Emily se sentía mal por lo sucedido con William en su primera cita; sentía que su cara estaba roja de la vergüenza y tal vez él no volvería a fijarse en ella; tendría razón porque a la final seguía presente el recuerdo tormentoso de su ex pareja, especialmente desde que sabe que los seres sobrenaturales siguen rodando en su vida. Llegó a su casa dirigiéndose a la habitación de su pequeño Leo quien se encontraba ya durmiendo plácidamente mientras abrazaba a su oso; Emily decidió acostarse al lado de él con mucho cuidado de despertarlo; ya que eso ocasionaba un Leo muy mal genio y caprichoso lo cual intentaba evitar. Se recostó, abrazándolo con cuidado y sintiendo su calor interno; sacando una sonrisa en ella mientras salían lágrimas involuntarias porque sabía que él era su mayor bendición de la vida dada por la diosa luna; aunque la d
Emily se había alistado con su ropa deportiva que consistía en el top y el leggins negro acompañado de tenis blancos; cogiendo su cabello como una cola de cabello y asegurándose que su pequeño hijo se encontrara durmiendo todavía. Emily sabía que la hora de siempre era temprano; porque era el momento adecuado para los dos antes de iniciar con las obligaciones del día a día. Cogió un taxi para dirigirse al gimnasio famoso, destacado donde había sido inscrita gracias a Nicolas y no había vuelto a ir; sintiendo pena porque sabía que cada día perdido era un mes de salario.Llegó al gimnasio, registrándose, dejando sus objetos personales en el casillero e iniciando con la caminadora; donde observaba lado a lado esperando algún rastro de Nicolas, pero no aparece; tal vez él no quería arreglar las cosas pensó para sí misma.
Emily se sentía tranquila al haber tomado una decisión referente a Nicolas; aunque le costaba la idea de volver a introducirse al mundo sobrenatural iba a intentarlo solo por él a la final eso no significaba que debía despertar a su loba o que su pequeño Leo se introdujera en este mundo del caos. Al siguiente día, decidió dirigirse hacia la típica terapia con Lily donde veía de lejos a Sergio porque se encontraba ocupado con sus laborales personales; al finalizar decidió reunirse con William quien la había invitado a salir nuevamente donde fue sorprendida porque pensó que después del desastre de primera cita que habían tenido, no quería volver a saber de ella.Se despidió de la pequeña Lily con quien había visto varios avances, llegando al punto de tener que volver a evaluarla para saber su evolución. Decidió cambiarse el un
Emily se sentía como una niña chiquita mientras sentía cómo movían en uno solo sus labios formando un perfecto beso; mientras que William iniciaba a sentir sentimientos prohibidos dentro de él; ya que no podía caer en el mismo juego que estaba planeando donde reaccionó alejándose de ella; donde Emily lo miró confundido pensando que había besado mal, tal vez el haber estado sin un hombre por tanto tiempo podría haber afectado pero es que el miedo que tenía al entregar nuevamente su corazón devolviéndose en mil pedazos le aterraba.— ¿Hice algo mal? — Preguntó con inocencia Emily mientras quitaba su mano del pantalón de William donde había quedado la servilleta.— No, perdóname solo me acorde de mi esposa — Dijo en medio de una mentira, buscando una solución a lo que hab&iacu
Después de un largo camino llegaron a la cima, donde se encontraba un hermoso mirador acompañado de un pequeño restaurante casero. Emily vio con mucha emoción el lugar porque hace años no estaba en uno parecido; bajaron de la moto con mucho cuidado quitándose el casco sin llegar a caerse y pasárselo a William para que lo asegurara. Ella amaba sentir la brisa de ese momento mientras cerraba sus ojos, recordando la tranquilidad cuando era una niña apenas; cuando su padre estaba a su lado y cuando fue por primera vez al mirador.*Flash Back*— Puedes abrir los ojos — Comentó papá en los oídos de Emily quien tenía seis años en ese momento; quien se encontraba en los brazos de él.— ¿No me dará miedo? — Susurró Emily sosteniendo con fuerza sus pequeñas
Sergio iba a correr detrás de William para decir sus verdades; pero fue interrumpido por el brazo de su secretaria Nancy recordando que lo importante en este momento era su pequeña hija. Sentía incomodidad debido a que se encontraban sus dos amores; uno real y otro pasajero en el mismo ambiente, sintiéndose la tensión mutua donde Emily suspiraba cada vez que veía que la dichosa secretaria coqueteaba con Sergio ¿no tenía modales acaso? porque definitivamente se le había olvidado la relación jefe-secretaria formal. Paso aproximadamente media hora más, donde dieron de alta a la pequeña Lily para poder dirigirse a su casa, donde se fueron todos en el carro de Sergio dejando primero a Nancy en una estación debido a que no quería ser llevada a su casa, por ser peligroso según ella ocasionando dudas tanto en Emily como en Sergio.Al momento dejó a Emily
— Mi Alpha se llama Andrés, pero no lo conoces — Mintió Nicolas de la forma más profesional, recordando a sus antiguos Alphas porque no podía traicionar a Sergio, aunque se sintiera mal por Emily.— Me dijeron que soy mate de ese Alpha ¿por qué no me ha buscado? — Pregunto Emily con interés y miedo al mismo tiempo, no quería dar ideas que después se arrepintiera.— Porque aborreces a los seres sobrenaturales como yo, ¿acaso si él te busca no lo rechazarías? — Interrogó Nicolas subiendo la ceja mientras colocaba su puño derecho sobre el mentón y cruzaba las piernas; iba a ser una respuesta interesante.— Claro que lo rechazaría más si es un desconocido; contigo fue diferente al final porque eres mi amigo de hace muchos años — Confeso Emily quitá
— ¿De qué hablas? — Respondió Sergio con nervios en su voz, era malísimo para mentir, aunque se había vuelto profesional desde que conoció a Emily; pero eso no significaba que le partía el corazón no ser sincero con su mate.— No lo tomes a mal, pero Nicolas es un lobo y no quiere decir que sea malo, solo quería saber si tenías alguna idea — Dijo Emily en forma de defensa, sentía que la había embarrado y no quería que su amigo pagará las consecuencias.— No lo sabía — Comentó Sergio mordiéndose el labio como signo de mentira; tenía esa maña que solo había descubierto la nona de Lily — Igual no le veo nada de malo, ¿tú sí? — Interrogó Sergio volteando a ver directamente a Emily, esperando que al menos hubiera dejado de odiarlos un
Iban de camino a la ciudad mientras Emily miraba fijamente por la ventana; no entendía cómo en unos meses había pasado de ser la solitaria y odiaba Emily para ser la amada por dos hombres diferentes; William y Sergio. Porque su corazón le había pertenecido a Nicolas por un buen tiempo, pero nunca le había correspondido tal vez por el secreto que tenía guardado. Salió de sus pensamientos cuando sintió un ligero empujón donde se pegó fuerte en la cabeza al ser retenida por el cinturón de seguridad, volteando a ver a Sergio.— ¿Qué sucedió? — Pregunto Emily con confusión, dándose cuenta que se encontraban en medio de la carretera.— Saldré a mirar, debe ser algo del motor — Respondió Sergio brindando una sonrisa sincera, aunque por dentro tenía nervios porque no había sucedido