_ ¡No tienes tantas agallas Kat, sé dócil para que todo vaya bien entre nosotros! _ ¡Claro Jack, lo dices tu, El gran Jack Bill, El temible, ¿cierto? Déjame preguntarte Jack, Duermes todos los días, con una y también la llevas a la oficina. Espera, ¿también quieres que yo sea una de tus sumisas? ¿Quieres, que sea una que este a tus servicios, cada vez que te dé la gana? Te equivocas Jack, no podrás sobrellevar lo que está por venir. _ ¿Qué está por venir? _ ¡Que verás como, al igual que tú! Me llevaré todos los días uno a la cama¡Teniéndolo como sebo atado a mis pies, que estén cada vez que me dé la gana de chorrearme con ellos! _ ¡Cállate! _ ¿Te duele? No, nunca pensé que algo así te fuera a doler. Te advierto, si algo le pasa a kelvin me las pagarás, aún no conoces la otra yo. _ ¡Ya la conocí! Ya la vi y sé de qué es capaz de hacer¡La puse a pruebas tantas veces que ya me aburrí! _ ¡Excelente, en este caso, falta que pruebes la reversa de lo que ya probaste! _ ¿Qué reversa?
_¿Lía y porque llevas una cara de mosca muerta? _ ¡Todo gracias a ti Tim, tu jefe no estaba tan enojado como parecía! Se las llevo. _ ¡En este caso parece que actuaron mejor que tú! _, ¡Shnnn, solo fue pura suelte de ellas! Vendrá otra oportunidad. _ ¡Hmmmm, espero que tengas razón, pequeña! _ ¡Callate, que no estoy de buen humor! _ ¡Oye, por si no estás de tan buena! En la habitación 767 hay un cliente vip. Es un millonario también. _ ¡No me juegues una mala pasada Tim, no estoy de buenas! ¿Es verdad? _ ¡Porque te mentiría! Es un White. Ven mira, dejo su tarjeta para que cobrara todo lo que se gaste hoy. _ ¡Deja ver… Santo cielo. _¿Qué? _ ¡Es un Cadenario de oro supemo! _ ¡Te sorprende ver que otras personas tienen caderario después de los Bill! _ ¡Claro, Los Bill son los Billonarios de toda las regiones, y los jefes mayores! Mira a Jack tan joven y gobierna medio mundo. _ ¡En este caso, Los White gobiernan el otro medio mundo! _ ¡Hoy podrás usar tus trucos favoritos!
Jack salió del edificio y se dirigió a su apartamento de costumbre, es el único lugar donde, lleva siempre chicas diferentes. Mucho lo conoces como la suite de las fantasías. Es el lugar donde él podía hacer todo lo que él,quería y como él quería. Entro y dejo las dos chicas en el sofá, se dirigió al posadero y lleno un vaso con whisky. Stesy lo estaba mirando, se levantó y miro todo el ángulo de la casa, y su mirado reposo en un retrato. Una hermosa sonrisa se dibujó en sus labios. Jack le siguió la Mirada. Mientras que Alexandra se mostraba muy tímida y se sentó mirando a la gran ventana. Dejando en claro que todos esos no le importan mucho. _ ¿Te gusta el retrato? _ ¡Es hermoso, la ciudad es muy atractiva, vivir allí será un sueno cumplido por Mill años! _ ¡Ya veo, espero que puedas cumplir mis deseos está noche por Mill vidas! _ ¡Si señor, así será! _¡Mi lord cuando estás aquí! _ ¡De acuerdo mi lord! _¿Cómo te llamas? _ ¡Soy stesy! _ ¿Y tu compañera? _ ¡Ella, se llama
_¿Señor, lo detenemos aquí? _ ¡No, deja que el mismo me busque! _ ¡Señor, una pregunta es uno de lo que le debe?! _ ¡Tim, el bar debe de estar lleno, ¿Verdad?! _ ¡Lo siento, señor! Jack estaba enfadado en este momento, su cabeza daba vuelta al pasado, cuando su prometida escapo con su mejor amigo, y no desea que esa historia sea repetida. _ ¡Así que viniste a mí, tanto hice para ir a tu territorio, has venido a mi Stone! Jack miró al cuarto, de su habitación y entro en ella. Miro en la vitrina, miro las armas potentes que tenía allí. El aposento de los nombres. Las armas, las balas tenían nombres. Un calibre nueve tenía el nombre de los White. Un calibre nueve y un mágnum 537, cogió únicamente tres balas para cada arma. Y sonrió lleno un vaso de whisky y se la bajo de un solo trago. _ ¡Hoy tú y yo tenemos que hablar de viejas cuentas Stone! Salió a la sala y se sentó un momento, luego salió del edificio dejando a las chicas dormidas. Se dirigió a su apartamento. De allí l
