Capitulo786
Patricia: Aquilino ha tenido fiebre muy alta que no baja con nada. Los médicos dicen que es una infección viral grave. Lo trasladaremos al Hospital Luz márida.

Me incorporé de golpe, como si me hubieran electrocutado.

¿Cómo podía ser tan grave? La última vez que lo vi, su color había mejorado. Creí que estaba fuera de peligro.

Una losa de plomo se instaló en mi pecho. Las palabras me salieron solas: —Aquilino es un hombre bueno. ¡Te aseguro que saldrá de esta! Patricia... rezaré por él.

Patricia: Muchas gracias.

La conversación murió ahí, pero cada palabra suya en la pantalla pesaba como un ladrillo.

No podía aceptarlo. ¿Cómo alguien como Aquilino, generoso hasta con las piedras, podía tener cáncer de hígado? ¿Y por qué empeoraba de repente?

Recordé con nostalgia al viejo de mi pueblo. También tuvo cáncer hepático. En sus últimos días, los desgarradores gritos de dolor atravesaban calles enteras. Nuestra casa estaba lejos, y aun así escuchábamos su agonía como un eco maldito.

No permit
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP