia mí que yo evito con suma facilidad. Me giro hacia Uzziel justo en el momento que Nila lanza el hechizo que obtuvo contra mí madre, quien también lo evita fácil. Mis ojos se enfocan en los de Uzziel y él corre hacia mí, evitando a una bruja y agarrando a una ninfa que tiene a Emma contra el suelo, usando las raíces para manterla ahorcada contra el suelo. Hasta que llega mi es
Extra Criatura infernal A través de miles de años, mis nombres han cambiado con el paso del tiempo. Nadie me llama de la misma forma, y mucho menos, todos me ven igual. Sin embargo, si que tienen una opinión bastante clara de mí, al menos aquellos que me han conocido. Sin embargo, ninguna podría estar menos equivocada. El poder que corre por mis venas es un poder que he arrebatado de todas aquellas almas que robé desde los inicios de mi creación, ya que yo fuí producto de las llamas de infierno. Un ser que mi padre creo exclusivamente para vivir esclavizado. Hasta que encontré la forma de escapar de él. Solo dándole a poder a los humanos, porque son los seres más destructivos que existe, y al darle un poco de poder, ellos jamás se inclinaran para hacer el bien. Su ambición puede más que todo lo demás, y la ambición trae algo muy importante. Muerte. Tanto poder vuelve loco a quien lo tenga en la mano, y más a los humanos, que nunca han saboreado un plato tan exquisito como