Alessandro debido a la terrible situación de seguridad en su contra ha tenido que aumentar su seguridad, pasó de andar escoltado de uno o dos hombres a más de diez, todos ellos eran los mejores, los cuales permanecían armados y dispuestos a defender a su jefe a como diera lugar. Alessandro se vio afectado de manera directa, lo peor se vino cuando las amenazas en su contra se hicieron realidad, lo acusaban de querer quedarse con las empresas y por ello los empresarios se vieron obligados a contratar pandillas clandestinas que se valían de cualquier manera para atacar a Alessandro.Los enfrentamientos en las calles entre los hombres de Alessandro y aquellas pandillas salían en los periódicos, solo que la información era camuflada sin dar datos exactos de lo que en realidad sucedía. Alessandro regresó a casa más temprano que nunca, se encontró a Sophia sentada cómodamente en el sofá de la sala, él se ubicó a su lado, estiró el brazo y colocó suavemente la mano sobre el abdomen de su es
Alessandro despertó de manera brusca debido al sonido de su teléfono, encendió la luz y estiró la mano hasta la mesa de noche, fijó la mirada en la pantalla se trataba de Daniele, al instante respondió.—¿Ahora qué sucede? —preguntó Alessandro mientras que frotaba de su cabeza con la mano. —Señor son malas noticias, la mercancía fue incautada, los contenedores se encontraban en altamar cuando fueron abordados por las autoridades, es completamente imposible lograr negociar ya que la magnitud del problema no se puede ocultar fácilmente —Alessandro tensó la mandíbula, dejó caer la cabeza y cerró los ojos. —¡Un soplón!, cerca tengo un soplón que se ha encargado de filtrar la información de las empresas y de la mercancía que suelo mover, últimamente todo se ha puesto de cabeza, es imposible que todo me esté saliendo mal cuando ahora estoy siendo más cuidadoso que antes —recalcó Alessandro.—Señor el personal que se encuentra a tu servicio es confiable, pero si no te sientes seguro, de in
Alessandro al llegar a aquella reunión se encontró de frente con un hombre bastante furioso, intentó lanzarse sobre él para golpearlo, pero sus hombres se lo impidieron.—Eres un maldito desgraciado, puse todo en tus manos, la herencia familiar, el futuro de mi familia todo, acabaste con todo, ya no queda duda alguna de que realmente eres un soplón del que todos hablan, el día de ayer los abogados se pusieron en contacto conmigo informando que hoy se llevaría a cabo una audiencia en mi contra con pruebas detalladas de los negocios sucios de los cuales proviene el dinero con el cual salí de la bancarrota.»Hubiese preferido haber quedado en la cochina calle y no terminar en prisión y alejado de mi familia, para colmo de males ellos quedarán sin un solo centavo, eres una desgracia, eres lo peor que puede existir —ante sus palabras Alessandro solo guardó silencio.—Lo remediaré —fue lo único que dijo Alessandro.—¡Lo remediaré!, es lo único que tienes para decir eres basura, no quiero qu
Días más tarde.Sophia de manera astuta ha logrado conseguir información sobre una vacante en la empresa de su padre, ella más que nadie conoce perfectamente aquella empresa donde creció y fácilmente logra conseguir el empleo.Claramente no se trata de un puesto como el que solía ocupar en vida de su padre. Ahora se encontraba con un sueldo básico y debía utilizar un uniforme, Sophia se encarga de hacer aseo a las oficinas, el empleo perfecto para poderse mover libremente por toda la empresa. Utiliza una peluca y suficiente maquillaje para pasar desapercibida, lo primero que ella nota es que el personal de la empresa continúa siendo la misma cantidad, lo cual no logra comprender debido a que un informe en el periódico dejaba claro su mal estado económico. Sophia no se arriesga a acercarse al piso de presidencia, pero logra moverse por áreas bastante importantes, dónde logra observar en lapsos cortos de tiempo las computadoras donde es clara la información que anunciaron los periódic
