─ ¡Arriba hijo de puta! ─gritó uno de los idiotas que se había encargado de torturarme.
Desde el día que recibí los tres impactos de bala, al parecer estaba vivo, los hermanos Bush lo tomaron como una buena manera de torturarme y torturar a mi familia haciéndome pasar por muerto, no tenía idea de dónde estaba, hasta que un día desperté con mi torso vendado.
Los idiotas me dispararon y ellos mismos se encargaron de curarme, pero no para bien, ya que desde ese día me han estado torturando.
No sé qué en país nos encontramos, solo sé que estoy en un sótano atado a una pilastra, que unos malditos idiotas a los que le pagan, se dedican a golpearme y hacerme un montón de cosas.
Abrí mis ojos cuando sentí las manos de unos hombros sobre mí, me arrastraron por todo el suelo hasta tenerme sobre un
Dakota.Pasé las manos por mi estómago y las lágrimas cayeron de mis ojos.─ Hola pequeño o pequeña, tu mami te ama.Inmediatamente sentí unas enormes ganas de vomitar, corrí hasta el baño y quedé de rodillas frente al inodoro expulsando lo poco que había comido.Hace una semana había vuelto a casa, ya estaba un poco mejor, me sentía definitivamente con unas enormes ganas de salir adelante y cerrar ese ciclo de mi vida que era la perdida de Ambrose.Ya estaba plenamente segura que él no estaba vivo y no volvería a mí, era una de las cosas que decidí olvidar.Escuché toques en la puerta seguido de la voz de Olivia─ Dakota, Dakota ¿estás bien?─ Sí, sólo estoy vomitando.Me levanté del suelo y abrí la puerta, Olivia llegó a m&
Inferno.Después de programar con mis hermanos "El rescate" ya venían por mí, estaba junto a los hombres a cada lado esperando que llegaran mis hermanos.Llegó una camioneta negra y bajó Thomas con un maletín y de la otra puerta bajó Charles dirigiendo su mirada a mí.─ No se acerquen ─dije a mis hermanos.Caminé hasta Thomas y tomé el maletín, dándoselo a uno de los chicos que me sacó de ese lugar.─ Aquí tienen, ya saben nada paso y si hablan ustedes pasarán buen tiempo en la cárcel por mantenerme en un sótano por meses.Los hombres asintieron y caminaron hasta el auto, fui muy condescendientes con ellos en dejarlos con vida.Thomas llegó hasta a mi apretando mi cuerpo, hice una mueca de dolor ante uno de los golpes que no sanaba del todo en mi estómago.─ Dakota
Inferno.Estaba nervioso, más que nervioso ya que jamás en mi vida había, aunque sea tratado de ser cuidadoso con una mujer o aunque sea tenerla frente a mí de la manera en cómo podía tener a Dakota. Nunca me había gustado tener a una mujer con su rostro frente a mí, siempre las follaba despalda y supongo que estaba bien y que ellas lo tomaban como algo normal ya que follaba con ellas una sola vez.Pero con Dakota era distinto, Dakota desde el primer momento en que toque su piel, se impregnó en mi cerebro y de ahí nunca iba a salir. Ella me hizo ver el mundo de otra manera, me hizo tocarla y amarla de maneras que para mí resultaban extrañas, pero que logré comprenderlas y pensar en que era algo nuevo y algo que me gustaba.Coloqué mis manos en su cintura y ella pegó sus labios a mí, metió su lengua lentamente en
Dakota.DOSMES DESPUÉS...Todas las mujeres tienen un sueño en la vida, enamorarse, casarse y tener hijos.Mi sueño es la vida era viajar a Londres y conocer el maravilloso lugar del que muchos hablaban.¿Quién diría que en ese lugar conocería al amor de mi vida y el futuro padre de mis hijos?Son pequeñas cosas que hoy quisiera contarles a mis padres, hablarle de lo buen caballero que es Ambrose, de lo buen padre que logrará ser.Hace dos meses volvimos a estar juntos y está vez en definitiva nadie nos separará, tendremos a un hermoso niño junto a nosotros que nos alegrará la vida día y noche.Miré mi aspecto por última vez en el espejo y solté un suspiro, volteé y vi a Emily y Olivia detrás de mi con una sonrisa en sus rostros.<
Inferno.CUATROAÑOS DESPUÉS...─ Amor, él está bien solo se cayó, no se le saldrán las tripas por la rodilla o algo así ─ solté.─ Esto es tu culpa, como te vas a descuidar así de Issac, sabes muy bien que él no puede estar sin correr.Mi pequeño terremoto Issac, tenía cuatro años y era un niño muy imperativo, lo entendía por completo yo era igual a su edad, según las historias de mi madre.─ Estoy bien mamá, sólo me duele un poquito ─dijo Issac y solté una carcajada, Dakota volteó a mí y me puse serio.─ Vamos al hospital, no creó que solo te duela un poquito, tienes la rodilla hinchada.Cargué a mi pequeño terremoto hasta el auto y Dakota subió al auto.Coloqué a Issac en el asi
Dakota.Hoy sería la gran celebración del cumpleaños de Ambrose y aunque aún no estuviera del todo feliz por la pequeña fiesta sorpresa que teníamos preparado para él, estaba tratando de dar lo mejor de mí para que cambiara esa triste manera de ver la vida. No quería justificar el hecho de que perdiera a sus padres en su día especial, pero el merecía ver el mundo desde otra perspectiva y eso era lo que estaba tratando desde que me convertí en su esposa.Las cosas no estaban muy bien la familia ya que dentro de una semana sería el juicio entre Charles y Olivia por la custodia completa de Maeve y eso me tenía completamente derrotado ya que se trataba de mi mejor amiga desde que tengo uso de razón, hace dos años dejamos de entablar conversación desde que las cosas empezaron a ponerse feas.A inferno nunca le
Dakota.El sonido de la lluvia retumbaba en la habitación y eso solo me llevó a sobresaltarme en la cama por la jodida impresión.Ambrose se removió a mi lado y al ver que estaba sentada en la cama hizo lo mismo, pasó una de sus manos por mi cabello hasta colocar su mano en mi espalda baja.─¿Estás bien amor? ─preguntó antes de dejar un beso corto en mi hombro.─Odio los truenos.Él mostró una sonrisa y dejó un beso en mi mejilla para después acostarse en la cama.─Ven aquí ─me tomó de la mano llevándome hasta él y coloqué mi cabeza en su pecho para después pasar una de mis manos por su abdomen.Tomó la mano en donde estaba mi anillo y la llevó a sus labios y luego dejó un beso corto en mi cabeza.─Deberíamos de ir a la habitación de Issac y Allison para
Charles.Me acosté en la cama y solté un suspiro de cansancio, llevé mis manos a mi nuca y cerré mis ojos para dejarme consumir por el sueño tratando de evitar repetir esa jodida pesadilla en donde Olivia era la protagonista, pero el sonido de mi teléfono logró interrumpirme.Me estiré hacia la mesita de noche para tomarlo y pude visualizar el nombre de Dakota en la pantalla inmediatamente sentí una fuerte presión en mi pecho ya que esto no era normal. Era casi media noche y estas llamadas nunca eran buenas.─Dakota ─contesté.─Charles... ─la voz de Dakota sonó triste y luego de eso un sollozo se hizo presente.─¿Qué pasó Dakota? ¿Estás bien? ¿Pasó algo con mi hermano? ¿Los niños?─Olivia tuvo un accidente y esta grave... yo... estoy de camino al hospital.