— ¿Qué te tiene tan inquieto, hijo?— preguntó Padme entrando en el cuarto de su hijo, el cual sabía que abandonó el casino poco después que Maryam y al no encontrarla se fue frustrando a palacio.Su plan de separar a su hijo de esa novia descocada que se había echado iba viento en popa, aunque podía percibir lo mal que él lo estaba pasando por eso,. Pacme en el fondo sabía que le estaba haciendo un favor y que si seguís dejándolo hacer lo que quisiera sufriría las y no solo él, tal vez el reino entero. Porque un rey se debía sobre todo a su reino.— Nada madre, solo son los problemas típicos de palacio — Explicó Darius mientras se sentaba al lado de su madre.En ese instante le gustaría no ser el rey, ser solo ese niño que de pequeño podía refugiarse en los brazos de su madre cuando alguna pena le encogía el corazón como lo estaba haciendo en ese momento.Pero ni siquiera eso podría haberlo ayudado con como se sentía, por su confusión, por no saber si esos niños tenían que ver con él
Sostenía el hermoso rostro de la mujer entre sus manos y se perdía en sus hermosos ojos, si le hubiera sucedido algo estaba seguro de que sería incapaz de perdonárselo, sin duda jamás hubiera superado la muerte de esa mujer.Aunque se preguntaba dónde estaban los niños estaba tranquilo viendo que ella no se alteraba por eso, posiblemente estarían en otro lugar, tal vez en la escuela o con la abuela, así ya habría tiempo para enterarse de todo, ese no era el momento.Cuando sus hombres llegaron no tardaron mucho en apagar las llamas, a pesar de eso la casa había quedado en muy malas condiciones, Darius dudaba que alguien pudiera volver a vivir allí.— Registren todo el lugar en busca de más gente y cualquier cosa de valor que haya podido salvarse de las llamas.Tras dar esa orden se llevó a Maryam de vuelta al palacio, lo que él no sabía era que esa mujer no era la Maryam real, sino Sahira su hermana mujer que había estado manteniendo durante cinco años como concubina, quien a pesar de
Maryam sabía que su hermana Sahira le había indicado donde podrían encontrarse, pero había algo en su intuición que decía que no se fiara de su hermana, que no había dejado de mentir desde que regresó de a saber dónde, porque cada vez estaba más segura de que la mujer que vio en el casino antes de que regresara era ella, además era tan poco creíble esa historia del monstruo siguiéndola que no podía evitar pensar que Sahira escondía algo.Fue por eso por lo que la chica decidió no ir al lugar que su hermana le había indicado, al fin y al cabo ella debía pensar en la felicidad de sus hijos que eran completamente su responsabilidad, en su seguridad y en qué nadie pudiera arrancarlos de sus brazos.Con el oro que tenía podría permitirse una vida digna durante al menos un año en una ciudad costera, luego podría encontrar un trabajo de pescadera o panadera, o sirviendo copas, incluso yendo a pescar no le importaba, lo importante es que sus hijos estarían a salvo y nadie descubriría su secre
—¿Se puede saber qué es lo que sucede?— preguntó el Rey arqueando una ceja ante la expresión corporal de su amigo.— Maryam ¿Cómo está? Pasé por su casa y vi lo del incendio— dijo Alí directamente sin andarse con rodeos.— Maryam está aquí — al rey no le gustó el tono que usó su amigo para exigir que le diera respuestas, o más bien no le gustó el interés que mostraba— ¿Dime cuál es el problema con ella? ¿Por qué tanto interés con una mujer que me pertenece?Alí apretó los puños, . Sabía que si el rey había decidido que esa mujer era suya, él no tenía nada que hacer como a ¿Quién se opondría a su rey? Pero en su caso, aparte de ser el rey, también era su amigo, así que debía entender sus circunstancias.— Sus hijos¿Cómo están sus hijos, sufrieron algún daño en el incendio?La expresión de Darius endureció, no podía creer que su amigo supiera lo de los niños y no le hubiera contado nada. Se incorporó caminando hasta estar muy cerca de el molesto.— ¿Me estás diciendo que sabías lo de su
