Dalila¿Que para eso estaba yo allí?,Alfa idiota,perro sarnoso,lobo gruñón,¡Arggggg!.Estaba muy enfadada por no haberle contestado cuatro cosas en ese momento.Pensé en volver y decírselas pero al haber pasado un rato ya no tendría gracia y eso hacía que mi ira burbujeara por todo mi cuerpo.Poco a poco empecé a calmarme y tocaron en mi habitación .—¿Quién demonios es?— grité.Puede que no estuviera tan calmada como yo pensaba.—Luna disculpe,soy yo,Gary— entonces recordé que Dorian me había dicho que el guardia me acompañará a la inauguración.—Pasa,Gary— el lobo abrió la puerta y entró.—Venía a recogerla para ir a la inauguración del mercadillo.El Alfa me pidió que la acompañara——Sí,algo me comentó.Voy a cambiarme y ya nos vamos——La espero fuera—No sabía que ropa se suponía que debía llevar a una inauguración así que opté por un vestido de entretiempo,de manga larga ,pecho ceñido y vuelo en la falda.Era verde oscuro con unos bordados en el pecho en tonos mostaza.Me llegaba a medio
DalilaDespués de cenar con la manada en el mercadillo solidario y esperar a que hicieran la rifa ,Gary me llevó a casa.Esa noche Sirius no vino a dormir conmigo y estuve inquieta.Al día siguiente apenas crucé palabras con Dorian en el entrenamiento y cuando terminamos el desayuno me pidió que lo acompañara a su despacho porque tenía que darme algo.—¿Qué es esto?— pregunté cuando puso una enorme carpeta encima de su escritorio.—Son las fichas de todos los miembros de la manada.Quiero que los visites,actualices sus datos y los pases a ordenador.Lo siento,es algo que debería haber hecho yo hace tiempo pero siempre tengo mucho trabajo y ——Lo haré yo,no te preocupes — corté su justificación.El lobo realmente parecía cansado —Estoy aquí para ayudarte,Dorian,no tienes que llevar la carga de la manada tu solo— Fui hacia la silla del despacho donde estaba sentado el castaño y me senté en su regazo abrazándolo.Aunque había sido un idiota estás últimas semanas ,más idiota de lo normal quier
DalilaLo que me había contado Gary el día anterior en su casa todavía resonaba en mi cabeza.Su pareja lo había rechazado y lo más fuerte era que ¡se podía rechazar a tu pareja!.Sí hubiera tenido conocimiento de esa información cuando un lobo gris se me plantó delante gritando "mía" me hubiera ahorrado muchos problemas.La historia del guardia me dio mucha pena.Su pareja resultó ser una muchacha de la manada donde él y su madre estuvieron acogidos.Cuando volvió allí para visitar la tumba de su madre, después de la guerra, la encontró.Ella no le dio tiempo a nada y lo rechazó nada más verlo.Al tiempo se enteró de que ella ya tenía una pareja elegida cuando se encontraron y estaban esperando su primer cachorro.Por lo que me contó Gary no todo el mundo encuentra a su pareja destinada y hay lobos que ,simplemente, eligen a alguien para compartir su vida al igual que los humanos,aunque esos eran los menos porque la mayoría espera a la pareja que su Diosa ha elegido para ellos.Es un gran pr
DalilaDespués de la bronca con Dorian salí al jardín en busca de Gary.—¿Qué será,hombro para llorar o ayuda para matar a alguien?— preguntó el guerrero intentando poner una nota de humor.—Por lo pronto quiero que me saques de aquí.Sigo muy cabreada — le dije dirigiéndome ya hacía su coche.—Sé el lugar perfecto para ir entonces— me alcanzó y se montó en el asiento del piloto de su coche.—¿Es en serio?— dije cuando llegamos al centro de entrenamiento.—Ven——Gary no tengo ganas de entrenar— bufé mientras el lobo me llevaba a una sala donde no había estado nunca.Había una especie de ring de boxeo en un lado y al otro varios sacos colgados de la pared.—¿Para qué tenéis sacos de boxeo?.Con vuestra fuerza me extraña que todavía sigan de una pieza— dije observando los sacos.—Precisamente por eso mismo,para aprender a controlar nuestra fuerza y saber usar la potencia.Te buscaré unos guantes para que no te hagas daño— entró en una pequeña habitación que había a un lado y salió con unos