Mientras que Sophia hacía de las suyas y todo le salía a la perfección, Alessandro continuaba llevando los negocios de mal en peor, Sophia se había encargado de informar a las autoridades sobre sus rutas donde movía la mercancía, para desgracia de Alessandro todos los contenedores la policía lograron incautar, los noticieros encendían las alarmas de aquellos hallazgos que superaban la realidad.Las pérdidas eran devastadoras, había pasado de ser un mafioso exitoso al peor de toda la historia, no lograba pasar una gota de agua sin que no fuera descubierto por las autoridades.Alessandro en medio de su desesperación ha ofrecido elevadas sumas de dinero para quién logre encontrar al traidor entre sus hombres, pero lo único que tiene es más y más malas noticias, se esfuerza por demostrar su mejor cara ante Sophia, en esos momentos ella y el bebé que se encontraba en su vientre era su única prioridad.Sophia luego de haber obtenido éxito en su infiltración decide retomar lo que planeó desd
Mientras tanto, Noah se encuentra acalorado del coraje encerrado en su oficina junto con Olivia, los movimientos sucios que han estado haciendo a escondidas no han estado dando los resultados que él desea.—No estás haciendo las cosas como se debe, ¿qué mierda sucede contigo? —le reclamó Noah mientras que se podía notar la impaciencia—. Te he dado las indicaciones exactas de lo que debes hacer y por lo visto solo has estado perdiendo el tiempo, te he dado el tiempo suficiente para que puedas entrar y manipular su computadora, pero...—Escúchame muy bien, lo que sucede es que la empresa de tu querida novia ya no cuenta con los movimientos suficientes para nosotros poder hacer de las nuestras, los negocios están por el piso y eso tú muy bien lo sabes, si llegaramos a exceder la cantidad de dinero fácilmente seremos descubiertos —Noah gruñó con fuerza. —Ella nunca nos va a descubrir, tan solo es una mujer tonta que solo se preocupa por vivir de lo que digan los demás, permanece ocupada
Alessandro ha tenido que lidiar con aquellas terribles acusaciones que no lo han dejado tranquilo, lo peor es que la paciencia para tolerar aquellas acusaciones y palabras ofensivas en su contra se ha acabado, intentó hacer de una y otra manera que sus socios comprendieran que él no tenía nada que ver, pero todo había sido en vano. Alessandro salió tranquilamente de un restaurante, había tenido un día largo y difícil, el estado económico de aquellas empresas que siempre manejó se estaban viendo afectadas por todo el tema relacionado con lo que lo acusaban, ser un soplón.En aquel momento fue interferido por otro grupo de hombres, Alessandro al notar aquella acción de inmediato empuñó la pistola, en su rostro dibujó a una malvada sonrisa, ya estaba cansado de aquellos ataques así que se había puesto a la tarea de andar muy bien en compañía.En cuestión de segundos aquellos hombres terminaron siendo rodeados por los hombres armados de Alessandro. —Ya estoy harto de este maldito juego,
Sophia llevó los brazos alrededor del cuello de Alessandro, con sus besos lo devoraba y él correspondía de la misma manera, Alessandro llevó sus brazos alrededor de su cintura y con la punta de los dedos acariciaba sus redondos glúteos. A pesar de que Sophia ya se encontraba al tanto de lo que había sucedido con sus padres, y de la clase de hombre que era Alessandro, aún continuaba con su plan, destruirlo de aquella manera que nunca jamás se pudiera volver a levantar.Sophia retiró su saco, zafó el nudo de la corbata y le arrebató la camisa, conectó la mirada con su fuerte pecho y a su vez colocó las manos sobre él, luego le brindó leves caricias. «No todo podía ser perfecto, aún amo a este hombre, lo peor es que lo hago con más intensidad, él me hace perder el control, su cuerpo es mi debilidad, no quiero tenerlo lejos, no quiero perderlo, la única manera en que lo suelte es cuando lo destruya, mientras tanto no pienso permitir que ninguna mujer se le acerque», pensó Sophia mientra