Después de su extraña charla con Darius III, Alí estaba seguro de que algo no cuadraba, le vino a la memoria el momento en que estuvo en casa de Maryam días atrás y como esa mujer lo echó de su casa y protegió a sus hijos en todo momento como si de una fiera salvaje se tratara.No creía que ella estuviera viva si algo les hubiera sucedido a esos niños, tal vez Darius será capaz de creer aquello porque nunca había estado con ellos, pero cualquiera que hubiera visto a esa madre protegiendo a sus pequeños, sabría que antes se quemaba ella que dejar que ninguno de ellos lo hiciera, que ella no hubiera salido de las llamas si ellos se hubieran quedado atrapados allí, que habría luchado hasta la muerte para sacarlos.Por eso, sin decirle nada al rey y bastante molesto con su actitud, volvió a la casa de Maryam y empezó su búsqueda exhaustiva entre las ruinasEstaba seguro de que no encontraría resto humano alguno, pero era cierto que no podía pasar su teoría en conjeturas, antes debía encon
— Mi señor… mi señor me hace daño — aseguró ella y entonces el rey tuvo que renunciar a seguir sintiendo ese melodioso sonido y dejar de hacer lo que hacía para solo acariciarle la espalda con la yema de los dedos, con un ínfimo contacto y así conseguir relajarla.— Está bien, ya paró.Se inclinó y dejó un nuevo beso en su espalda para luego apartarse y dejar que ella se incorporara.— Debemos hablar — Dijo el rey girándose para darle intimidad a la mujer y que pudiera vestirse sin sentirse incómoda con su mirada.— ¿Cuál es el problema, majestad?— preguntó ella tapándose con una bata — Ya puede volver a girarse.— Ninguno Maryam, el problema es que yo…Y en el instante que la vio observarlo a los ojos llena de curiosidad, por lo que estaba por decir, el Rey no pudo contenerse más y pasó una mano tras la cintura de la joven y sujeto su rostro, con la otra mano para besarla.Sahira sintió su cara arder por el contacto de esos labios sonrojándose, pero no tardó en pasar los brazos tras
Alí se debatía entre su lealtad a su amigo y rey o quedarse callado, pero era un hombre leal y justo así que aquella mañana volvió al palacio para explicarle al Rey lo que había descubierto.— Dime que sucede Alí — pidió Darius algo molesto por con él por la conversación del día anterior que no había hecho más que alterarlo y junto con esa extraña sensación que tuvo al besar a la chica y llenarlo de dudas.— Es sobre el incendio — Empezó a hablar Alí — me fui a ver las runas de la casa de Maryam y no hay un solo gesto humano, es cierto que hay casos que el fuego es capaz de consumirlo todo, pero por el estado en el que quedó la casa el fuego fue apagado antes de llegar a ese tipo de combustión.Darius estaba esperanzado porque eso significaba que los niños debían estar vivos, tal vez con la abuela o en casa de algún familiar, si lo estaban él los encontraría.— Entonces los niños…— No solo los niños— lo cortó Alí sin dejar que siguiera hablando — los niños no murieron en el incendio
Ella resopló y se dejó caer en el sillón molesta por la actitud de su hijo, no entendía por qué seguía encaprichado con esa mujer tan promiscua que hasta cuatro hijos tenía sin un padre.— ¿Y te da igual que tenga cuatro hijos de otro?Darius se quedó callado y negó con la cabeza mientras se pasaba las manos por el rostro frustrado.— Verás mamá… — empezó a hablar el rey — hace un poco más de cinco años sufrí un atentado. Me envenenaron y lo que besa droga causó en mí…Él levantó la mirada para observar a su madre, la cual todavía mantenía la expresión indignada por el modo en que la había tratado su hijo.— Yo me volví un salvaje que no controlaba sus impulsos y encontré una joven y hermosa limpiadora en el pasillo…Darius necesitó aclararse la garganta porque se le hizo muy difícil poner palabras a lo que había hecho, sobre todo frente a su madre.— La arrastré a una habitación y abusé de ella repetidas veces.Padme se llevó las manos a la boca, sabía que los hombres eran incapaces