—Señor… señor… señor… puede pasar a ver a su esposa, ya tiene todo lo necesario para hacerlo, solo le pido que siga las indicaciones que se le han dado.—G-gracias, ¿díganme que tengo que hacer en caso que se despierte?—Por el momento no sucederá, solo debe de hablar con la paciente y recordarle momentos de felicidad, consideramos que la puede ayudar a retomar las ganas por vivir que ha perdido.Asentí lentamente mientras me dirigían al cuarto donde se encontraba Yen postrada en cama, rodeada de un sin número de equipos médicos. De donde voy a sacar lo que me piden, si conmigo solo ha vivido complicaciones desde que nos volvimos a reencontrar, la única persona que ha estado con ella es Dayana aunque fuera mi nombre el que mencionara todo este tiempo.Se miraba tan dulce y adorable acostada en esa cama, por un tiempo me dedique a observarla. No quedaba rastro de la niña que conocí cuando la ayude a levantarse, había caído de un árbol y empezaba a llorar porque su hermano solo se reía
— ¿Paso algo muchacho? ven, siéntate que estas a punto de caerte al suelo y nos costara trabajo levantarte. No me asustes y habla pronto, muchacho. —N-no, nada señor Sandoval. Yen se encuentra bien, será mejor que nos sentemos para que hablemos sin contratiempos.— ¿Cómo viste a mi hija, Xavier? tenemos esperanza que se recupere pronto o…—La doctora me ha dicho que es probable que le tome una semana en observación, y-yo…Hablar de la salud de Yen con sus padres me desconcierta un poco, no sé cómo tomen todo lo que dijeron los doctores. Si alguien es el más interesado que ella regrese soy yo, aunque suene contradictorio al mil por ciento.Sus padres se mostraron interesados en conocer mi punto de vista sobre lo que ocurrió cuando nos vimos en el bar. Escucharon todo lo que tenía que decirles sin interrumpirme en lo absoluto, agradecí que fueran considerados, después de tratar a su hija en la forma en que lo hice.—Me gustaría decirles que las cosas no fueron como si hija les conto,
—Extrañaba dormir en mi camita, por fin puedo tener un sueño reparador despues de muchos meses de presión por todos lados.—Me alegra saber que pueda causar ese efecto en ti, como no lo supe antes que esa era la fórmula para dejarte callada un buen rato.Un grito por todo el cuarto, hizo latir mi cabeza, sin duda se pudo escuchar hasta la luna, solo espero que no llame la atención de sus padres o me meteré en serios problemas.— ¿Cómo diablos entraste a mi cuarto? —bufo Dayana, mientras trataba de pararse de la cama sin éxito.Por querer hacer todo de prisa, no se dio cuenta que se encontraba enredada en las sabanas que la llevaron directo al suelo, ahora si me acabo de meter en un serio problema. La princesa se había lastimado, y esta vez no tenía nada que ver, soy totalmente inocente.La puerta se abrió de repente, mostrando a sus padres y a los míos sorprendidos por verla en el suelo, mientras que yo me encontraba sobre la cama muerto de risa por lo sucedido.— ¿Qué está pasando aq
A duras penas logre dormir unas cuatro horas, por más que trate de hacer más tiempo en la cama me fue imposible conciliar el sueño. Tome mis cosas para darme un buen baño antes de ponerme a trabajar un poco, y de regresar al hospital para ver como amanecieron Yen y los niños.Se siente raro utilizar esa palabra pero ya era padre de dos pequeños de los cuales no conozco ni el rostro, pero que sin duda alguna hoy los podre observar aunque sea de lejos.Si alguna vez tuve dudas de que fueran míos, ahora podré decir que no necesito ninguna prueba de ADN que lo compruebe. Mi tipo de sanguíneo es muy escaso, por no decir que son casi nulo, que más prueba necesitaba para estar seguro de lo que hace meses Yen me dijo y que ignore por estúpido.Como no había llevado nada de ropa, me coloque la misma del día anterior, esperando que este lugar cuente con tiendas departamentales decentes, donde pueda adquirir por lo menos algunos cambios en lo que me hacen llegar la mía.Entre que me arreglaba y
