Anna════⁂════Seguro que debo estar de suerte para que en este día Junot haya decidido que existo y que soy útil. Me ha sorprendido con su orden disfrazado de petición para que le acompañe a un lugar que no tengo ni idea de a donde es, ya que básicamente sus palabras fueron, “deje lo que está haciendo y venga conmigo”.Sí que debo estar de mala suerte, me corrijo porque su cara desde que salimos del edificio ha sido todo un amargado poema, y para completar no ha dicho una sola palabra. Lo que me hace pensar que debe estar costándole un pulmón solicitar mi compañía; sin embargo, si es así, por qué se empeñó en que viniera con él.―¿No va a decirme a dónde vamos? ―Me atrevo a preguntar.Él, medio se ladea solo para fruncir el ceño.―Ya lo sabrá apenas lleguemos ―responde más seco que una estopa.―¿Por qué tanto misterio, señor Junot?―No hay ningún misterio.―Para mí sí porque no ha dicho más nada que ordenarme que vaya con usted.―Soy el jefe, así que puedo ordenarle cosas ―repone aut
Observo a ambos de hito en hito antes de dirigirme a los estantes de muestras. Decidida, voy hacia allá y empiezo a leer la información en cada etiqueta. La verdad es que no conozco a su hermana, tampoco sabía que tenía una, pero asumo que debe tener el mismo gusto que él, por lo que sea lo que sea que elija de seguro, no lo aprobará y estará de acuerdo con la diseñadora por considerar que es la experta en su trabajo. Mientras reparo los muestrarios trato de pensar en que le gustaría a un Junot que tuviera mi edad, luego deshago la idea pensando que seguro viene amargado desde la cuna y luego de joven ya era un completo huraño. Entonces decido en lo que me gustaría ver a mí en mis paredes si mi madre me dejara redecorar la casa. Algo que no pasará porque ha dicho que lo que tenemos ahora no es para malgastarlo y mientras no despilfarremos el dinero en vanidades, es mucho mejor.«Supongo que para ella». Refunfuño en mi interior por ello, pero si pudiera hacerlo decido que me gustarían
Reginald════⁂════Solo se vive una vez.¡Qué estupidez! Sin embargo, es cierto, “cuando mueres ya no hay más vida terrenal y no importará nada porque todo lo que has hecho solo llegará hasta allí y ya no habrá modo de intentar nada más”. Franç dijo eso antes de que me diera la noticia. «Yo ya no tengo tiempo e intenta no perder el tuyo», ¡cielos! ¿Por qué estoy recordando todas estas estupideces ahora?Quizás ella le recuerda que aún es joven…Ella es la cosa más equivocada de esta vida, solo impulsividad y cero convicciones. ¿Es así? O solo le estoy menospreciando sin darle un chance a que demuestre lo contrario.Otra estupidez más.Sacudo mi cabeza de todas esas tonterías y me centro en la señorita Brianna Callum q
Anna════⁂════La verdad no sabía qué pensar de este hombre, me enoja mucho, pero también me causa curiosidad. ¿Qué iba a decirme? No lo sé y quizás no lo sabré nunca por qué su aparición no fue precisamente para eso; además que su reunión con la señorita Callum debió ser mucho más agradable que encontrarme aquí todavía. Esto solo sirve para que siga suponiendo cosas sobre mí que no son. Sin embargo, a veces me da la impresión de que es como esos tipos bipolares que dicen una cosa y piensan otra, luego. Crees que les caes mal, pero da la impresión de que puede ser todo lo… contrario. Puede que no le disguste tanto como aparenta.«¿Y si fuera así?».¡Cielos! Eso es imposible.Creo que sus cambios hormonales, ya me están haci
Reginald════⁂════Creo que estoy un poco loco, y de alguna forma ha sido por influencia de esa chica.¿Por qué cuernos estoy dejando que pase todo esto?Quizás porque en el fondo me resulta diferente a lo que habitualmente hago en mi vida, que se remite solo a codiciar un negocio en el que pongo toda mi atención y que al final no será mío. Siempre pienso eso, y tal vez porque no me hago a la idea de que Franç deje todo en mis manos.«Pero él se está muriendo», y es la razón de todo. Suspiro hondo pensando en ello. Trabajé tanto por esto y hasta hice todo por impresionarle y mostrarle que estaba feliz de que me diera un hogar, que ahora que lo tengo en las manos no me atrevo a pensar que es mío.―Vaya, debes estar muy de malas para invitarme una copa. ―Ese es Trevor que aparece luego que de forma irónica fuera yo quien le sacara de la cama para que bebiéramos un trago, sin embargo, la situación lo amerita.Él ha mostrado estar interesado en Anna y después de la tontería de trato que a
Anna════⁂════Personalmente, no anhelaba este día y deseaba que nunca llegara porque solo significa tener responsabilidades que no quiero; pero llegó. Termino de arreglarme y bajo hasta el comedor. Mamá está allí tomando su desayuno y no pierde vista de cada uno de mis movimientos, como si contara cada uno de mis pasos y calibrara lo poco decididos que están. Ahora somos solo ella y yo desde que Emma se casara y se marchara, y no me quejo porque me gusta estar en casa.Es grande y bonita, solo le hemos hecho un par de arreglos para remodelarla ahora que tenemos el dinero, para mantenerla a la altura. Todo eso es bueno, pero sé que ella no está contenta conmigo porque desearía que fuera otra “Emma”, abnegada y obediente; y yo no soy ella, tampoco será posible nunca. Ella ahora es feliz con su flamante marido y mientras, yo tengo que seguir buscando lo que quiero, pero no será por mucho tiempo porque también pienso encontrarme un
Hago un comedido asentimiento. Justo mi comida termina de calentarse, pero no la retiro aún del microondas. Parece un ejecutivo de planta y no quiero pasar esa vergüenza.―¿Dependencia? ―continúa preguntando ahora de forma más directa.Me espabilo un poco.―¿Disculpe?―¿En qué lugar empezaste a trabajar?―¡Ah, eso! ―exclamo un poco avergonzada porque me ha tomado por sorpresa―, recepcionista en la dirección general ―respondo y él hace un leve gesto con su boca que no sé si es de aprobación o lo contrario―, trabajaré como pasante para el señor Junot ―añado para más referencias.―¿En serio? ―pregunta demasiado asombrado y no puedo evitar sonreír.―Eh, sí ―respondo algo cohibida y deseando saber quién es y por qué el interés.―¿Y ya le has visto? ―pregunta y me da la impresión de que quiere generar algo de confianza.―Eh, no todavía, aunque me da igual si no le conozco. Pero seguramente he de caerle bien, porque él apreciab
Supongo que sentirme estúpida después de mi metida de patas es poco para lo que he tenido que aguantar del señor odioso Junot. Después de ese incidente y a lo largo de toda la semana he tratado de buscar el momento adecuado para hacerle ojitos y disculparme, pero no ha sido posible, siempre tiene cara de póker y anda apurado con una reunión tras otra. Me da la impresión de que no quiere verme ni en pintura, y para su mala suerte estoy allí como una estampa en el mostrador de la entrada.Lo pienso así porque cada que entra pasa por delante y ni siquiera se digna a mirarme, como si eso que dijo que ya había visto suficiente de mí fuera cierto.¡Qué le pasa!En un principio le había disculpado su pésima actitud porque fue mi error no informarme bien y corroborar que lleva el mismo nombre de su padre, pero tampoco era suficiente para que me tratara como si fuese invisible. Me pregunto si con Emma era así.¡Qué estupidez!Seguro que no, la buen