Cuando aparcamos en el estacionamiento del edifico de Nero, este ya no esperaba para ayudar a Mark a subir las cosas, primero me ayudo a bajar.
— ¿Cómo te sientes? — me pregunto.
— Bien, desayune esta vez, me tome la vitamina, sabe raro, pero la tome con jugo de toronja, compre uno de los que me dijiste y eso evito que tuviera nauseas— relate orgullosa de mí misma.
— Me alegro — dijo sonriente y luego se dirigió a Mark—. Tu debes ser Mark, yo soy Nero, es un placer conocerte en persona
— Yo digo lo mismo, guapo— le guiño un ojo a lo que Nero solo emitió una risa.
Ambos hombres se fueron platicando felices de la vida mientras yo me quedé detrás de ellos, tenia hasta ganas de reír porque hablaban como si fueran comadres de toda la vida, en el fondo me sentí aliviada de que se agradaran de forma inmediata, pues son las dos personas que en este momento representan muchísimo para mí.
Una vez terminaron de subir todo, Mark se despidió de nosotros.
— Te veo mas tarde en el trabajo, Dali
— Nos vemos, ve con cuidado — dije a Mark antes de que se fuera.
— ¿Seguirás trabajando? — Me pregunto Nero
— Si, al menos hasta que no me genere problema— señale mi estomago— Cuando este mas grande me tomare un descanso.
— Me gustaría mas que dejaras de trabajar, pero si ya tomaste la decisión no te voy a detener — se sentó justo a mi lado y acaricio de repente mi aun plano vientre.
— Solo será hasta que me brote la panza — acaricie su mano un poco—. Nero… ¿puedo preguntarte algo?
— Claro.
— ¿Cuándo te enamoraste de mí? —pregunte a lo que él se quedó pensativo.
— En el festival de primavera, era tu primer año, me acuerdo de que estaba con Louis y los demás, tú estabas peleando con el chico que vendía los boletos para los juegos mecánicos, porque te veía muy pequeña, no parabas de repetir “tengo 16”, hasta nosotros desconfiamos de que fuera verdad
— ¡Los tenía! — me defendí haciendo un ligero puchero
— Pero te veías más pequeña, después cuando le diste un golpe a ese tipo porque te dijo que te daba el boleto si le dabas un beso fue muy gracioso, desde ese momento me pareciste una chica muy interesante, asi que cuando me cruzaba contigo me la pasaba viéndote, ahora cuando lo digo suena un poco aterrador — reía nervioso y tallo su cabeza—, después entraste al club de música y ahí te pude conocer también, eras una chica fuerte…por eso…cuando llegaste aquí ese dia, sentí que estaba viendo a otra mujer.
— Ni siquiera yo se en que momento deje de ser la mujer que era, definitivamente no era esto en lo que planeaba convertirme, alguien con miedo y con sentimientos hacia alguien que me hace mucho mal
— Todavía lo amas ¿no es así?
— … si… pero…. Mark me recomendó que debería ir a terapia
— Yo estoy de acuerdo en eso, pero como amigo puedo decir que tu debes sentirte lista para asistir, aunque Mark o yo te digamos muchas cosas, eres tu quien debe tomar la decisión de superarlo.
— Quiero hacerlo porque quiero quererte como tú me quieres.
— No lo hagas por mí, llaverito, tienes que hacerlo por ti — me observo de reojo y acaricio ahora mi mejilla—, yo quiero verte feliz, quiero ver que florezcas nuevamente.
Me perdí un momento en el color de sus ojos, aun me daban ganas de salir corriendo ante tales gestos de su parte, pero esa vez fue diferente, en vez de salir corriendo, apoye mi cabeza en su hombro, entonces cambio y retomo las caricias en mi vientre, pasando también a rozar mis manos que descansaban en mi regazo, me sentía tan bien a su lado.
— Mark dice que el bebé siente lo que yo, ¿Crees que se sienta triste por mi culpa? — pregunte a Nero
— Tal vez, debes intentar sentirte mejor para que no se sienta triste, podríamos ir al acuario, tienen nutrias.
— ¿Hay un acuario aquí? —pregunte abriendo bien los ojos.
— Si ¿Nunca has ido? — pregunto con extrañeza, yo desvié la mirada
— Louis no me dejaba ir a ningún lado, si soy sincera, no conozco muchos sitios de esta ciudad.
— Eso tendrá que cambiar, tenemos muchos que conocer ahora — propuso para después ponerse de pie —. Tengo que ir a trabajar, te pasare dejando al trabajo y por la noche te recogeré, el fin de semana iremos de paseo a varios lugares que estoy seguro te gustaran
— ¿Lo prometes? — dije de repente
— ¿Qué cosa?
— Que iremos juntos a esos lugares — no le quite los ojos de encima, había anhelo en mi mirar.
Nero se arrodillo frente a mi y tomo mi rostro entre sus manos, se acerco depositando un tierno beso en mis labios, les juro que yo quería llorar con semejante acto de amor de su parte, es que no logro concebir que este hombre me ame de esa forma y que yo idiotamente nunca lo hubiera notado o que no lo quisiera notar hasta ese momento.
