Ya es un hecho que La suegra no le va a poner las cosas fáciles a Selene.
«Alfa, deberías venir a ver esto, es urgente» La voz de Jackson interrumpe mentalmente la reunión que Connor tenía prevista en su despacho con Inés y su madre que están por llegar.«¿No puede esperar? Necesito resolver algunos asuntos aquí con mi madre» responde él de inmediato.«Quizás deba venir a ver esto antes que nada. Estoy en el estacionamiento» Jackson corta el enlace con Connor y él suspira antes de levantarse de su asiento. —Cuando venga Inés o mi madre, que me esperen —pide Connor a Beltrán quién funge de su secretario cuando él está en la oficina para resolver los asuntos de la manada—. Qué no se muevan de aquí. Debemos aclarar todo antes del almuerzo.—Así será, alfa. Connor sale hacia el estacionamiento. La verdad no tiene idea de qué pueda ser eso tan importante y urgente que Jackson necesita mostrarle teniendo él tantos asuntos que resolver ahora mismo. El trabajo está acumulado debido a su viaje a la Amazonía y si no se pone al día será peor. Llega hasta el estacio
Selene da unos pasos atrás y mira su obra con una enorme sonrisa. «Lo hicimos muy bien» dice Saya en su mente y ella está de acuerdo. Fue un arduo trabajo, pero finalmente pudo terminar de acomodar sus cosas tal como le gusta. Da una vuelta de 180 grados y observa todo con gran placer. Sus vestidos al lado mismo de los trajes de Connor, sus ropas de casa al lado de los de él, su ropa de dormir e interiores, ocupando la mitad del mismo cajón que los interiores de Connor, al igual que sus calzados.«No puedo esperar a que la señora Carla vea esto» Selene empieza a reír imaginando su cara. «Seguramente le dará un ataque, espero que nuestro compañero no se enoje» Saya responde mirando atentamente a través de sus ojos.«Él dijo que podía cambiar lo que quisiera y eso hice. Estos tonos hasta combinan» bromea Selene viendo los tonos azules pasteles de sus prendas al lado de los marrones de su compañero. Es cierto que ambos estilos son totalmente opuestos, diferentes como el agua y el acei
El aire del sitio empieza a espesarse, apenas Carla pone un pie dentro de la cocina, todas las sirvientas comienzan a moverse con más ímpetu y Selene nota perfectamente que permanecen agachadas como si le tuvieran miedo, esa no fue la reacción que tuvieron cuando el alfa entró. Esa joven que había besado a Connor en la entrada viene tras Carla y este es el momento perfecto para que Selene empiece a marcar su territorio antes de que estas dos terminen con ella.La joven aprovecha que está en medio de las piernas de Connor y que él prácticamente la tiene rodeada con ambas para acercarse por completo a su pecho y colocar su rostro en el cuello de él. Ella respira profundamente de su aroma, entre tanto él la rodea con ambos brazos inmediatamente.Un gruñido bajo sale del pecho del alfa y Saya ronronea en respuesta. Ambas bestias se miran mutuamente y Selene sabe que esta lucha ya la tiene perdida, especialmente viendo a su loba tan animada y feliz cuando Connor está cerca. «Mía, ella es m
Selene bosteza mientras abre los ojos poco a poco. Estira los brazos a sus costados y arquea la espalda, estirando su cuerpo y preparándose para despertar completamente. Se siente demasiado relajada y descansada. Hace un pequeño movimiento para salir de la cama y se sorprende al estar cara a cara con Connor. Sus ojos verdes la miran fijamente, tanto que ella se siente intimidada. Para el alfa ver a Selene despertarse en su cama y a su lado es simplemente un acto divino, lleva despierto hace más de dos horas. Acostado allí, la observó todo ese tiempo antes de que ella abriera los ojos.Los pequeños ruidos que hizo Selene al despertar fueron muy dulces para él. En ese momento quiso besarla, pero es consciente que lo más seguro es que ella se enoje por su osadía, entonces prefiere alejar esos deseos lejos, por el momento. Selene aún no se da cuenta de que una de sus manos descansa sobre su bajo vientre, muy cerca de su miembro. Connor disfruta de la sensación de sus dedos moviéndose so
—No estás ayudando en nada —Selene se reprende a sí misma frente al espejo, a la vez que trata de acomodar sus mechones rebeldes en su espalda—. No puedes ser tan fácil, Dexter estaría muy decepcionado de ti. El maldito vínculo de pareja ya está actuando sobre ella, es imposible no saber cómo funciona y lo rápido que pueden caer en brazos del otro. Con Dexter había compartido solo unas horas antes de que él falleciera en ese ataque, y, a pesar de eso, todavía lo recuerda y ama como si hubieran estado juntos toda la vida. ¿Cómo hubiese sido su vida si se hubiesen apareado además de marcarse? No tiene idea, pero supone que todo hubiese sido más difícil para ella, aunque ahora ya no sería virgen. Si se deja llevar por lo que está sintiendo en su bajo vientre en estos momentos sería su primera vez, y su cuerpo no sabe qué hacer, pero lo anhela. Connor es un hombre mucho más grande que Dexter y ni qué decir comparado con ella, y eso la asusta un poco. No es un secreto que los Alfas son g
El desayuno, igual que el almuerzo de ayer, es incómodo, aunque Clarisse trata de conversar con Selene de tanto en tanto para amenizar más el ambiente hostil que su madre se empeña en crear desde que ella llegó a la manada.Luego de desayunar, Connor, igual que ayer, la lleva a conocer otros lugares de la manada, específicamente las edificaciones más importantes que forman parte de Redwood Wolves. Hasta ahora es que ella se entera de que Connor es dueño de una significativa empresa textil en Norte América, aquella que colabora con la empresa de su padre en Tierra de Pinares.Con paciencia, Connor le explica cada detalle de los movimientos en cada edificio, hasta que llegan a un área común. Allí están varias omegas corriendo ocupadas haciendo gestiones para el almuerzo de las guardianas. Todas inclinan la cabeza con respeto cuando él entra en el gigantesco salón, pero luego sus vistas van a parar a Selene, una pregunta no formulada se forma en sus ojos, especialmente al ver que su alfa
Una ola de confusión invade a Saya al sentir las patas delanteras de Sorem envolverla mientras ruedan juntos hacia el centro del salón hasta que quedan uno encima del otro. Selene sacude la cabeza y frunce el ceño, mirando a través de los ojos de su loba a quien le impidió llegar a esa estúpida. Un lobo enorme, con un pelaje naranja amarronado, orejas blancas y ojos verdes, la tiene sujeta totalmente en el suelo con su nariz rozando levemente la de Saya. Su aliento cálido se mezcla con el de su bestia y en su cuerpo siente un cosquilleo agradable recorrerla por completo.Selene parpadea un par de veces antes de fruncir el ceño y hacer retroceder a Saya. Connor hace lo mismo con Sorem, quedando ambos en su forma humana.—Está bien… solo cálmate, cariño —La voz de Connor es suave como la seda mientras no se aparta ni un centímetro de Selene.Saya incluso ya está tranquila dentro de su mente y dispuesta a hacer lo que su compañero le dice. Ella se voltea bruscamente y se levanta del piso
Selene aprovecha la oportunidad que está sola para echar un vistazo a toda la habitación. Ahora que regresó de la recorrida, ya puede percibir el olor de cloro y otros elementos de limpieza en el lugar. Todas las ventanas están abiertas y la luz natural del sol llena la habitación. Hay una brisa agradable meciendo las cortinas, y desde su posición puede ver el vaivén de los árboles hacia las afueras de los muros. Se acerca totalmente al barandal del balcón y tiene una vista perfecta de Redwood Wolves desde allí, incluso puede ver la entrada principal. A la derecha hay un campo bastante grande, no recuerda que Connor la haya llevado allí todavía. Hay varias mujeres en ese sitio, al parecer entrenando. Ya lo tiene decidido, irá allí más tarde, necesita despejarse un poco y correr al aire libre, sin duda va a ayudarla. Su estómago gruñe de pronto y decide bajar a la cocina por algún tipo de refrigerio. Cómo allí nadie parece escucharla y todos la evitan o escapan de ella, toma la teter