Cuando era niña me encantaba imaginarme como sería la boda de mis sueños, ese día al que me entregaría a alguien por amor donde todo sería perfecto tal y como los libros que tanto leía describían y aunque Nikolas había cuidado hasta el más mínimo detalle para que este día fuera perfecto algo en mi me gritaba que tuviese cuidado.No sabría explicármelo a ciencia cierta pero una mala sensación recorría mi cuerpo de pies a cabeza desde que salí de la alcoba rumbo a la ceremonia. Como si alguien estuviese observándome en todo momento o si la peor de las tormentas se avecinara.Mamá me había asegurado que eran los nervios de la boda y que era normal que me sintiera así pero yo comenzaba a preocuparme.Además es bien sabido en el reino que el marido no debe ver a la novia antes de la boda y nosotros claramente no habíamos hecho caso alguno a esa regla. Llegué al vehículo que me esperaba en las puerta de palacio donde mi madre y padre aguardaban con la más amplia de las sonrisas y los ojos
Estábamos en los enormes jardines del palacio donde las flores resplandecían orgullosas de nuestra felicidad. Cada detalle había sido minuciosamente seleccionado para este día. Los invitados esparcían alegría y dicha por todo el lugar con discretas carcajadas y placenteras conversaciones que eran apenas perceptibles sobre la melodía suave que resonaba en los alrededores.Pero aquella desagradable sensación que me había acompañado toda la mañana no abandonaba mi pecho, era un pésimo sabor de boca que no lograba quitarme por mucho que comiera o bebiera.Mis ojos se mantenían alertas recorriendo el lugar a cada dos por tres como si buscara a alguien entre los invitados o si esperase que algo ocurriera de repente.—¿Estás bien mi niña?—la voz preocupada de mi madre me sacó de mis pensamientos y como si acabara de darme cuenta que ella estaba justo a mi lado.La reina, la princesa Nadia, mi padre, Mariantonieta y su prometido también me observaban con la misma angustia, como si intentaran
Si en algún momento de mi vida alguien me hubiese dicho que mi increíble noche de bodas después de esta magnífica celebración sin duda alguna yo hubiese estallado en carcajadas, jamás imaginé que justo este día el ahora mi esposo explotaría en cólera por algo tan absurdo como un vestido...Unas horas antes, justo después del brindis y antes de comenzar con el banquete; subí a nuestra habitación a despojarme del voluptuoso vestido de novia por uno igual de blanco pero mucho más cómodo y sencillo.La gracia del vestido estaba únicamente concentrada en el busto con algunas mariposas blancas con brillos resaltando mi escote, sin mangas o hombreras y con la blanca tela únicamente ceñida en mis pechos y que simulaba una cascada hasta quedar arrastrado por unos pocos centímetros en el suelo con un abierto desde mi entrepierna hasta el dobladillo del vestido mostrando mi pierna derecha completamente.Las doncellas me desenredaron el cabello haciendo dos pequeñas trenzas a los lados de mi cabe
Estamos en los capítulos finales de esta historia y he decidido que ustedes, mis lectores tengan la opción de decidir el desenlace de la misma Aquí les dejo una votación para que mediante a sus comentarios decidan que final quieren: *final trágico con epílogo comenten aquí👉(❤️) *final abierto sin epílogo pero con segunda parte comenten aquí👉(🖤) En mi I***a está de igual manera la encuentra abierta en mi historia destacada Book, pueden hacerlo por allá si desean, aparezco como @janyarletd. Saludos y un fuerte abrazo Jany
El silencio en el que habitación de Mariantonieta se había sumido era consolador, sobre todo porque estaba únicamente quebrado por el goteo del agua de la regadera abierta que empapaba mi piel. Las lágrimas se escurrían por mis mejillas camuflándose con el agua y los sollozos se ahogaban en lo más profundo de mi alma. Mi prima no preguntó nada y lo agradecí enormemente. Pero jamás llegue a pensar que el genio de Nikolas fuese a empeorar a tal punto de estallar su vaso con bebida en la pared a tan pocos centímetros de mí. Era como si no fuese él... —No olvides que no es él en estos momentos, el dragón cada vez tiene más influencia sobre él—las palabras de Arthur resonaron dentro de mi cabeza como si el mismo las estuviese repitiendo desde alguna esquina oscura del lavabo. Pero eso no disminuía el miedo que recorría completamente mi cuerpo. ¿Qué pasa si no lo logra controlarlo? ¿Qué pasa si el dragón gana esa batalla interna que Nikolas lleva en lo más profundo de su subc
—¿Pero a dónde se supone que te iras?— logré pronunciar entre sollozos sujetando a Nikolas de su oscura camisa.Sus ojos estaban oscurecidos por ratos, sudaba como si hubiese estado bajo el mayor de los diluvios, se soltó de mi agarre con movimientos bruscos como si no supiese controlar su fuerza en estos momentos provocando que diera algunos pasos atrás.—Es más seguro para ti—gruñó con la voz ronca sin mirarme siquiera.—Nikolas por favor—suplique acercándome nuevamente a él y volvió a apartarse dejándome en el suelo.Comenzó a caminar a las afueras de la alcoba alejándose de mi a paso firme y justo cuando sostenía el pomo de la puerta entre sus dedos detuvo su paso lazándome una corta mirada por sobre sus hombros y no pude evitar ese brillo oscuro que cada vez se intensificaba más en sus diferentes ojos.—No me perdonaría nunca si este monstruo te lastima—pronunciando aquellas palabras se marchó cerrando la puerta tras de sí.La noche trascurrió tortuosamente lenta para mí que me l
Nikolas CronsHabía decidido alejarme lo más posible de ella y a medida que la noche llegaba y la luna roja se alzaba en el nocturno cielo mi cuerpo se retorcía de dolor como si peleara una batalla sin fin con el yo maldito que se escondía en lo más profundo de mí ser.El dragón utilizaba mis emociones pero mil veces más fuerte y me aterraba que todo lo que siento por Andrea, todo este amor él lo convierta en odio, sangre y muerte. Quizás la maldición se rompa y no llegue a transformarme pero y si no...Caí de rodillas por el piso apoyando la palma de mis manos en el mismo lanzando un gruñido en un intento fallido de alivio.Sentía como si cada hueso de mi cuerpo se quebrara. En mi cabeza un martillo constante me golpeaba y esa sensación dolorosa en las uñas como si me las estuviesen arrancando.Un olor frutal, con unos delicados pasos irrumpió en la cueva en el momento exacto que la luna coronaba en el cielo y no necesite mucho para saber que era ella. Su respiración estaba agitada c
Estoy a tan solo un año de cumplir 18, seré lo suficiente mayor para poder tomar mis propias decisiones y lograr estudiar medicina ,tener el conocimiento para salvar o dar vida me da la fuerza que necesito para luchar por mi vocaciónA decir verdad me niego a terminar rodeada de zapatos en la famosa fábrica de papá o adnegada a la casa como mamá Pero llegar a esa edad también traía consigo una responsabilidad mayor ,mantener el honor de mi familia , siendo la única hija de una familia distinguida de clase alta y viviendo en un reino tan conservador con tradiciones tan marcadas ,al cumplir los 18 años significaba contraer matrimonio como dicta la costumbre El sr Sabash ,mi padre , eligiria un candidato de buena familia sin importar si lo amo o no ,al igual que hicieron con mi madre a mi edad A decir verdad la idea de tener un compañero de vida ,según la experiencia que había tenido desde pequeña en mi hogar ,me encantaba ,el poder tener a alguien con quien platicarle tus problemas y