Salvatore los vio alejarse, decidió seguirlo a distancia sin que lo vieran.Llegaron a la hermosa casa de campo donde vivian, los vio bajar, y el regreso al hotel.Subió a su habitación, sirvió un vaso con whisky y lo bebió.Los días pasaron Salvatore se dedicó a mirarla a lo lejos sabía su hora de salida del trabajo, el horario de los niños, hasta que decidió Acercarse a ella, a la hora de salida del hospital.Amaranta caminaba por los pasillos del hospital, y de pronto escuchó esa inconfundible voz.— ¡Adhara! — Llamó Salvatore.Amaranta se quedó estática por un momento y se giró quedando frente a él.— ¡Salvatore! ¿Que haces aquí? ¿Te sientes mal ?— Vine para invitarte un café.— No puedo, tengo que regresar pronto a casa.— Por favor, solo un momento, no te quitaré mucho tiempo.Amaranta miró a todos lados, su cuerpo temblaba, su corazón estaba muy agitado, tener a Salvatore tan cerca causaba un caos de emociones, y más cuando creyó que jamás volvería a estar frente a él.— Está
Los días pasaron, y Salvatore trataba de acercarse a Amaranta, pero el destino hacia lo suyo.— !AmiCris! Esta noche quedamos con más chicas ir a un bar, vamos a divertirnos un rato.¿Te parece? — Propuso Eve, una de sus nuevas amigas.— No creo que pueda, Sun-Hee tiene libre está noche.—Es noche de chicas, pues dile a Xavier que se quede con ellos.— Propuso Ágata.— ¿Alguien me invocó? — Entró Xavier hablando entre risas.— Hablando del rey de Roma y el que se asoma. Esta noche te quedarás de nano, pues tenemos noche de chicas.— ¡No! No Xavi, no puedo dejar mi responsabilidad a otros que también están cansados y..— Nada, te vas a divertir que yo me encargo de mis ahijados. — Le interrumpió Xavier aceptando quedar de nano.— Además así voy practicando cuando tenga a los mios — Todos rieron .—Ves, así que de aquí directo al club.— Respondió feliz Stella.Amaranta miró a Xavier y este le sonrió y guiñó un ojo.— Anda ve y diviértete, yo me encargo y cualquier cosa te llamo.—¿Estás s
Eran las diez de la mañana y Amaranta seguía en el quinto sueño, era domingo y Sun-Hee ya había arreglado todo para el pic-nic que tendrían con los niños.— Ya mis amores, voy a llamar a mamá para que no se nos haga tarde.Xavier subió, tocó la puerta y Amaranta se removió en su cama.— AmiCris, ya tus retoños están listos esperando te, solo faltas tú.— Ya voy, enseguida estoy lista. "Dios, me quedé dormida y no sentí en qué hora amaneció completamente.Amaranta se arregló lo más rápido que pudo, bajó a la cocina bebió un zumo de naranja y salió.— ¿Listos mis niños hermosos, para un día en familia?— ¡Si! —Gritaron al unísono, Páris era muy maduro para su edad y aún así actuaba de acuerdo a su edad por su hermana.Subieron al auto los cinco y salieron al parque Vatnajökull, llegaron y buscaron el mejor sitio, alejado de las demás personas, armaron las carpas prepararon la fogata, la mesa y empezaron.— Mamá, queremos caminar un rato, por favor.— Pidió la pequeña Aroa.— Pero no se
Regresaron a casa, llevaron a los pequeños ya dormidos, los metió al baño, los despertó, baño y acostó a dormir nuevamente, los miró dormir por largo rato, y nuevamente un mensaje llegó."Espero por ti, estoy deseoso de probar nuevamente ese dulce néctar que destila de ese manantial, de subir por ese monte, y recoger todo ese valle hasta llegar a esas dos cúspides y mientras me deleito en ellas escucharte gemir del placer. Te estoy esperando, no tardes mi mujer misteriosa "Amaranta cerró los ojos y suspiró profundo, apretó sus labios al igual que sus manos, salió de su habitación y fue a la de Xavier.Tocó y un adelante la hizo seguir.— ¿Que sucede AmiCris? Te ves como nerviosa ¿Pasó algo?Amaranta caminó de un lado a otro— Quiere verme nuevamente.— ¿Y que estás esperando? Ve a ponerte como una diosa, anda ve arreglarte, yo me quedo con mis ahijados.Amaranta cerró los ojos, tenía deseos de más, y al mismo tiempo temor.— ¿Que te detiene? ¿Amas a Salvatore? —Pregunto Xavier al ve
