—Ya no quiero que me conquistes, Aarón… —Sus pupilas se agrandan, sus labios se entreabren y su respiración se entrecorta. —Pensé que… —Pensé que ella quería que lo intentáramos. —No quiero que perdamos más el tiempo en algo que es tan obvio. —No entiendo. —Tú me quieres y yo te quiero. Mucho. —Sonrío al escucharla. Dios ya quiero besar esa sonrisa que también se formó en sus carnosos labios —. Sé mi novio, Aarón. —Una mujer pidiéndole a un hombre ser su novio… waow. —Eso no es algo común. —Concuerda ella. —Y tú no eres cualquier mujer. Eres especial, fuerte, inteligente, única en su especie… Y sería un absoluto placer poder estar con alguien así. —Entonces… ¿Dices que sí? —Su sonrisa se amplía, y esta vez es mi rostro el que está entre sus manos. —Sí, Stella Gilabert, quiero ser tu novio —ella se lanza sobre mí en cuanto le respondo. Tengo que actuar con rapidez para poder cargarla sin que se caiga. Nos encontramos carcajeándonos sin control alguno. Y de un momento a otro, nu
31 de enero de 2021. Stella Gilabert. —¡¿Novios?! Pero… pero ¡¿Cómo?! ¡¿Cuándo?! ¡¿Dónde?! ¡¿En qué momento, lugar o circunstancia?! ¡¿Cómo pasó?! —Esas son muchas preguntas para responder, pero no tengo tiempo para hacerlo porque debo seguir trabajando. —Le informo a mi mejor amiga en medio de la llamada que se encuentra haciéndome. —Pero es que ¿cómo quieres que esté tranquila y no te pregunte cuando todo fue tan inesperado? En un momento estaban viajando, en el otro eran felices, luego discutieron y finalmente se hicieron novios. Esto no solo es increíble, esto es demasiado épico. —Exclama, impresionada. —Y eso que no te imaginas lo que hicimos después de hacernos novios… —Susurro, sonrojándome, aun cuando ella ni siquiera puede verme. —Stella, no puedes dejarme así. Eso es un delito, debes contarme todo. —Me da vergüenza, Jez. —Ah, pero bien que no te dio vergüenza follar con él la primera noche de ser novios, eh… —¡Jez! —Entonces sí que lo he entendido bien…. Ustedes fol
—Le pregunté a Jezabel si quería venir con nosotros, pero…—Te dijo que no podía —termina de responder él por mí y yo volteo a verlo. Se encuentra aparcando el auto.—¿Cómo lo sabes?—La invité a venir, le escribí un mensaje. Parece que mañana tiene un examen súper importante en la facultad, así que, por esta vez, pasará.—Si. Aunque la carrera que estudia no es lo que le gusta, y, a pesar de que lleva una vida un poco alocada, ella es muy aplicada en sus clases. Ni siquiera lo hace por sí misma, sino para complacer a su padre.—Tenemos que aprender de los errores de nuestros padres para cuando tengamos hijos. Nada de tener un favorito, ni de obligarlos a estudiar algo que no desean, y mucho menos de comprometerlos con alguien solo por querer asegurar su futuro y descendencia.—¿Estamos pensando en hijos cuando tenemos tan solo un día de novios? —Pregunto, con burla.—No. Estamos pensando en un futuro incierto que, de llegar a pasar, tiene que ser uno diferente a lo que hemos vivido.
