La manada intrusa observa entre los árboles cercanos a los hogares de los alfas Imperión, el alboroto de los Imperión, Bryan nunca imagino alterar la paz de una manda tan fuerte, pero disfrutaba saber todo el terror que provocaba o de que otra manera estarían tan preparados esta mañana, si no era para protegeré de un nuevo ataque, los esperaban.Gozaría al ver sus rostros de sorpresa al tenerlos tan dentro y cerca del pequeño Imperión.Lo único que le preocupaba era las dificultades que tendrían que pasar por obtener al hijo de Conan.Espero que avanzaran y se perdieran entre los árboles, sonreía con diversión. Bryan se rio solo, como un hombre demente.—¿Qué es tan gracioso, Bryan? —le pregunto Said enfadado. Curioso por sus pensamientos, Bryan jamás explicaba en la totalidad su plan, estaba ahí por las promesas de Edmundo pero todo eso no estaba dentro de los métodos. No habían obtenido lo que deseaban pero todo estaba tan claro, Bryan ahora quería algo más que el regalo que la di
Edmundo analizaba sus probabilidad de librarse los dos jóvenes que Bryan había dejado a su cuidado eran débiles unos adolescentes aventureros que no conocían todos los peligros que encontraban en la guerras.Podía oler su miedo, ese deliciosos sabor del pánico. El por el contrario era un lobo ágil y rudo. Sería muy cruel si se enfrentaba a ellos, con un solo golpe los aniquilaría. Aún con todo el dolor que sentía en su brazo, el ardor y las punzadas ya estaban corriendo hasta su hombro.Sudaba frio, respiraba profundamente, el dolor lo estaba volviendo loco, pero hacia todo por mantenerse cuerdo y aparentara fuerza.Los jóvenes se miraban constantemente tratando de intercambiar pensamientos, se mantenían prevenidos.—Tengo sed —gimió Edmundo tosiendo enseguida.—¡Cállate! —le ordeno él más alto y robusto. Edmundo sonrió burlándose de su intento por controlar la situación.—Denme un poco de agua, solo un poco—No hay agua por aquí. —insistió para que cerrara la boca.—Ustedes también
Alison recién despertaba, por fin habia conseguido que Jarek se quedara dormido pero no tardaría en despertar hambriento, solo logro dormir dos horas.Bostezo profundamente y bajo a la cocina para prepara su desayuno, tratando de hacer el menor ruido. Jarek era muy pequeño pero estaba segura de que él sabía lo que estaba sucediendo con su padre.Estaba muy sensible.Cuando la leche estaba lista, volvió a la habitación, antes de llegar escucho un ruido en otra de las habitaciones, la puerta estaba entre abierta. Vio un movimiento, pensó que era alguno de los chicos, empujo la puerta—¿Hola?, Zac —entro con una señal de alerta, todo estaba en calma, no habia nadie dentro pero noto una lampara de estudio colgando por un lado de la mesa, una ventana estaba abierta, pudo ser el viento, quiso pensar, la coloco en su lugar y echo un vistazo a la calle. Un escalofrió le corrió por la espalda, recordó a los intrusos de la noche anterior, temió por Jarek.Alison escucho un ruido detrás de el
Jena se levantó furiosa, ¿Quién se atrevió a intervenir en esa pelea?, con la pata lastimada, y su cuello teñido de sangre, abrió sus ojos para comprobar como otro lobo la habia liberado, Derek destrozaba a Bryan, revolcándolo contra el suelo.La rabia y la sed de venganza no era exclusiva de su corazón, Derek deseaban hacer pagar por todo el mal que habían provocado.Y reconocía que la fuerza d su cuñado era muy superior a la suya, era hábil y ágil, lo decidió entonces, ella pelearía de esa manera, no incluso mejor.La heridas cerraron en el cuello y en la pata, Jena se incorporó apretando los dientes la venganza era suya nadie más tenía derecho. Bryan tuvo una sentido de alerta apenas pudo percatarse de que la hermosa loba blanca se acercaba cuando ella empujaba a Derek. Era detestable como se arrebataban el lugar para enfrentarse a él.Pelear contra dos lobos era sin duda un acto injusto. Gruño esta vez Jena se ensaño era más violenta y rabiosa, pero aún era una contrincante dé
