Sergio iba a correr detrás de William para decir sus verdades; pero fue interrumpido por el brazo de su secretaria Nancy recordando que lo importante en este momento era su pequeña hija. Sentía incomodidad debido a que se encontraban sus dos amores; uno real y otro pasajero en el mismo ambiente, sintiéndose la tensión mutua donde Emily suspiraba cada vez que veía que la dichosa secretaria coqueteaba con Sergio ¿no tenía modales acaso? porque definitivamente se le había olvidado la relación jefe-secretaria formal. Paso aproximadamente media hora más, donde dieron de alta a la pequeña Lily para poder dirigirse a su casa, donde se fueron todos en el carro de Sergio dejando primero a Nancy en una estación debido a que no quería ser llevada a su casa, por ser peligroso según ella ocasionando dudas tanto en Emily como en Sergio.
Al momento dejó a Emily
— Mi Alpha se llama Andrés, pero no lo conoces — Mintió Nicolas de la forma más profesional, recordando a sus antiguos Alphas porque no podía traicionar a Sergio, aunque se sintiera mal por Emily.— Me dijeron que soy mate de ese Alpha ¿por qué no me ha buscado? — Pregunto Emily con interés y miedo al mismo tiempo, no quería dar ideas que después se arrepintiera.— Porque aborreces a los seres sobrenaturales como yo, ¿acaso si él te busca no lo rechazarías? — Interrogó Nicolas subiendo la ceja mientras colocaba su puño derecho sobre el mentón y cruzaba las piernas; iba a ser una respuesta interesante.— Claro que lo rechazaría más si es un desconocido; contigo fue diferente al final porque eres mi amigo de hace muchos años — Confeso Emily quitá
— ¿De qué hablas? — Respondió Sergio con nervios en su voz, era malísimo para mentir, aunque se había vuelto profesional desde que conoció a Emily; pero eso no significaba que le partía el corazón no ser sincero con su mate.— No lo tomes a mal, pero Nicolas es un lobo y no quiere decir que sea malo, solo quería saber si tenías alguna idea — Dijo Emily en forma de defensa, sentía que la había embarrado y no quería que su amigo pagará las consecuencias.— No lo sabía — Comentó Sergio mordiéndose el labio como signo de mentira; tenía esa maña que solo había descubierto la nona de Lily — Igual no le veo nada de malo, ¿tú sí? — Interrogó Sergio volteando a ver directamente a Emily, esperando que al menos hubiera dejado de odiarlos un
Iban de camino a la ciudad mientras Emily miraba fijamente por la ventana; no entendía cómo en unos meses había pasado de ser la solitaria y odiaba Emily para ser la amada por dos hombres diferentes; William y Sergio. Porque su corazón le había pertenecido a Nicolas por un buen tiempo, pero nunca le había correspondido tal vez por el secreto que tenía guardado. Salió de sus pensamientos cuando sintió un ligero empujón donde se pegó fuerte en la cabeza al ser retenida por el cinturón de seguridad, volteando a ver a Sergio.— ¿Qué sucedió? — Pregunto Emily con confusión, dándose cuenta que se encontraban en medio de la carretera.— Saldré a mirar, debe ser algo del motor — Respondió Sergio brindando una sonrisa sincera, aunque por dentro tenía nervios porque no había sucedido
Emily había entrado a su casa observando como su madre la esperaba sentada en el sofá mirando televisión mientras acariciaba la cabeza del pequeño Leo quien se encontraba acurrucado en sus piernas. Suspiro de la resignación porque sabía que le esperaba preguntas especialmente porque su último anuncio era que estaba con su jefe.— Se barro el carro, tuvimos que dormir en el suelo y hasta ahora nos habían auxiliado — Confesó Emily con sinceridad, esperando que le creyeran, aunque solo estaba omitiendo unos pequeños detalles.— ¿No sucedió nada entre ustedes? — Preguntó con sospecha su madre, volteando su mirada para ver directamente a Emily.— No ¿Porque lo dices? Sabes que estoy saliendo con William — Reprochó Emily con tono de enfado, aunque por dentro de sentía m
— Bien hijo, levemente cansada, pero según la terapeuta ha avanzado bastante — Confesó la nona, después de depositar el plato de comida de Sergio.— Eso me alegra, he visto los cambios y siento que es lo mejor para Lily — Comento Sergio con felicidad cogiendo el tenedor y cuchillo para iniciar a devorar la comida con formalidad.— Aunque no me cae bien, tienes razón. Lily necesita de los mejores cuidados, pero siento que deberías hablar con ella… Según entiendo es tu mate y eso podría favorecer a la pequeña — Propuso la nona, dejando sorprendido a Sergio dejando de comer.— ¿Como podría favorecerla, nona? — Interrogó Sergio con curiosidad, no había pensado en eso hacia su pequeña si no solo su conexión lobuna.— Al ser tu mate correspondi
— Perdón, ven sígueme — Manifestó Sergio con una sonrisa pícara, cogiendo de la mano a Emily mientras miraba de un lado a otro.— No puedo… — Susurró Emily con nervios, sentía que estaba viviendo una adrenalina como cuando era pequeña.— Te lo ordeno, ven por favor — Ordenó de forma suplicante Sergio, donde Emily asintió entrelazando sus dedos para irse juntos detrás de la empresa hacia una bodega secreta que tenían. Entraron con las llaves que tenía Sergio, cerrando ocasionando que todo quedara oscuro mientras Sergio intentaba prender la luz al momento de darle al shift logro resbalar cayendo con Emily, ocasionando que ella cayera al suelo, pero él logró colocar su mano a tiempo para que pegara con ella, mientras él quedaba encima de ella donde ambos se miraron fijamente con la luz prendida, con
Emily despertó en los brazos de Sergio; aunque tenía una mezcla de sentimientos donde no sabía si había hecho o no lo correcto definitivamente iba a dejarse llevar del momento. Cayó en cuenta que tenía terapia con la pequeña Lily además que se encontraban en la bodega abandonada de la empresa, sonrojándose. Debido a su movimiento, ocasionó que Sergio también se levantara observando el bello cuerpo de Emily que se encontraba medio tapado con su chaqueta; realmente ella era hermosa <<debes ser más duro con ella, así sabrá quién manda aquí>> pronunció su lobo interior con quien batallaba porque aunque sabía que debía seguir su rol de Alpha frío, duro y dominante ante los demás no sentía que con ella debería hacerlo porque si no la iba a perder, primero debía lograr que los dejara de aborrecer para realmente s
— Es un gusto volver a verte William, después de tanto tiempo — Manifestó el antiguo Alpha supremo Cristian quien se evidenciaba la palidez, arrugas en sus ojos, su cabello canoso y su debilidad muscular invitándolo a entrar — ¿Que se te ofrece?— Necesito hablar con su hijo José, el nuevo Alpha de su manada de lobos negros — Ordeno William con semblante serio sentándose en el sofá de color café, donde Cristian lo seguía.— ¿Para qué? sabes que no haremos alianzas con otras manadas, no queremos problemas aprendí con mis errores; por querer destruir la manada de lobos blancos terminé destruyendo la de nosotros también — Confesó Cristian con cierta nostalgia, por vengarse por líos amorosos quien siempre había amado a la madre de Emily sentenció a su manada a la vez.