El día ha sido largo, estoy terminando de cuadrar y acomodar las calificaciones de mis alumnos en sistema, al siguiente día les haré entrega de ellas, además realizaremos una pequeña, y tradicional, despedida. Normalmente, para estas fechas suelo tener ya todo listo, pero por alguna extraña razón, algunos de mis alumnos se retrasaron con pendientes y tareas, y como accedí a darles prorroga no pude terminar de promediar a tiempo. Por primera vez en todos estos semestres, me atrasé junto con ellos, algo me retiene a esta escuela.
Termino pasadas las 7 de la noche y aún permanezco en la Universidad, mis clases las imparto en dos niveles, Licenciatura y Maestría, en mi oficina paso la mayor parte del día, ya que no solo me encargo de mis clases, sino de tutorados y asesorías, cabe destacar que todo el día llegan alumnos. Tengo una vida pesada, no puedo negarlo, pero estoy feliz con ello, ya que no tengo compromisos fuera de mi vida laboral que tenga que atender, así que dedico mi vida a lo que más amo… la docencia.
—Doctora Soza, el rector quiere verla. —me avisa Olivia, entrando en mi oficina.
—¿El rector? ¿A mí? Qué raro.
—Me dijo que es algo referente a su permuta.
—Ahora si tiene sentido, dile que un segundo estoy con él, solo termino de subir estas calificaciones, sino después me será más difícil.
—De su parte Doctora.
—Gracias Olivia.
Olivia es la secretaria del rector, puedo decir que tiene 45 años, nunca le pregunté en concreto, me da vergüenza, pero asumo eso, además tiene casi toda su vida adulta trabajando como secretaria de Frank, es de estatura media, cabello negro, ojos grandes, expresivos y cafés, su presencia impone y en su profesión, le va más que bien.
No tardo más de 10 minutos en terminar todo, solo me queda subirlas. Olivia me da paso en cuanto llego con Frank, no tengo que anunciarme, entro directamente, ya es tarde y el Rector solo me espera a mí. Por primera vez no tiene casi nada en el escritorio, su laptop está ya apagada, está sentado, no detrás de su escritorio sino en la pequeña sala que tiene para recibir al personal, nada formal.
—¿Doctor? —él me da paso.
—Entre Doctora.
Lo hago y me siento donde me indica. Está muy tranquilo ya, tal vez hasta impaciente por irse.
—Perdone la tardanza, estaba subiendo calificaciones a alumnos impuntuales y de los extraordinarios.
—No te preocupes Nicole —él me mira sonriendo—, pero deja ya las formalidades, me puedes tutear —él se ríe—, probablemente mi casi hija puede hablarme de tú por una vez en la zona de trabajo —le sonrío, es nuestro último día como jefe y empleada.
—Sí, la verdad que me contuve mucho tiempo —él ríe nuevamente—. No puedo creer que te vayas a retirar, sé que tienen que hacer cambios administrativos, pero tienes tantos años aquí, todos te admiramos y respetamos, deberías de quedarte más, has llevado a la Universidad a donde está.
—Llegó mi momento Nicole, necesitó descansar este cerebro y cuerpo, además mi esposa y yo queremos hacer un viaje. Mis hijos ya están grandes, hicieron sus vidas, hoy por hoy deseo tener esa chispa y romanticismo con Victoria, creo que se lo merece por aguantar mi ritmo de trabajo tanto tiempo.
—Se te va a extrañar Doctor, nos vas a hacer falta.
—Tal vez a ti mujer, porque no creo que a todos. Pero esta reunión no es para que hablemos de mí, cuando regrese ya habrá tiempo de eso, ya que espero verte por mi casa muy seguido. Por ahora y por el motivo por el que te mandé llamar es para entregarte tu permiso —dice caminado a su escritorio para sacar una carpeta de su cajón—. Me alegró haber podido elaborar el contrato yo y que entraras aquí, fue un placer haberte visto ejerciendo la docencia.
—Frank, me alegra estar aquí, dar clases era mi sueño. Y en serio te voy a extrañar, pero espero que te vaya muy bien porque te lo mereces y gracias por este permiso. Agradezco tanto el haberte tenido como jefe.
