¡Esto se pone bueno!
CAPÍTULO 14 ―Creo que es hora de irnos ―Juliette dijo a la ligera mientras cargaba en sus brazos a su hija. ―Ya es muy tarde, ¿Por qué no se quedan a dormir? ―la voz de Connor era baja y miraba a Juliette con profundidad. Ella abrazó a su hija más fuerte y se negó de inmediato. ―No es necesario, además no quiero incomodarte. Será mejor que volvamos. Lanzando una mirada fría a Juliette e ignorándola, le ordeno a una de las empleadas. ―Ve y prepara una habitación. ―Sí. ―la empleada asintió y estaba a punto de irse, pero Juliette la detuvo. ―¡No es necesario! ―ella se volvió para mirar a Connor con ojos obstinados ―Ya te dije que voy a regresar. Había complejidad en su mirada, y Connor también vio la determinación, así que decidió no presionarla. ―Dile al chofer que prepare el auto. Al escuchar a Connor decir esto, Juliette exhalo silenciosamente, sin embargo, había una insatisfacción en su corazón. Ella se obligó a ignorar este sentimiento y siguió al empleado a la puerta. Cu
CAPÍTULO 15 Sabiendo que iban a volver a la casa de Dylan, Madison estaba muy emocionada, hablo durante todo el camino sin parar y salió del auto corriendo después de que se detuvo frente a la entrada. En el jardín, Patricia miraba las rosas cerca del estanque, cuando vio el auto de Connor por el rabillo del ojo, se emocionó de inmediato, pero la emoción duro poco cuando vio bajar a la misma mujer del hospital acompañado de la misma niña. Su intuición le dijo que algo andaba mal, su cara se oscureció y sus ojos se entrecerraron mirando detenidamente a Juliette. En ese momento, Juliette sintió un poco de escalofrío y giro la cabeza para mirar y vio una mujer no muy lejos, frunció las cejas ante el vago recuerdo familiar, sin embargo, su hija la arrastro dentro de la casa antes de que pudiera recordar quien era. En el momento en que Patricia vio a Juliette, apretó las manos con fuerza, enterrándose las uñas en la palma de su mano. «¿Quién demonios eres y que haces aquí?» Los tres
CAPÍTULO 16. Aunque el mensaje era corto, el tono contundente en él hizo que Juliette se confundiera. «¿Por qué me pidió que lo acompañara? ¿No fui lo suficientemente clara con él?» Dejo el teléfono en la mesita de noche y se enterró en la colcha profundamente enredada en su corazón. En realidad, ella no está acostumbrada a este tipo de eventos, y el tener que enfrentarse a todos esos ricachones que pretenden ser mejores que ella, le causa dolor de cabeza, sin mencionar que no tiene ropa adecuada para asistir a ese tipo de eventos. «¡Voy a negarme! Le diré que no, de seguro tiene filas de mujeres esperando que las invite» No obstante, tampoco era fácil negarse, recordó que tanto el cómo su abuelo había sido muy amable con Madison, así que decir que no, sería de mala educación. Se cubrió los ojos con el brazo y se lamentó por tener que tomar una decisión. Al día siguiente, fue a ensayar como de costumbre, para asegurarse de dar una buena presentación, ella practicaba todos los dí
CAPÍTULO 17 Connor causó gran revuelo cuando llevo a Juliette al baile de recaudación, el primero era un hombre hermoso, maduro y sobresaliente, que fascino a todas las mujeres. Esta última era delicada y encantadora y el vestido realzaba perfectamente su figura. Los dos juntos formaban una linda pareja. En medio de los asombrosos aplausos de la multitud, Patricia, que estaba arriba mirando, podría explotar de rabia en cualquier segundo. «¡Maldita sea!» Maldijo para sus adentros, con la insatisfacción escrita en el rostro. «¿Me rechazaste por esa? ¿No es esto humillarme a propósito?!» Patricia apretó los puños con fuerza, decidida a encontrar la oportunidad de enseñarle a Juliette cuál era su lugar. A los ojos de Juliette, el baile fue realmente aburrido. Mientras varias personas conversaban con Connor, ella se hizo a un lado para comer el postre. Justo en ese momento, sonó su celular. Era una llamada de Raquel, ella rápidamente se puso de pie y camino hacia el jardín, contest
CAPÍTULO 18 A pesar de que Juliette se negó varias veces, Connor sostuvo en sus brazos a Madison y corrió con ella en la sala de emergencias del hospital. ―Me duele… ―gimió la pequeña. ―Tranquila, cariño, todo va a estar bien. ―dijo suavemente tratando de tranquilizarla. Pronto un médico se hizo cargo y llevo a Madison a una sala privada, después de algunas revisiones y rayos X, afortunadamente no tenía ninguna fractura, se había golpeado fuertemente y causo un esguince en el hombro, sin embargo, iba a ser necesario un cabestrillo por algunos días. Madison miró asustada la jeringa llena de medicamento para el dolor y se acurrucó en los brazos de Connor. ―¡No quiero! ¡No quiero! ¡Mami! ―Cielo, es para calmar el dolor. ―Juliette le dijo suavemente. ―No quiero… no quiero… Connor la aparto un poco de su cuerpo y la miro a los ojos. ―¿Quieres saber un secreto? ―dijo en voz baja y la niña lo miro asustada, pero de todas maneras asintió ―Yo también le tengo miedo a las agujas. ―¿Tú
CAPÍTULO 19 Cuando Patricia volvió a casa, su estado de ánimo no era nada bueno. Más bien se podría decir que se estaba ahogando en su propia ira. Dejo su cartera en el sofá y le ordeno a la empleada que le prepara su te para dormir. Minutos después, el contenido de la taza, fue lanzada en el rostro de la mucama y esta gimió soportando el ardor en su piel. ―¡¿Eres estúpida o qué?! Te pedí un té de valeriana, ¡Inútil! ¿Para qué sirves? ―Lo siento, señorita, lo siento mucho ―la joven inclino la cabeza con pánico y admitió su error. ―¡Sal de mi vista! La pobre chica abandono a toda prisa la habitación. Patricia bebía un te para calmar sus nervios, pero dudaba mucho que en este momento la ayudara. Hoy había sido humillada por Connor y burlada por esa mujer, y ella no era una mujer que dejara pasar una ofensa. Tendría que buscar la manera de darle a Juliette una lección. ……………………... Temprano a la mañana siguiente, Patricia llego a casa de Connor. ―¿Qué haces aquí? ―él abrió la puer
CAPÍTULO 20 ―¿Me tienes miedo? ―pregunto Connor en un tono coqueto, mirando a Juliette quien se escapó tan pronto se acercó, le gustaba ver su cara sonrojada y es por eso que siempre terminaba por intimidarla. ―Se está haciendo tarde, Dylan debe tener hambre. Además, tú… tú tienes que irte a trabajar. Connor decidió dejarla por el momento, y de hecho hoy tenía una junta importante y está totalmente seguro de que su tía Margarte causaría problemas como las veces anteriores. ―¡Vete, vete, se te hará tarde! ―lo insto a irse. Connor respondió con una sonrisa y luego, camino hacia su auto, abrió la puerta y se subió, estaba a punto de irse, cuando recordó que Patricia estaba en la casa. Se bajó del coche con prisa para informarle a Juliette, pero ella ya se había entrado a la casa. Pensó en volver dentro, pero en ese momento recibió la llamada de su asistente diciéndole que los accionistas, ya habían llegado y que tenía que llegar lo más pronto posible. Miro hacia la casa y finalment
CAPÍTULO 21 Connor golpeteó con sus dedos los documentos de su propuesta, acababa de ser rechazada por la mayoría de los accionistas. ―¿Es decir que rechazan mi propuesta, únicamente porque soy soltero? ― pregunto incrédulo. El grupo de hombres y mujeres asintieron en unanimidad, no obstante, su tía Margaret tenía una sonrisa en el rostro que no podía ocultar. ―¡Esto es ridículo! ―exclamo poniéndose de pie ―¿Qué tiene que ver mi vida privada con la aprobación de un proyecto? Su padre, que estaba a su lado, le dio una mirada de ‘cálmate’ Connor, respiro profundo y continuo. ―Este proyecto es transcendental para nuestra expansión en el mercado europeo, ¿no quieres más ceros en sus cuentas acaso? Uno de los accionistas de más antigüedad negó con la cabeza. ―No se trata solo de números, sino también de la imagen que proyectas. Connor tienes 37 años y un hijo, de la cual no conocemos su madre, puede que entre nosotros esto no sea relevante, pero para el resto del mundo sí. ¿Tienes i