Salvatore luego de pasar el tiempo con todos fue a su departamento, cogió el celular y llamo a su incondicional Jisso.— ¿Que viaje a Islandia? ¿Acaso te volviste loco?—No pero quiero que vengas, quiero montar una empresa aquí, y necesito de tu ayuda.— Está bien, estaré ahí en una semana, tengo que dejar todo en orden aquí.— Te espero entonces.Una semana pasó entre entre compartir con sus pequeños, y ya estaba en el aeropuerto esperando por su amiga Jisso,Ella caminó por los pasillos y al final vio a Salvatore parado con las manos en los bolsillos y una gran sonrisa, aguardando por ella.Corrió a sus brazos, pues tenia mucho de no verlo.— ¿Fue un buen viaje? — Agotador, pero bueno.Salieron de ahí para irse al departamento de él, en el trayecto, medio se informaron de sus vidas.— ¿Empezaremos desde cero a formar una nueva empresa, o será una red de las otras?— No, no formaremos ninguna empresa, traeremos una aquí.— ¿Entonces? ¿Que hago aquí? Hubieras buscado personal capacit
Llegaron al lugar de recreación y organizaron todo, vieron llegar a Salvatore junto a Jisso, Amaranta tensó sus dientes y desvío la mirada.— Tranquila mi boni.— Lo estoy Xavi, lo estoy. — Respondió Amaranta viendo a sus mellizos correr a los brazos de Salvatore.— Hola Salvatore. — Pronunciaron ellos mientras Salvatore los recibía con sus brazos abiertos, y ellos miraban a Jisso sonreír.— ¿Quien e ella? — Interrogó Páris.— Niños, les presento a la tia Jisso Sánchez, es como mi hermana, pero me guardan el secreto con su mamá, ella cree que es mi novia. — Dijo guiñando un ojo y ellos rieron mirando hacia su madre.— ¿Le darás celos a nuestra mamá? La pequeña Aroa preguntó mirando a su padre.— Tranquilo papá, que te ayudaremos a reconquistar a mamá.Salvatore miró a Jisso, y sus ojos se llenaron de lágrimas los abrazó tan fuerte que rieron y cayeron al suelo riendo a carcajadas entre lágrimas. Jisso se sentó junto a ellos.— Mis sobrinos son muy inteligentes, mucho más que su padr
Salvatore despertó, se duchó y salió esa mañana en busca de sus pequeños que esperaban por él para llevarlos al colegio, llegó y los grandes portones de la villa estaban con seguridad,El encargado se acercó y vio que era Salvatore quien estaba ahí esperando.— Buenos días señor De la Rosa.— Hola Ciro, ¿Me dejas pasar por favor.?— Lo siento señor De la Rosa, pero estoy dejando todo en orden, los señores salieron de viaje.Esa noticia fue como un valde de agua fría para Salvatore.— ¿ Como que se fueron de viaje? ¿ a donde? ¿ cuando regresan?Las preguntas eran una tras otra.— No lo sé señor, solo me llamó el doctor Xavier para darme instrucciones de la seguridad de aquí.Salvatore caminó de un lado a otro intentando comunicarse con Amaranta.— No es posible, como es que se va sin decirme nada, como es que se volvió a llevar a mis hijos.Subió al auto y regreso al departamento, subió tan rápido como podia, y tomó el ascensor, llegó al piso, y lo primero que hizo fue ir a su portátil
Amaranta sintió su cuerpo estremecerse ante el roce de Salvatore, y quitó su mano de la de él.— No me toques, por favor, mantén tu distancia.Salvatore sintió un estrujón en su corazón, y retiró su mano.— Discúlpame, no volverá a pasar.— Los niños ya saben que eres su padre, ¿Por qué se los dijiste?— No fui yo, ellos simplemente me lo dijeron y ya, yo jamás hubiera hecho algo sin tu consentimiento.Amaranta miró a sus hijos jugar y miró a Salvatore.— Necesitamos arreglar lo de la identidad de los niños, y yo, necesito los papeles del divorcio firmados por ti.— AmiCris, podemos hablar de eso en otro momento, por favor, ahora quiero que salgamos a dar un paseo en familia. ¿Vamos?.— ¡Siii mamá! Siii por favor vamos quiero que mis nuevos amigos vean que si tenemos papá y que no solo tenemos padrino. — Expresó muy emocionada una Aroa.— Está bien mis amores, será hoy por qué mañana tenemos que regresar a casa.— ¿A Islandia? ¿Y por qué no nos quedamos aquí? Mamá, allá no tenemos pri