—Agradecido estoy yo de que me hayas suplido en más de algún curso. Por ahora mi mejor dese es que laboralmente todo vaya bien con el rector que me presida. Es un encargo, quiero que llegues a explotar todo tu potencial mujer. Sé que Erick es algo especial y tiene ideas diferentes a las mías, a pesar de que es más joven, pero académicamente no tiene ningún pretexto, es el candidato ideal y yo le hablé muy bien de mi personal, sobre todo de nuestra profesora estrella.
—Favor que me haces Frank, gracias, de verdad, mil gracias por todo. Seguiré tu legado ya verás. Fuiste el mejor profesor y jefe que pude tener y ya verás, algún día hablaremos aquí, en esta oficina, pero en cargos contrarios —él sonríe.
Abrazo fuerte a Frank, tal vez tiene razón y yo soy quien más lo extrañará y es que es imposible no hacerlo porque siempre ha sido un ejemplo, un referente laboral, prácticamente como un padre para mí, uno de mis más grandes apoyos desde que mis padres fallecieron y saber que no lo veré a diario, sí que me duele, es algo que tengo que comenzar a hacerme en ideas, porque no va a tardar en irse y yo en adaptarme a el nuevo modelo de trabajar del rector que presidirá a Frank.
Desde el momento en el que me dejó sola, el tiempo ha pasado muy despacio, aunque no tengo completa noción de lo que ha sucedido, mucho menos del tiempo que ha transcurrido. La habitación sigue oscura, y yo sigo atada a esta silla sin poder hacer nada en contra de eso.La persona que viene a verme es con la única que mido el tiempo, porque es solo es lo que hace, no habla, no puedo ni siquiera saber quién es el responsable de todo esto y mucho menos saber que quiere. Por mi cabeza pasan muchas hipótesis, posiblemente un secuestro, o una broma, aunque siendo una ciudad con esta reputación, tal vez podrían hacer algo para prostituirme, pero solo puedo suponer y es que mi cabeza solamente imagina cosas terribles por no saber exactamente qué hago aquí, ¿quién puede tener interés en mí? Una simple maestra de universidad, no tengo dinero para un rescate, con mi familia apenas y tengo c
El vuelo ha sido muy tranquilo, tengo boletos en primera clase, la universidad se ha lucido con ese presente por mi partida y por la investigación que voy a realizar para ellos, las comodidades fueron su prioridad para mí. Hace semanas me di a la tarea de rentar un departamento por 6 meses, la investigación va a durar desde inicios de julio a finales de febrero, podré recuperar y reincorporarme a mis cursos como si nada hubiera pasado, no apareceré en la matriculación de ese semestre en materias, pero si en el periodo siguiente y al parecer tengo clase llena. Espero que estas vacaciones me sirvan para relajarme, llegar con buena actitud, pero sobre todo con más conocimientos para compartir con mis alumnos.Se me ocurrió tomar el vuelo en la madrugada, mi avión saldrá a las 2:45 de la mañana y llegará 7:20 a.m., a Roma, será un vuelo corto de poco menos de 5 horas, arribando el 26, as&ia
Abro los ojos para encontrarme con una nueva sorpresa. Estoy en la cama, atada con una cadena corta que va de la cabecera a mi muñeca derecha.—Por fin despiertas, querida.Erick Covarrubias está sentado en una silla no muy lejos de mí.—¿No dijiste que no ibas a volver hasta que suplicara?Mi mente no había medido el problema en el que me comenzaba a meter.—Rogaste de una manera que no esperabas, rogaste porque te controlara, porque al parecer Nicole, te gusta estar atada.—¿Qué te hice yo? —le pregunté acerca de la situación a la que me estaba llevando, ¿porque me había escogido a mí? ¿Porque era así?—Tiraste la comida que se te estaba brindando, gritaste ofensas contra mí... —yo lo interrumpí.—¿Y lo que t