Correr con todas las fuerzas que sus piernas le daban no era suficiente para alcanzar a un par de lobos que en cuestión de segundos recorrían cuadras enteras, estaba desesperada, ni siquiera estaba segura de correr en la dirección indicada.Alison choco contra un duro muro de carne y huesos, quien la tomo y llevo atrás de unos muros en una casa en ruinas. —¡Detente! ¿A dónde piensas ir?— era Said al verlo noto en su pecho el ardor de la traición.Creía conocer a ese hombre de toda una vida y se estrelló muy pronto con la realidad. Sacudió su mano y se apartó de él, lo último que deseaba era sentir ese calor que la envolvía y confundía.—Suéltame, eres un monstruo —la mirada de Alison era tan dolorosa, sus ojos reflejaban el rencor profundo que brotaba de su corazón.—No me mires así— Alison no cambiado su mirada, frunció más el ceño y endureció aún más sus iris —Deja de mirarme así —gruño, no soportaba su sentimientos.—No puedo hacerlo — le juro sin apartar su vista — Te odio, lo
El grupo de lobos encargado de traer a Samara de vuelta se reunieron con Derek y Jena en casa del señor Boran, abandonando el rastro que habían localizado, todos estaban inquietos de saber que estaba sucediendo.No habia palabra que pudieran consolar a Jena que se encontraba recargada en la pared con los brazos cruzados, mirando a uno y a otro esperando que dejaran de perder el tiempo en discusiones absurdas.Solo veía el tiempo correr, arrepentida de escuchar a Derek, quizás a esta hora ya estaría enfrentando al maldito secuestrado de su hijo.—Escuchamos un aullido de los lobos intrusos, desistimos de seguir tras de Samara para proteger a la manada —dijo Phillip disculpándose con su padre —pero creemos tener una idea hacia donde se dirige.El Alfa Boran asintió con desconsuelo, sus dos nietos habia sido arrebatados de sus brazos. Era viejo incapaz de cuidar de toda la manada, y su familia, se arrepentía de mandar a todos por su nieto Darío dejando desprotegido el valle. Todo era su
No necesitaba de la autorización de nadie; ¿esperar mientras ellos actuaban como los héroes?, le pedían un imposible la angustia corría por sus venas con una fuerza destructiva, los pensamiento pesimistas la volverían loca.Bryan tenía todo el tiempo y distancia ganado, para esta hora seguramente ya estarían en su territorio, alejando cada vez más a su hijo, su corazón iba a reventar de dolor, su mente perturbada no recordaba en qué dirección habia ido, ni si estaba siguiendo un rastro certero, pero no se quedaría de brazos cruzados. Volvió a casa de Conan, ese era su punto de inicio buscando el olor nauseabundo que dejaban a su paso, intento retomar el camino, giro la vista de un lado al otro, estaba confundida, alterada, asustada.De reojo noto una silueta de pie junto a la ventana de la habitación de Débora, abrió los ojos con un vuelco en el corazón esperando que quien estuviera en esa habitación mostrara sus rostro. No era posible lo que estaba imaginando, pero su frustración
La estancia se convirtió en un especie de sala fúnebre, los rostros de Phillip, Zac y sobre todo de Derek no podían contener el asombro, y la furia el Alfa Boran estaba de acuerdo con Edmundo, y le otorgaba el derecho que tenia de ocupar el lugar del Alfa.—Es su derecho, no hay nada que me impida negárselo. —afirmo con un dolor.—Padre usted lo echo de esta casa, se metió con la mujer de Conan, usted lo exilio de la manda o es que ya lo olvido…—Esa mujer intento seducirlo, no es su culpa al final de cuentas es hombre.Ni siquiera Camila creía eso. Derek se burló de ella en su cara.—No acepto a mi hermano como nuestro alfa—sentencio—, Padre, ha perdido la razón o su amor por ese traidor es tan inmenso que lo enceguece, Edmundo es el asesino de Conan—Mírenlo, al fin revelas tu verdadera personalidad, quieres la posición del alfa, quieres el poder de la manda, y no dudo que quieras también meter a Jena en tu cama — Derek se quedó mudo—Respeta a Jena, y respeta a Derek, él no es un c