La vida suele ser cruel y maldadosa en un afán de entretener a sus grandes anfitriones, los dioses. Cada destino, cada historia, cada acción tiene una importancia para aquellos que vigilan la vida desde lo más alto del firmamento. Algunos destinos son más relevantes que otros, causan más atención de aquellos que en su omnipotencia buscan entretención en las diferentes especias que habitan el universo; estos destinos son especiales, están destinados a dejar su nombre subrayado en la historia dejando un legado, un recuerdo, un sello que perdurara por décadas.
Está historia pertenece a uno de esos destinos, mi nombre para bien o mal será nombrado en la historia gracias a la gran atención que me prestaron los dioses durante mi vivir. Ven acompáñame a vivir una vida cargada de hechos crueles y desgarradores que poco a poco acabaron mi alma, mi vida, mi esencia. Todo empieza en la Tierra, allí donde solo era una simple mortal devota de Dios; todo empieza cuando yo era una simple monja.
Mientras yo recorría los viejos pasillos del convento en donde residía con una sonrisa ingenua y tímida, las sendas del destino me jugaban una mala pasada prediciendo un futuro desastroso. Nadie me advirtió que esa sonrisa sería la última durante mucho tiempo, nadie tuvo la delicadeza de darme señales que me hieran prever la horda de malos acontecimientos que esperaban por mi unas cuantas horas por delante; nadie sintió lastima por mí, por aquella ingenua que creía que su futuro sería en servicio de aquel dios a quien le juro lealtad y servicio, nadie me dijo que rezar sería en vano, que nadie abogaría por mí pues hasta mi propia existencia tenía un fin importante para aquellos que desde arriba sentían ansiedad por ver llegar al momento que cambiaría su vida y el destino de Dexari, una pequeña y exótica dimensión paralela a la Tierra que en su frondosas tierras resguarda a sagaces especies que conviven entre sí.
Allí, en Dexari, me aguarda un futuro incierto y escalofriante. Conoceré de frente en su estado más puro al dolor, al odio, a la venganza. Allí perderé la cabeza, el corazón y hasta el alma, no quedara nada de aquella monja que con delicadeza vívelo poco que le queda de tranquilidad. Esa delicadeza será sustituida por un poder bestial que azotará a sus enemigos y verdugos con ocio y maldad porque en aquellas tierras muere la monja y nace el monstruo entre bestias, el poder más fantástico y temido que alguna vez hayan visto; su motor serán aquellos demonios que sembraron en su ser en busca de lastimarla y derrotarla.
—Nadie me detendrá luchare. Lucharé con todo el poder que me dieron y encontraré la justicia, una que pienso degustar directamente de mis manos al ver uno a uno caer ante el fuego que germino en mí en aquel infierno donde me destruyeron, nadie podrá apagarme, nadie podrá detenerme, ni siquiera la naturaleza con sus juegos románticos o sus hilos de poder.
CalipsoCon un profundo terror cierro los ojos de rodillas en la capilla mientras mi agitado corazón golpetea cargado de miedo en mi apretado pecho, las palabras que componen la oración del padre nuestro azotan atropelladamente mis pensamientos mientras mis sollozos hacen eco en el lugar sagrado de mi Dios. Abro mis ojos y entre la oscuridad que me rodea veo allí a Cristo en la cruz y ruego; ruego por mí, por mis hermanas y por nuestro sacerdote. El miedo me carcome con saña mientras hago uso de toda mi Fe para creer que Él nos salvará porque somos sus hijos, porque dimos nuestra vida a su servicio, porque Él es poder y verdad, ¿quién contra nosotros sí Dios nos acompaña?Los gritos se hacen más fuertes aturdiendo mi podre mente
Siento como un calor abrasante recorre mi cuerpo invitándome a abrir los ojos pero no lo hago, disfruto un poco más de la sensación de tranquilidad y calidez que me embriaga haciéndome sentir en pasaje de tranquilidad perpetua, de seguro ya estoy muerta y he de iniciar mi juicio para llegar hasta Dios, así que no hay prisa.— Está por despertar — anuncia esa voz escalofriante y masculina a la cual le atribuía mi muerte.Potentes aullidos resuenan a mí alrededor y es ahí donde la realidad me cae encima asfixiándome con su cruda verdad. No estoy muerta, aún no gozo de esa plenitud, esos seres buscan seguir jugando con mi alma para llevarme al límite del sufrimiento y de la locura. Asustándome, una mano gruesa y fuerte recorre