Admitir lo que mi madre mencionaba delante de los padres de Dayana, me hacía temer por mi vida. La madre está más loca que la hija y eso me preocupaba seriamente, creo que debo de pensar seriamente lo que hago cuando estoy cerca de ella.Era claro que la más afectada en todo esto era Dayana, que con la mirada quería asesinarme mientras mi padre y el suyo disfrutaban verme en aquella encrucijada. Sin duda este momento no lo olvidaría, y les guardaría unas cuantas a este par para cuando necesitaran de mi ayuda con sus esposas.— ¿Por qué nadie me dijo lo que estaba sucediendo en casa de Yen?—Nosotros pensamos que estabas de acuerdo en que Dominick durmiera contigo todas las noches.—Ustedes saben que esta cucaracha solo me da repugnancia, nunca dejaría que se me acercara.—Pues eso no es lo que decías mientras dormías, te recuerdo que muchas veces me abrazabas para que no me fuera de tu lado —mencioné mientras recordaba las veces que eso sucedía, para mi buena suerte tenía prueba de lo
—Sentimos llegar tarde, Xavier. ¿Tienes alguna noticia nueva?—Buenas tardes, señores Sandoval. Me alegro que ya se encuentren aquí, me gustaría hablar con ustedes unos segundos si me lo permiten.La verdad me encontraba nervioso por ocultarles información y no sabía cómo reaccionarían a ello.— ¿Sucedió algo Xavier? ¿Mi hija se encuentra bien? ¿Mis nietos, cómo se encuentran ellos?—Vengan por favor, sentémonos aquí para que pueda explicarles. Ayer omití decirles algo importante acerca de Yen, es necesario que ustedes estén enterados sobre las consecuencias del coma diabético que la tiene postrada en cama.—Me estás asustando muchacho, ¿qué le pasa a mi hija?—Empezamos por las buenas noticias, los pequeños serán trasladados a los cuneros en unos momentos más. Nada más que el pediatra termine de revisarlos, podremos verlos desde el ventanal, el tiempo que así no los permitan.—Eso es maravilloso Xavier, por fin podré conocer a mis nietos, ¿te han dicho cuándo podremos llevárnoslos?—
—Cuando encuentre a la persona que está detrás de todo esto, me asegurare de matarlo con mis propias manos.—No es momento que te pongas de esa forma, actúa de manera consciente y como hombre. Debemos de ver que está pasando, tu abuelo nos espera esta misma noche en su casa para que veamos la situación.—Hablare con tus padres para que se hagan cargo de tu hermana, en el camino te platico lo que me dijo la doctora. Creo que podemos mover por fin a Yen a Nuevo México.—Vamos, pero no los preocupemos más de lo que ya están.Creo que esto no es por Yen, si no por mí. Tengo que hablar con mi abuelo para que me explique detenidamente como fue que firmo este contrato y no se dio cuenta de las cláusulas que pusieron. Creo que Dominick solo se ha enterado de la punta del iceberg que tenemos enfrente.—Papá, mamá… tengo que regresar a Seattle esta misma tarde, hay algunos pendientes de la empresa que debo hacerme cargo y no puedo seguir retrasando más tiempo. Amo mi hermana, pero si no continu
—Es mi imaginación o tienes algo que te atormente en estos momentos, Dominick.—Creo tener una idea del nombre de la persona que se encuentra detrás de todo estos problemas, Xavier.—Habla, me estresas cuando empiezas actuar como la loca de tu amiguita.—Fue justamente ella quien me ayudo a pensar mejor cuando íbamos camino a su casa. Dayana piensa que Osvaldo es la persona que está causando problemas, la información que se encuentra circulando era muy confidencial, y solo él tenía acceso.— ¡Desgraciado!—He estado atando cabos, sin embargo debo de conocer los por menores que tenga que contarnos tu abuelo. Solo así sabré si las sospechas de Dayana son ciertas.— ¿Sabes dónde encontrarlo? Me gustaría pedirle a mi asistente que lo investigue un poco antes de que aterricemos en Seattle.—Este es su nombre, puedes hacer lo que quieras con él. No voy a meter las manos por alguien que ha lastimado a mi pequeña hermana, por una estupidez de machos.Xavier: Investiga a esta persona, Osvaldo