— Te prometo que conoceremos muchos lugares juntos — Prometió formando una sonrisa en sus labios, mostrándome ese bello hoyuelo.
— Nero… ¿podemos dormir juntos hoy?
— Claro que si — beso ahora mi frente y volvió a ponerse de pie.
Yo sonreí, con tan poco como un par de besos se me olvido todo, se me olvido Louis, se me olvido de que seguía con un toxico amor viviendo en mi interior. Cuando me dejo en el trabajo yo seguía feliz, se me notaba en el rostro, todo mundo lo noto, Mark solo me dijo que Nero era un buen hombre que me diera una oportunidad con él, que debía soltar mi terrible pasado, sé que tiene razón.
Mi repertorio esa noche no fue de música triste como cada noche, en vez de eso quise tocar algo un poco mas alegre, ahora me pedían mas seguido que cantara, ya fuera covers o canciones propias, esa tarde fue de covers hasta mi descanso, después de eso, me la pasé escribiendo de forma rápida una canción que quería estrenar justo en ese momento.
Al iniciar mi ultima ronda de canciones, coloque mis escritos cerca para leer la letra, nada de eso tenía música formada, pero ya se me ocurriría algo, empecé a cantar al son de una melodía suave, justo en el coro, Nero llego para escuchar esa parte en especial.
— “¿Me querrás todavía, cuando ya no sea joven y hermosa? ¿Me querrás todavía, cuando no tenga nada más que mi dolorosa alma? Sé que lo harás, sé que lo harás, sé que lo harás” — cante mirándole en todo momento, él movió su cabeza casi como una afirmación, incluso movió los labios y yo entendí lo que decía: “lo hare”
Sonreí para mis adentros mientras terminaba mi improvisada canción, era la ultima de la noche, la había reservado para ello, recibí aplausos y me dispuse a retirarme, un sujeto de mediana edad me detuvo antes de llegar hacia Nero.
— Señorita, me parece que usted tiene un verdadero talento ¿no le gustaría ser famosa? —estaba por responder, cuando Nero lo hizo por mí.
— No es muy confiable en esta ciudad que alguien llegue de la nada ofreciendo fama a una mujer.
— ¿y usted es? —pregunto el hombre enarcando una ceja
— Su pareja, entenderá que vea esto de manera sospechosa — Dijo Nero posando sus manos en mis hombros.
— Es muy entendible, sin embargo, no vengo con malas intenciones, mire usted — le entrego una tarjeta de presentación—, soy un productor y agente musical, puede incluso buscarme en internet, le aparecerá más información de mi persona. Su novia tiene una voz hermosa y un don innato, seria tonto si no le permitiera darse a conocer.
— Eso lo decidirá ella — dijo Nero de inmediato.
— Bueno yo…tendría que pensarlo, señor…
— Jacobs, Elías Jacobs — se presentó—, piénselo, señorita, y llámeme, su novio puede estar presente en todo momento si usted se siente más segura así, volveré a Los Ángeles en dos meses, espero volver a verla entonces.
Ambos nos despedimos del productor, nos quedamos viendo entre nosotros después de eso, no podía creer que había tenido esa conversación con alguien de la industria musical, ni en mis más locos sueños habría imaginado que seria descubierta, pero eso no fue lo primero que comente con Nero.
— ¿Somos pareja? — le pregunte a lo que él se puso rojo
— No…bueno… no sé, solo se me ocurrió decirlo porque pensé que era un pervertido — dijo riendo nervioso.
— Oh…— exclame
— ¿Te gustaría intentarlo? —me pregunto entonces.
— Si…espera ¿intentar qué?
— Lo del productor, no pienses que no me encantaría ser tú pareja, pero preferiría que fuera cuando tu me quieras de verdad, no solo porque seremos padres.
— No me acostumbro a eso de ser padres juntos, pero tenemos tiempo para que pueda asimilar todo lo que esta pasando entre nosotros— respondí sincera—. Sobre el productor, me gustaría hacerlo, aunque me da miedo por mi estado.
— Ya veremos todo eso, te acompañare cuando tengas que ver a ese viejo.
Rei ante la forma en que le dijo viejo, creo que se puso un poquito celoso por la forma en que se me acerco inicialmente o por el tono de voz que uso para dirigirse hacia mi antes de que apareciera como mi pareja protectora, aunque si les soy sincera, no me molesto para nada que dijera ser mi novio.
