Emma le contó todo a Jun en los minutos que le quedaban. Aparentemente él chico había tenido un encuentro de una noche con un Alfa en un famoso bar, donde había sido invitado por unos amigos. No sabía el nombre de la persona y tampoco le interesaba saberlo así que continuó su vida con normalidad. Hasta que un encuentro con el mismo hombre lo dejó estupefacto y más aúnal saber que era su director—Legrand. Al parecer todos estaban malinterpretando lo que sucedía entre ambos y pensaban que Legrand estaba siendo hostil con Emma y de ahí los rumores. Jun se quedó a ver la grabación y pudo notar que el Alfa no quitaba los ojos de encima del Beta. Incluso era más estricto con él—y aún más si lo veía siendo muy amistoso con alguien más—específicamente Alfas. Escúchame, si esta situación empieza a impactar tu desempeño o te sientes incómodo, déjame saber por favor. Haré todo lo posible por ayudarte. Jun recordó algo que le había dicho al chico, pero Emma sólo sonrió y agradeció la oferta
Jun se despertó sintiéndose incómodo—abrió los ojos lentamente, adaptándose a la luz de la mañana o quizás de la tarde—no estaba seguro de la hora o incluso el día que era. Estaba desnudo, debajo de una cómoda manta y en una inmensa cama que ya reconocía—era la habitación de Brendan. No recordaba en que momento se habían movido, pero debido al desastre en el que se encontraba la alcoba, probablemente no era reciente. Sintió un grande y fuerte cuerpo presionado contra su espalda, y una respiración caliente acariciar su cuello—y no pudo evitar estremecerse. Jun se encontraba entre los brazos de Brendan y se sentía increíblemente bien. Su corazón latía con fuerza al estar en una posición tan íntima. Estaba sumamente feliz y no quería que el momento terminara. Su cuerpo ardía y su interior palpitaba, y esa incomodidad fue lo que lo despertó en primer lugar—era como si su cuerpo estuviera inquieto al no obtener lo que necesitaba. Las caricias de un Alfa. Sus caderas empezaron a movers
Jun se despertó adolorido y un tanto desubicado. La luz de las ventanas molestaban sus ojos, así que se cubrió con las manos y luego de acostumbrarse a la claridad, observó su alrededor. La habitación estaba ordenada, lo cuál era muy diferente a lo que había visto la última vez que despertó. Salió de la cama con mucho esfuerzo y se tambaleó al momento de sus pies tocar el suelo."Ugh..."Nunca pensó que pasar el celo con un Alfa sería tan intenso, y finalmente entendió a que se refería Brendan. Incluso se le hacía difícil creer que un Omega podía aguantar la intensidad de un Alfa en celo.Jun caminó hacia el baño y se miró en el espejo. Su cabello estaba desordenado, ojos hinchados y el cuerpo lleno de moretones."Ahh..." Suspiró.Ya estaba algo acostumbrado a verse en tal estado.Entró a la ducha y se dió un exhaustivo baño. Trató de ignorar los moretones en su cuerpo pero el dolor se lo impedía.Al terminar, se secó y salió a la alcoba. Su ropa estaba doblada y planchada en un sil
La mañana del lunes, y debido a que no tenía mucho tiempo de sobra antes del viaje, Jun contactó a Mikhail para que pudieran verse y conversar luego de que regresara en una semana. También había agendado una cita con su doctor en dos semanas para ver cómo su cuerpo había mejorado. Trató de manejar temas importantes lo más pronto posible. El mismo día, solicitó un permiso en el trabajo para viajar y pudo notar las miradas poco amistosas que recibía, y los murmullos de algunos. Todos sabían que acompañaría a Brendan en uno de sus viajes al exterior y al parecer lo detestaban. Lo cual no entendía, ya que todos sabían que era su secretario temporal, por lo que debería ser normal acompañarlo.Los rumores de que seducía a un Alfa volvieron a resurgir en el trabajo y estaba aliviado de que al menos no estaría allí para escucharlos.El martes en la noche, Jun se encontraba haciendo sus maletas. Su habitación estaba organizada como de costumbre, pero por alguna razón había prendas que no podí