Se acerca la fecha de entregar mis últimos reportes para el semestre que va a iniciar, la realidad es que, al ser tan perfeccionista, el hecho de que tenga que planear un semestre completo, me ayuda a controlar esa tendencia al orden que tengo, que, en realidad, solo es un control hacia mi trabajo, mi misión siempre es que mis alumnos se lleven los mayores conocimientos posibles y yo necesito estar preparada para eso. Entro al despacho de Frank, mi jefe y mejor maestro de doctorado, él siempre me ayuda y me dice que puedo agregar o quitar a mi planeación, a pesar de llevar 5 años en eso, aún tengo algunas dudas y Frank siempre está dispuesto a ayudarme. —Tengo mi planeación, ¿está Frank, Olivia? —Está ocupado, está el vicerrector con él. —Supongo que lo está capacitando ¿no? Frank me comentó algo así —ella me asintió—. Créeme Olivia que lamento que Frank se vaya, es el mejor jefe que pudimos tener. —Lo sé, dímelo a mí q
Han pasado días, de eso estoy segura, porque la comida se presenta puntual sin que yo pueda comer, solo olerla y saber que no la puedo tener, ya que estoy encadenada a esta maldita cama.Estar sin comer no es lo único que me mantiene despierta. Las temperaturas extremas me están llevando al límite, el frío regresa 3 veces al día por al parecer media hora y el calor exagerado el mismo tiempo. Mis piernas tienen ya moretones, mis manos por supuesto que comienzan a adelgazarse, recuerdo que la única vez que entraron fue para ajustarme la esposa al tamaño de la muñeca. Claro, estaba sedada, pero en esa ocasión logrado por el estúpido gas que Erick me dijo que se iba a activar. No tardé ni 2 minutos en sufrir sus efectos y después la esposa se encontraba más firme y la cadena medio metro más larga.A este punto es lo único que ha pasado. Él no ha venido a v
Despierto, para mi sorpresa en un lugar distinto, es una nueva habitación. Estoy en una cama, me toco rápidamente, tengo ropa otra vez, un pijama, ya no tengo esposas, ni estoy amarrada.Me siento en la cama y observo todo a mi alrededor. Esta habitación es por completo diferente, hay un vestidor, un tocador, un escritorio y librero, igual que dos mesas de noche, todos en color blanco de roble macizo, la cama tiene dosel y toda la ropa de cama igualmente es blanca. El vestidor no tiene puerta, pero el baño sí, aunque no tengo la intención de entrar, sólo me paro a observar, tengo un cuarto amplio, mucho, la cama está situada justo en medio de la habitación, la puerta principal se encuentra justo frente a la cama, igual que el tocador, y del lado izquierdo baño y vestidor y del lado derecho está el pequeño librero con apenas y decoraciones y un escritorio con casi nada más que una libret
"Contrato de Paternidad"1.-El sujeto "A" denominado como "El Aportador" será el que determine la validez o invalidez de este contrato, así como los puntos siguientes que se deben de cumplir en el momento que Él lo disponga.2.-El sujeto "B" denominado como "La Beneficiada" será la que reciba los beneficios de "El Aportador" por medio del cumplimiento de este contrato, al no hacerlo "El aportador" puede utilizar cualquier medida de castigo anexadas en el apéndice de castigos.3.-PRIVILEGIOS; La beneficiada tiene que ganarse estos privilegios de manera de complacencia hacia "El Aportador", no hay derecho de réplica, ni acuerdo de modificación de estos puntos.3.1. Deberá ser obediente
No puedo creer lo que acabo de leer, esto es una completa burla hacia mi persona, hacía mi identidad, este hombre no sólo quiere, a sus criterios, un hijo de mí, sino una maldita esclava mental y sexual, ¿por quién carajos me ha tomado? ¿Cómo es que creyó que soy de ese tipo de mujeres? ¿Lo doy a aparentar? Hace años que no he tenido relaciones con alguien, probablemente más de 2, ¿cómo es que piensa que yo soy complaciente y que tengo iniciativa en estas cosas? No lo entiendo, sus puntos me asustan, y para colmo de mis males, me quedan apenas 15 minutos para que esa puerta se abra y yo pueda bajar a "discutir" esto con él. Pero ¿qué tenemos que discutir? Solamente tengo que acatar su maldita voluntad y escrúpulos tan... enfermos.No puedo permitirle que vea que su contrato me está volviendo loca y que es un completo absurdo, tengo que ser más i