En un abrir y cerrar de ojos había pasado un mes, Nero y yo aun vivimos juntos, creo que nuestra relación ha mejorado bastante, por la mañana él se va a trabajar y yo me quedo en casa hasta las dos de la tarde que me voy al trabajo, Mark es el que pasa por mí. Acabo de cumplir las doce semanas de embarazo, mi vientre apenas se esta abultando, se ve gracioso.—¿A qué hora pasara Nero por ti? —pregunto Mark.—No debe de tardar, la cita es a las siete y son las seis— observe el reloj que estaba en la pared de la cocina, yo estaba comiendo un poco de pastel.—¿Y ya podrán saber si es niño o niña?—&nbs
Esa noche, en la que me entregue a Nero, fue maravillosa, lo hicimos varias veces hasta quedarnos dormidos, yo estaba entre sus brazos, no creo haber descansado tan bien como aquella noche.Por la mañana, me desperté con la luz que se colaba por las cortinas, me frote los ojos solo para darme cuenta de que Nero ya no estaba junto de mí, me alce llamándole en la habitación, justo en el momento en que iba saliendo del baño.—Ah, lo siento ¿te desperté? — me pregunto volviendo conmigo a la cama, me beso el hombro y se recostó.—Pensé que te habías ido—Solo fui al baño — me abrazo a lo que sonr
—L…Louis — solo eso atine a responder, de manera inmediata intente que no llevara sus ojos a mi vientre, agradezco que la ropa holgada aun oculte mi estado.—Estuve llamándote por dos cuadras ¿de verdad no me escuchabas?—No, yo…tengo que irme— dije apartándome lo más que pude—Espera, espera ¿A dónde vas?—Mi trabajo — respondí— … ¡y aléjate de mí! —grité aterrada—No te voy a dañar…mi amor — sujeto mi brazo, a simple vista podría parecer un simp
Esta semana he estado escribiendo muchas canciones, no falta mucho para que se cumplan los dos meses que nos dijo el sr. Jacobs, hablamos por teléfono y se sintió contento de que decidiera aceptar la oferta, aunque tuve que serle sincera y comentarle que estaba en pleno embarazo, no me puso ninguna traba por eso.—¿Qué haces, amor? — Nero entro a la habitación con un plato de fresas con crema—, aquí esta tu comida, por cierto—Gracias — sonreí cual niña pequeña, los antojos ya se estaban haciendo muy presentes— estaba escribiendo canciones, se las quiero enseñar al Sr. Jacobs cuando regrese.—¿Puedo leerlas? — se sentó justo a mi lado y beso mi hombro.—¡Si! Quiero saber tu opini&oa
Narra Nero:En una película escuche que cuando conoces al amor de tu vida, el tiempo se detiene, me acuerdo bien que me reí porque se me hacia algo bien tonto, pero cuando la vi, peleando con alguien mas grande que ella puedo jurar que todo a mi alrededor se detuvo, nunca me había interesado alguna mujer más allá de lo sexual, pero ella…esos ojos tan fuertes, su forma imponente, pero que criatura más bella se habían encontrado mis ojos.—Si que tiene agallas esa chica — dijo entre risas, Louis—, no me imagino que habilidades debe tener en otros asuntos.—No digas idioteces, no parece de esas chicas — respondí de inmediato—¿Qué? ¿ya te enamoraste? — paso el brazo por mis hombros, nuestros demás amigos re&iacu
Narra Dalia:Desperté a la hora usual, antes que Nero, el hombre seguía profundamente dormido, en estos días le habían cambiado el turno y le tocaba pasar una buena parte de la noche en el hospital, llegaba cerca de las cinco de la mañana, asi que tardaba bastante en pararse.Le di un beso en la frente, lo arrope bien y fui a la cocina para dejar listo su desayuno, tenia que ir a hacer unas compras, pero no lo dejaría sin comida, deje todo en el horno junto con una nota.“amor, salí a comprar algunas cosas, tu comida esta en el horno. Te quiero ♥”Tome mi bolso, unas bolsas mas grandes para las compras y partí de casa, cuando subí al elevador me quede viendo mi panza, ya estaba en los cuatro meses, y h
El día brillaba tanto y yo estaba emocionada. Después de unos días en los que estuve muy deprimida por culpa de Louis y su afán de recordarme cosas tristes, me encerré en casa sin querer salir a ningún lado, Nero no podía dejarme sola pero tampoco podía faltar a su trabajo, tuvo que inventar una enfermedad para obtener una incapacidad, durante ese tiempo me mantuvo distraída que mi depresión paso rápidamente.— Mira amor lo que te traje — Nero entro a la habitación con un pequeño pastel de fresas.— ¿pastel? ─ pregunte alzándome — ¿es de fresa? — me brillaron los ojos— Si, tu favorito actualmente — se sentó a mi lado en la cama y tomo una cuchara para acer
Una vez firmado el contrato no tardamos nada en iniciar con las grabaciones de las canciones en el estudio que el sr Jacobs nos permitió usar, estaba en los primeros pisos del edificio así que no tenía que caminar mucho para llegar hasta el, aun debía cuidarme mucho por mi presión, tenía muchos problemas también con los mareos, había momentos en que me sentía dueña del mundo pero en dos segundos todo me daba vueltas así que tenia que sentarme porque de otra forma podría caer, sumado a eso las hermosas nauseas matutinas simplemente no me abandonaban tampoco, nunca pensé que llevar un embarazo podría ser tan difícil, una de as chicas que trabajan aquí y que ya es madre me dijo que todo es completamente normal, me dio algunos consejos para que llevara todo de una