Despierto más dolorida de lo que estaba, ahora el dolor se concentra no sólo en mi cuello sino, también, en mis manos y pies.---Lo siento, no puedo sanarte porque estoy sin energía, además, las cadenas deplata me hacen mucho daño.La loba habla en mi ser y es donde caigo en cuenta de la realidad. Gruesas cadenas que rodean mi piel me mantienen atada de pies y manos a una mugrienta pared.Dios mío, ¿qué he hecho paramereceresto?. ¿Acaso midevociónno fue recibida con gracia por ti?.Escucho pesados pasos acerc&aacu
Quisiera sentir la paz de la muerte pero, por el contrario, siento una intranquilidad que delata la pelea que hay en mi interior. Abro los ojos y veo a mi alrededor dándome cuenta que estoy en una celda diferente, esta era más espaciosa y aterradora; cadenas colgaban de diferentes partes de las paredes, lo barrotes era mucho más gruesos y el óxido delataba los años que han resguardado a múltiples seres. Desorientada me levanto mientras mi lado racional busca algún indicio que me indique que estoy muerta, que es imposible que yo siga siendo parte de este mundo tan monstruoso.Dios, me has fallado.Siento un movimiento a mi izquierda y con el corazón en la mano volteo a ver llevándome la sorpresa de encontrar a una mujer entre las penumbras; aquella extra&n
Sus duras palabras atravesaron mi ser creando la duda en mi interior, una parte de mi rechaza la idealización y mi idolatrara hacia Dios pero, la otra parte se aferraba a mis creencias porque, ¿si no creo en Dios quien me va a salvar?. Fui criada por las monjas del convento ya que mis padres habían muerto en un accidente dejándome huérfana y sin familiares, las hermanas se preocuparon por mi, me cuidaron y protegieron, me acogieron en sus creencias. Jamas había dudado de Dios pero, en estas circunstancia, las dudas carcomen mi débil ser.Padre, ¿en verdad eres único y omnipotente?Dejando de lado mis cuestionamientos, tomo el rostro de la malherida Nix y lo pongo en mis piernas no pudiendo hacer nada para ayudarla, o eso pensaba yo.
Cuando era una mortal solía pensar que el tiempo era efímero, un afanoso empedernido que acosaba a quienes lo vivía a correr tratando de seguir su ritmo pero, ahora, en penumbras solo puedo pensar en que solo es un vejestorio que apenas y puede funcionar. Siento que estoy estancada en un bucle cruel y doloroso que aviva mis penas sin remordimiento.Como era de esperarse, aquella noche donde mi supuesto mate me traiciono generandome un dolor sobre otro dolor que me llevo directo a la inconsciencia, no morí y eso me lo hizo saber Amos, ese el el nombre de mi querido torturador personal, pues tiempo después vino y siguió mostrándome todo lo aprendido con sus anteriores experimentos. Para mala suerte mía mi ADN es muy adaptativo y ahora resulta que también soy una bruja. Amos estuvo ansioso un buen tiempo esper
Llegamos a una zona donde se podía ver mucha más claridad, por ende, nuestros ojos ardían aun más dejando escapar pequeñas lagrimas pero, aun así no podíamos ignorar aquel paisaje que denotaba serenidad en un mundo de horrores. Grandes arboles se ven rodeándonos mientras algunas extrañas aves de diversos colores entonan sus cantares a su libertad, esa misma que ahora se me es devuelta.--- Aquí es la frontera de las tierras demoníacas con la tierra de las brujas. --- Comento Alaya mientras se adelanta un paso y empieza a conjurar algo, cuando termino el claro paso a ser un busque de altos arboles que dejaban filtrar la claridad del día para alumbrar el pasto verde que recubre su suelo. --- Andando.Si rechistar seguimos a Alaya quien cam
--- ¡Ahora eres una bruja mi estimada Luna!.--- Grito Amos con euforia al ver mi ojos verdes. --- Y yo, yo te are la más poderosa de todas pero, para ello, debes aprender a dominar las múltiplesdebilidades de ellas.--- Comentomientras me mira con gran entusiasmo.Sin más y con alebosia, sale de la celda eufóricoy apurado, algo trama y eso me hiela la sangre.Padre, solo llévamecontigo--- Eso no es bueno. --- comenta la extraña y lastimada Nix. --- Siempre que se emociona suele volverse más sádico. --- La mire y vi como empalidecía tal vez por un viejo recuerdo.La reja me hizo v