Katty jalo un taburete y se sentó, no paraba de mirar arriba y abajo. No trataba de encontrar a una persona, sino controlar a sí misma, por la ira que contenía. El subastado era amigo de Kelvin por muchos años, pero hora está hecho en añicos y seguramente un mes en el hospital por la patada que recibió. Kelvin pidió un whisky doble, y el camarero se lo sirvió, katty aún no pedía nada, su cabeza daba vuelta, cuando estuvo a punto de preguntar al camarero si conocía algunas informaciones. Kelvin la detuvo. _ ¡No lo Hagas, aquí es un bar muy peligroso, hay ojos y oídos hasta en el taburete que estás sentada! No, espera el momento, dimos el primer paso. Katty no respondía, pero sus ojos se estuvieron aclarando poco a poco, unos instantes ella estuvo con sus ojos claros como el agua. Ella movió la cabeza como respuesta. Kelvin le mostró algunas personas que gobiernan el bar, en la sombra de es Jack, el jefe, pero tiene unos traicioneros. _ ¡Nos quedaremos, un momento y podrás ver por ti
Pero estaba luchando contra ese deseo. Una mujer le había ocasionado muchos problemas antes, y tenía una advertencia por parte de su mejor amigo, su compadre, su socio. No estaba dispuesto a volver a cometer ese delito, pero por lo menos en un futuro cercano. Pero antes de darse cuenta de lo que estaba haciendo, la tomo por la cadera y la subió a la encimera que tenía delante de él. Aparto a un lado la caja de pizza y las botellas de cerveza. Que poco le había durado las buenas intenciones. Katty se quedó sin aliento, sorprendida por la reacción. Sorprendida y complacida, o al menos eso indicaban sus ojos provocativos y su sonrisa felina. Por un lado, no hablar de la forma en que colocó los pies a ambos lados de las caderas. _ ¡Umm! _ murmuró Katty con las pupilas dilatadas. _ ¡Nunca me lo había imaginado! Kelvin la tomo por las caderas con fuerza, paseando su mirada por su bello rostro y después por sus pechos hasta llegar a la uve de su entrepierna. _ ¡Entonces es que tienes much
_ ¡Espero que no hayas cambiado de planes! Relamiendo los labios entre abiertos con la lengua rosada. Abrió los muslos, exponiendo su desnudez a la mirada de él. Kelvin lanzó un gemido al ver lo más bello de ella, frente a sus ojos. No pudo contenerse, tenía que tocarla. Tenía que descubrir si su sabor era tan bueno como su aspecto. Recorrió sus suaves piernas con los dedos y le separo aún más las rodillas. El montículo redondeado que era su centro de atención se habría ligeramente; Los carnosos labios exteriores estaban hinchados, los interiores tenían el mismo color que sus pezones. Apretó la mandíbula tratando de reprimir las ganas poseerla sin más dilación. Temía que, si se sumergía en las profundidades de esa mujer, no querría volver a salir. Haciendo gala de un autocontrol que creía poseer, recorrió la abertura con los pulgares, dejando al descubierto la perla apretada de su sexo. Se inclinó y lo recorrió con la lengua. Katty contuvo el aliento, le temblaba todo el cuerpo.
_ ¡Hace cinco años!_ ¡No me lo esperaba!_ ¡Que te tendría tanto tiempo en mi corazón! Lamente cada día, que no podía acercarme a ti, por otras razones, pero siempre estuve, aunque no podías verme._ ¡Gracias de verdad!_ ¡No hay porque, el que debería soy yo!Mientras que la conversación seguía en pies, Katty miro el reloj, era tarde y no tendría suficiente tiempo para llegar a su casa y cambiarse._¡Mierda!_¿Qué pasa?_ ¡Hoy es la función de negocios, Y no tendré suficiente tiempo para ir a mi casa y cambiarme!_¿Eso es lo que te preocupa? _ ¿Claro y porque no?_ ¡Lo había pensado antes, aquí tienes ropas!_ ¿Ya habías pensado que estaría tarde para el trabajo?_ ¡Si! ¿Será verdad que él lo había pensado o era solo uno de sus planes? La mente de katty daban vueltas en una nube de dudas. No había momento para discutir sobre la ropa, fue al baño y se tomó una ducha. Al salir de la ducha, Kelvin ya estaba vestido. «Maldito código de honor». Dijo Katty en su cabeza. Eran las mismas r