Fue un largo camino luego de dejar atrás el aeropuerto—pero Jun estaba emocionado, ya que finalmente podía ver una gran propiedad asomarse a lo lejos. Estaba feliz de poder llegar a su destino, ya que estaba algo cansado por estar en constante movimiento.Se detuvieron en un gran portón donde dos hombres intentaron verificar sus identidades, pero lo descartaron al ver a Brendan asomarse a la ventana del auto. Detrás de ellos los acompañaban varios vehículos y Jun pensó en lo exagerado que era toda la situación. Parecía que eran parte de una caravana debido a la cantidad de autos que los acompañaba.A medida que se acercaban, Jun estaba impresionado con el increíble panorama. Había una fuente en el centro y hermosas flores a los lados del camino, cada una parecía estar alineada individualmente con una increíble organización y diseño. Todo parecía ser parte de un jardín botánico debido a los diferentes tipos de árboles y flores que se observaban.Sin embargo, lo que finalmente lo cautiv
Jun pudo notar que los demás chicos acompañándolos en el jardín eran bastante antipáticos. Nunca trataron de incluirse a la conversación y prefirieron mantenerse alejados. Ambrose hacía comentarios de vez en cuando que parecían estar dirigidos a ellos cuando notaba sus miradas y risas contenidas. Era notable que había algún tipo de enemistad entre ellos.Después de algunas largas horas, la conversación se resumió y Jun se despidió, diciendo que iría a su habitación para organizar su equipaje—y luego preparase para acompañar a Brendan a la cena junto a su familia."¿Me acompañas?" Le peguntó a Noah mientras se ponía de pie y este asintió.Ambos caminaron hacia el segundo piso guiados por una de las sirvientas, ya que al parecer quería mostrarle a Jun su alcoba."Esta es su habitación, señor. Si necesita algo, solo debe tocar el timbre que está justo al lado del interruptor de la luz." Explicó la señora con un fuerte acento italiano."Si, lo tendré pendiente. Muchas gracias."La sirvien
Brendan se paró de la mesa, ajustó su traje y miró a su abuelo con una expresión curiosa."Creo que deberías dejar de provocar al tío Franco. Sabes muy bien que es propenso de hacer tonterías cuando no obtiene lo que quiere—justo como un niño."Salvatore se rio a carcajadas ante las palabras de su nieto."Solo tú y tu hermano podrían expresarse de esa forma de sus mayores." Dijo mientras se paraba de su asiento."Solo soy sincero.""Sí, ha sido así desde que eras niño. Por eso supe de inmediato que tú podrías dirigir las compañías como se debe. Cada uno de mis hijos tiene su punto fuerte... Franco debe encontrar el suyo, pero solo lo hará cuando deje de sentirse inferior a los demás."Dijo en un tono serio."Por lo que veo... eso nunca sucederá." Agregó con una cara inexpresiva. "Entonces, ¿de qué querías hablarme?"Su abuelo se esforzó para no reír y lo miró con ojos cálidos. "...Anunciaré que serás mi sucesor en nuestra reunión anual."Brendan frunció el ceño al escuchar sus palabras
La noche avanzó tranquilamente. Los Alfas conversaban mientras los Omegas solo sonreían, agregando comentarios superficiales—lo que dejaba en evidencia que los temas a discutir no eran su fuerte, así que simplemente continuaban comiendo de sus platos elegantemente.El único que se atrevía hablar era Aidan, quien liberaba un aire de confianza y parecía que muchos en la mesa lo respetaban hasta cierto punto. A excepción de los dos Omegas que Jun había conocido en el jardín—Josua y Riz—y al igual que sus compañeros. Jun no entendía a que se debía la actitud tan despectiva del grupo.Josua estaba sentado al lado de Franco, y no paraba de tocarlo de forma seductora y un tanto exagerada. Lucia—la madre de los gemelos—se veía incómoda y evitaba mirar en su dirección.Riz miraba a Jun con animosidad, al lado de Raffaele—quien parecía ser su acompañante, pero Jun pudo notar las miradas acaloradas que le lanzaba a Brendan.Increíble.Aidan continuaba hablando animadamente, esta vez con su padre