—Él está enamorado de Ángel desde lo vio por primera vez. No entendió que no es no, y se quiso propasar en una de las borracheras de mi amigo. En realidad, Ángel es muy tolerante al alcohol, y aunque beba demasiado, pocas veces llega a embriagarse realmente, pero esa vez había pasado algo muy grave, y pasó dos días sumido en todo tipo de bebidas. No salía de este bar, y Hendrick se aprovechó de ello. >>Como te dije: Ángel puede tomar y es difícil que se emborrache, pero aún si llega a suceder, al siguiente día lo recuerda todo, y eso fue lo que pasó. Sé que yo llegué y noté que Hendrick lo llevaba arriba, le dije que me haría cargo. Cuando Ángel despertó luego, quería matarlo. Luego me contó que había tocado sus partes íntimas por sobre su pantalón. Estuvieron a nada de despedirlo, porque todos en este lugar nos conocen desde hace años, siempre venimos aquí. Al final, Ángel dejó que se quedara, porque él tiene una hermana enferma y por ello trabaja turno doble siempre, pero no tiene p
01 de febrero de 2021.Stella Gilabert.Me encuentro ansiosa, pero por suerte, hay varios tipos de ansiedad. Tengo esta pequeña sensación de estar feliz por la locura que cometerás y que por nada del mundo piensas dejar atrás o en el olvido, y, al mismo tiempo, quiero salir huyendo y esconderme, por temor a que nada de lo que he estado planeando desde que me levanté esta mañana, saliera como lo esperaba.Solo debo estar tranquila y, como dijo mi nueva psicóloga, en caso de que no pase lo que deseo, no debo tomarlo mal o como ofensa. No debo dejar que mi negatividad o miedos atrapen y devoren cada parte de mí, debo luchar contra ellos con todas mis fuerzas. Apenas estoy comenzando a trabajar en esto, pero sé que puedo. Tengo el apoyo de las personas que más me importan.Respecto al tema de mi psicóloga, pues, decidí llamarla la noche del domingo… —sí, ese día en el que le pedí a Aarón ser mi novio y luego… pues, ya saben —; ella y yo nos presentamos. Me comentó que su hermano, Richard,
—Dios mío, no sabes cuántos nervios tengo —Susurro, bajando del auto de Ángel y escuchando su risa ronca.—Créeme cuando te digo que con ellos no debes tener problema alguno. Peor es si te tocaran los padres de Archer, ese mal no se lo deseo a nadie.—¿Son malos? —Pregunto con temor.—Depende. ¿Con sus dos hijos? Nah, son un amor; pero, los protegen demasiado, en extremo. Entonces, no suelen aprobar a cualquier mujer para ellos.—Qué extremistas.—Y sus hijos, unos pendejos. Amo a Archer, pero siempre hace lo que su madre le dice, no tiene voz ni voto en su vida. Es un robot que no piensa, no vive y tampoco sueña, porque todo lo hacen sus padres por él.—Eso suena horrible.—Y él es tan ciego que no lo ve. —Se encoge de hombros.Y es entonces cuando veo que en su rostro se forma la sonrisa más sincera que le he visto hasta ahora. Una mujer, que supongo que es la madre de Aarón, sale de la enorme mansión detrás de ella, y toda sonriente y emocionada, trota hasta llegar hasta mi acompañ
01 de febrero de 2021.Aarón Abernathy.No saben cómo me ha tomado por sorpresa el mensaje que he recibido de Stella.Según ella, no podía moverme de mi oficina en todo el día de hoy, y mucho menos, hacer planes para la noche; y, de tenerlos ya, debía cancelarlos. Luego me dijo que no era cierto, pero que le avisara si tenía alguno para reprogramar lo que estaba haciendo —cosa que aún no me dice de qué se trata, por cierto —, y le aclaré que por ella cancelaría al mundo entero, de ser posible. Luego, le dije que no tenía nada que hacer esta noche y que era todo suyo… pero me dejó de escribir.No entiendo. Por un lado, me emociona, y por el otro, la incertidumbre me carcome. ¿Qué estás haciendo, Gilabert? Absolutamente nadie me ha escrito hoy, excepto ella y Jezabel, y esta última solo me envió una carita sonriente. Le pregunté qué significaba eso y me respondió con una carita guiñando el ojo. Cada vez quedo con menos respuestas y más dudas.—Vamos, señor millonario que sí se enamoró —
Junto nuestras frentes y puedo notar como la ambientación del lugar cambia. Una música un poco más calmada invade el lugar y yo tomo su cintura, atrayéndola más a mí y sin poder dejar de admirarla. Ella es muy, demasiado hermosa, pero fuera de su belleza externa, fue la interna la que desde un principio me cautivó. No tuve oportunidad alguna de rendirme, de no querer luchar, y, de haberla tenido, tampoco la hubiese tomado porque la quería y quiero a mi lado. Dejé de insistir cuando ella así lo quiso, pero de mi parte, el sentimiento siempre estuvo. Fuese por lo que hay en su corazón, en su alma o en su aspecto físico, me enamoré de toda ella, y eso es algo que jamás va a cambiar. Las luces bajan de intensidad, dejando el lugar poco iluminado. Noto a las personas hacer un circulo alrededor, pero la verdad es que, ni siquiera me interesa qué están haciendo, todo lo que quiero es seguir disfrutando de estar con mi chica. —Aarón… —¿Sí, Corazón? —Susurro, acariciando su mejilla. —Tenía