Capítulo 2

Hubo un momento de silencio que fue roto por una carcajada de Lucia que le dió un golpe en el hombro al lobo

—¡Claro que si! me voy a casar con el lobo que se burló de mi, que me engaño con mi propia prima. —dijo en un tono sarcástico.

Lucia intento cerrar la puerta pero Leonardo coloco el pie y lo evito, entro a aquella cabaña, era pequeña y vieja.

—Yo se que me equivoqué, pero los dos nos amabamos, y...

—Te corrijo, Yo te amaba en pasado, tu solo buscabas pasión, quédate con Valeria, ella cumple tus expectativas.

Leonardo se quedó en silencio, esa era la imagen que tenía Lucia de el, era verdad, por Valeria solo sentía una pasión desmedida, lejos de lo que era el amor.

—Tu debiste ... Debes ser mi reina, Quiero hacer lo correcto y sacarte de este lugar.

—No te creo, en estás semanas nunca pensaste en que quizás estaba pasando hambre, que me sacaron de mi propia manada por tu culpa, ¿Porque corregir el camino ahora?, Siempre piensas en ti así que ¿Que buscas en verdad?

La puerta de la aquella cabaña sono, Lucia salió pidiéndole a Leonardo guardar silencio.

El Alfa se acercó a la puerta para escuchar lo que sucedía.

—Hola Lucia, vengo para que me des el dinero que me debes.

—No lo tengo aún, puedo darte un abono, Pero es muy poco tiempo para regresarlo.

—Ya te dije que puedes pagarme ahora de otra manera.

—¡No te acerques!

Leonardo abrio la puerta, Lucia le había dado una cachetada a aquel aprovechado, que para su sorpresa era Victor, su hermano.

—¡¿Que haces aquí Leonardo?!

—¡Yo soy quien debería preguntar eso! —Leonardo agarra del cuello a Victor con la ira recorriendo como un veneno su piel.

—Ella me debe dinero.

Leonardo saca un fajo de billetes de su bolsillo y lo lanza en la cara de Victor, le ordena alejarse de Lucia.

El Alfa toma la mano de la loba y la hace entrar a casa

—Explicame ¿Que está pasando?

—Victor me dió dinero cuando mis tíos me echaron de casa, con eso pude arreglar un poco está cabaña y comprar comida.

Lucia agarra un tarro de galletas, allí tiene un poco de lo que ahorro para pagar el dinero, Leonardo niega con la cabeza, no aceptaría ese dinero.

—¡Recíbelo! Ya no quiero más humillaciones de tu familia o de ti —Lucia le da un golpe a la mesa, se siente frustrada.

—¡Cásate conmigo! No tendrias que pasar necesidades.

—¿Por qué me lo ofreces? —Lucia frunce el ceño

Leonardo resopla

—Quiero vengarme, no te puedo explicar Pero necesito vengarme de Valeria y Victor.

Lucia abre los ojos

—¿Casandonos?¿ En verdad crees que es una gran venganza?

—Solo es el primer paso, sabes que Valeria se morirá de celos, si hay algo que nunca soporto es estar por debajo de ti

La loba sonríe 

—Tu idea no me desagrada, creeme que también quiero vengarme de Valeria.

—Puedes hacerlo, está boda es conveniente para los dos 

—No lo es, solo para ti, no voy a desgastar mis energías buscándo que pague el daño que me hizo.

Leonard toma las manos de la loba

—Si te casas conmigo, te ayudaré a buscar a tu hermanito perdido.

Lucia abre los ojos

—¿Sabes algo? ¡Dímelo!

Leonard recuerda que el pequeño fue encontrado un año después de su matrimonio con Valeria, Lucia ante la ley no podía hacerse cargo del pequeño, y fueron los padres de Valeria quienes se quedaron con el.

—Lo buscaré, te prometo que lo traeré ante ti, quizas tengo una pista

Lucia suspira con los ojos llorosos, es una esperanza al sueño más grande de su vida.

—Acepto 

Leonardo intenta abrazarla pero ella lo aleja.

—Quiero dejarte claro que lo hago por la promesa que me haces, porque te despreció, me casare contigo por dos años, después de eso me iré con mi hermano —La loba estira su mano para cerrar el trato 

Leonardo accede, dos años es suficiente para cambiar el destino que le espera.

El Alfa le da indicaciones a su ahora nueva prometida

—En la noche le daremos una lección a Valeria que no olvidará en su vida.

Victor y Valeria se encuentran en el establo de la gran mansión, sus besos son intensos, lentamente caen en el heno, el lobo mete su mano bajo la falda de ella y acaricia su feminidad haciendo que termine.

No han llegado a más, los dos saben que la virtud de Valeria es su gran ventaja.

—Debes cuidar a Leonardo, hoy lo ví con Lucia.

—Me lo dijo ¡La odio! Ella es mi peor pesadilla —Valeria siempre ha envidiado a Lucia, parece que la gracia de la diosa Luna solo posa en ella.

—Quizas la tiene como concubina, debes acelerar la fecha de la boda, darle un hijo pronto antes que Nazca un ilegítimo al trono.

Valeria asiente con la cabeza

—Si Lucia se mete en mi camino, haré lo que debí hacer hace mucho.

—¿De que hablas? —frunce el ceño Victor 

—Deshacerme de ella 

Victor gruñe y agarra los brazos de Valeria con fuerza 

—No te lo voy a permitir ¡Nunca le harás daño!

Llega la noche...

Las familias más ricas de las manadas cercanas llegan al festin del año, todos quieren estar en el compromiso más próspero.

Valeria llega a la fiesta luciendo un vestido color blanco, elegante, que la hace ver cómo la novia perfecta.

Sus padres la llevan orgullosos, para saludar a los invitados del magno evento.

—¿Dónde está Leonardo? —susurra la loba preguntándole a Marissa mientras busca entre la gente a su novio.

—No te preocupes el llegará.

Leonardo llega unos minutos después, saluda a grandes rasgos, Valeria lo quiere tomar del brazo pero el la aleja.

Se acerca al centro del gran salón 

—Quiero agradecer a todos por venir, para mi es un honor que quieran compartir la felicidad que tengo en mi pecho.

Todos aplauden 

—Elegi a la loba de mis sueños, la futura Luna de la manada Moonlight, no fue difícil, pues ella representa la perfección y quiero pedirles un aplauso para mi prometida.

Valeria sonríe y se acerca a Leonardo modelando.

—Mi prometida es la señorita Lucía Nyles

—Gra... ¡¿Que?! —exclama furiosa Valeria que siente un escalofrío recorrer su piel.

Los invitados aplauden despacio, sin mucha reacción mirando a todos lados sin entender lo que sucede.

Lucia entra por la puerta principal luciendo un hermoso vestido color rojo rubí, tomando del brazo de Leonardo, su prometido.