Pasaron dos días desde que llegamos nuevamente a la mansión. A decir verdad, prefería mil veces estar en una casa a solas con Dakota que estar en compañía de mis hermanos, los amaba, pero era detestable no poder tocar a Dakota frente a ellos.
Salí de la habitación mientras que ella se encontraba en un profundo sueño, caminé hasta las escaleras y me topé con Olivia y una mirada un poco terrorífica.
─ ¿Qué? ─pregunté.
─ ¿Me vas a decir la verdad sobre ese golpe de Dakota? Llegaron hace dos días con esa patética excusa de que se cayó y no lo creo, conozco a Dakota lo suficiente para saber cuándo ella miente y cuando dice la verdad ─soltó.
─ La verdad es que se cayó, estaba ebria, salió del baño y se cayó.
─ ¿Acaso le pegaste?
─ ¿Est&a
Dakota.Estaba frente a la puerta mirando como Ambrose golpeaba al chico frente a mí.Se qué esto sonará mal, pero me gustó ver esta faceta de Ambrose, era como un hombre temible, un hombre indestructible, un hombre salvaje. Ese mismo hombre salvaje que me follaba como una bestia.El chico quedó inconsciente después de tantos golpes, sin pensarlo y por iniciativa y excitación, caminé hasta Ambrose y pegué mis labios a él.─ ¿Qué... que haces? ─preguntó con una sonrisa.─ Estoy excitada.Me tomó de la cintura y me llevó hasta una de las paredes, subió mi vestido y se agachó frente a mí, bajó mis bragas hasta mis tobillos y metió su cabeza entre mis piernas, solté un gemido al sentir su lengua dando pequeños masajes en mi parte sensible.─ ¡INFERNO! ─grité
Dakota.─ ¿A dónde me llevarás? ─pregunte al subir a la camioneta.─ Al infierno.─ ¿Sabes qué tus sarcasmos a veces me asustan un poco?─ ¿Por qué? Yo sé que te gusta todo, absolutamente todo de mí ¿O me equivoco?─ No, no te equivocas.Ambrose arrancó el auto y se mantuvo conduciendo todo el trayecto en silencio, me limité en mirar por la ventanilla algunos lugares que ni había podido ver desde que llegué a París, pero tampoco quería decirle a Ambrose sobre esos lugares, sé que ahora estábamos pasando por un momento del cual el no tenía idea sobre las amenazas que recibió hacía mí.─ Estás muy callada y eso es algo nuevo ─soltó.─ Estaba pensando.─ ¿Pensando en qué?─ No lo sé, muchas cosas qu
Inferno.─ ¡Feliz cumpleaños! ─gritó Olivia al verme salir de la habitación, di un salto ante su grito, ni siquiera recordaba que vivía en esta casa ya que siempre estaba entre las piernas de Charles.─ Mmm Gracias.─ Oye, por lo menos alégrate un poco, es tu cumpleaños y eso sólo pasó una vez al año.─ No celebro mi cumpleaños ─respondí caminando hasta las escaleras.─ Eres un idiota, todo mundo celebra su cumpleaños.Me volteé a ella ─ ¡Pues, yo no! ─solté.─ Ay, pero que escandaloso.Bajé las escaleras y llegué hasta la puerta de la oficina de mi padre, giré el pomo y solté un suspiro al entrar al lugar.Tomé lugar en la silla giratoria y me dispuse en mirar algunas fotografías de la familia.Cuando éramos una familia, no
Dakota.Estaba terminando de arreglarme para la famosa celebración del cumpleaños de Ambrose. Coloqué en mis labios más del labial que me había prestado Emily.Iríamos a una discoteca con tema neón, llevábamos ropa muy escandalosa, y a eso se le sumaba mi labial que podía alumbrar la vida de las personas.Salí del baño y frente a mí estaba Ambrose con una expresión de enfado, él no quería ir a ese lugar y era obvio que tenía que ir, estábamos celebrando su cumpleaños.─ ¿Podrías quitar esa cara? Es una discoteca no un maldito matadero ─ solté.─ Dame un beso y quizás me lo pienso.Caminé hasta él y le di un beso corto en sus labios, aunque no recordaba mi labial y de inmediato solté una carcajada al ver sus labios de ese color rosa, no s
Dakota.Llegamos hasta los chicos que estaban en una enorme mesa, Charles volteó a nosotros y por su expresión sé muy bien lo que pensó.─ ¿Dónde estaban? los estuvimos buscando ─preguntó Emily.─ Huelen a sexo ¿Estaban follando? ─preguntó Olivia.Ambrose rodó los ojos y pasó por su lado sin dirigirle la palabra.─ Estábamos cerca del DJ ─respondí.─ Estaba masturbando a mi novia ¿Hay un problema con eso Olivia? ─preguntó Ambrose.Sentí que me había puesto de todos los colores posibles, sentía vergüenza, pena, de todo un poco.─ ¡Vaya! Tienes que enseñarme el lugar ─contestó Charles con una sonrisa.─ ¡Ay por dios chicos! ─exclamó Emily.Caminé hasta Ambrose y tomé lugar a su lado, pero él me tom&oac
Inferno.Después de estar más de quince minutos en la pista de baile, decidimos empezar a beber para celebrar mi cumpleaños, al igual que los nuevos integrantes de la familia Wembley.Tomé lugar en una de las sillas y Dakota se sentó frente a mí, ella se encontraba hablando con Olivia y yo sólo veía sus labios moverse mientras hablaba, como mordía sus labios, como pasaba su mano por su cuello y como miraba en mi dirección.─ ¿Qué piensas de eso Inferno?─ ¿Qué? ¿De qué? ─pregunté a Charles.─ Nada olvídalo idiota, nunca puedo tener una conversación pacífica contigo, quién sabe en qué siempre piensas.─ ¿Qué tal si nos vamos a casa? Estoy un poco cansada y...─ Vámonos a casa, al menos que alguno quiera seguir ─soltó Thomas
Inferno.Me levanté de la cama y fui hasta Dakota, tomé su rostro entre mis manos y pegué nuestros labios, ella pasó sus manos por mi pecho poco a poco mi piel estaba hirviendo con su tacto.Tomé el dobladillo de su suéter de pijama y lo levanté, ella terminó quitándolo, pegué nuestras bocas y ella llevó una de sus manos a mi pantalón tocando mi pene por encima de mi pantalón.─ Espérame aquí ─dije caminando hasta la puerta.─ ¿Adónde vas?─ Espérame aquí ─ordené.Salí por la puerta con mi pene muy notable en mis pantalones, bajé la escalera y llegué hasta la cocina al encender la luz me topé con Charles.─ ¿Que mierda haces aquí? ─pregunté.─ Oye que le paso a tu pene.Pasé por su lado y llegu&e
Inferno.Me levanté con un fuerte dolor de cabeza, pasé mis manos por mi rostro y solté un suspiro.Estaba desnudo en la cama con Dakota a mi lado, su cabeza estaba sobre mi pecho. Al final la volví insaciable igual que yo y terminó teniendo cinco orgasmos.Me levanté y fui hasta el cuarto de baño, cepillé mis dientes y tomé un bóxer y un pantalón de chándal.Salí de la habitación bostezando y vi a Olivia salir de la de ella con unas maletas.─ ¿A dónde vas? ─pregunté.─ Me voy a casa.─ Mmm ¿Y Charles lo sabe?─ Charles y yo decidimos dejar esto hasta aquí, yo... yo no puedo estar con él y...─ ¿Dejaste a mi hermano? ─pregunté.Recordé que anoche vi a Charles en la cocina solo, quizás ya habían hablado y yo m