Dalila—Sigue cantando,la letra es buena— Dorian estaba sentado en una de las sillas de mi habitación .—¿Qué haces aquí,lobo?.¿A parte de ser un mentiroso ahora también eres un acosador?— bufé sin mirarlo.Fui directa al armario y agarré mi ropa interior y mi pijama.—Tenemos que hablar ,Dalila——Tú y yo no tenemos nada de que hablar ,lobo.No quiero oír nada de lo que tengas que decirme— dije acusándolo con el dedo.—He venido a hablar y a traerte la cena— en la mesa había una bandeja y en ella un plato con filetes y ensalada,un vaso con agua y una fruta.—No tengo hambre,puedes llevártela— dije dando un portazo con la puerta del baño.—La puerta no tiene culpa— el lobo me estaba poniendo de los nervios.—¡Vete a la m****a,Dorian!— le grité esperando que se fuera de una vez de mi habitación.Me puse la ropa interior,el pijama y sequé mi pelo con un secador.Tardé un buen rato en salir deseando que el lobo no estuviera todavía allí pero mi deseo no se cumplió.—¿Qué haces todavía aquí?,n
DalilaLe escribí a Gary para que viniera después del almuerzo.Llevaba en la cama desde que volví de tener la conversación con Lili y mi mente no había dejado de funcionar a mil por hora.Necesitaba un respiro.Quizás unos golpes a los sacos de boxeo me ayudarían a no pensar.Me puse la ropa de deporte y abrí un poco el ventanal para que la habitación se aireara mientras yo estaba fuera.Iba a correr las cortinas cuando me fijé que Dorian estaba en el jardín caminando junto a Lili. Sabía que la rubia me había visto pero quería oír de que estaban hablando así que me quedé escondida detrás de las cortinas casi sin respirar para que el Alfa no me notara.—Dorian,querido,nunca me vas a echar de la casa de la manada ni de tu lado,¿verdad?— la voz de la rubia volvía a ser igual de chillona que siempre.Supongo que al saber que yo estaba escuchando Lili iba a hacer preguntas comprometedoras.—No,claro que no,tu sitio siempre estará aquí ,a mí lado— pude escuchar claramente la voz del castaño,¿Per
MateoLlevaba unos días visitando varias manadas para intentar averiguar algo de ese tal Taruk y su pequeña manada nómada .Era algo muy frustrante porque la mayoría de los lobos no solo no la conocían sino que me miraban incrédulos cuando les explicaba sobre ella.—Lo siento,no hemos escuchado nunca hablar de esa manada ,Beta Mateo— me comentó Alfa Samuel acariciando su larga y blanca barba,desde la silla detrás de su escritorio.Su manada estaba en el Oeste y no era muy grande.—Gracias,Alfa Samuel.Por favor si se entera de algo,por muy insignificante que sea ,no dude en llamarme—Era la quinta manada que visitaba y estaba empezando a cuestionarme si realmente existía ese tal Taruk .De alguna forma tenía que estar relacionado con Lili y los ataques hacia Dalila.Había hablado con Dorian hacía un rato y su humor no era el mejor así que mis noticias o,mejor dicho,la falta de ellas ,no había hecho nada por mejorar su estado de ánimo.Mi amigo y Alfa estaba bastante desesperado y lo entendí
DalilaMi corazón martilleaba en mi pecho tan fuerte que dolía.Estar en el maletero de un coche en movimiento tampoco ayudaba a que mi corazón se calmara.La rubia había llenado su maletero con prendas de ropa suyas y me iba a costar un buen baño quitarme su olor dulzón de encima.Cuando llevaba un tiempo encerrada en ese sitio ,que a mí se me hizo eterno ,el coche se paró y la puerta del maletero fue abierta.—Ya puedes salir— la rubia me ayudó a bajar ,me senté en el asiento del copiloto y volvimos a emprender la marcha.Intenté con todas mis fuerzas no llorar delante de Lili.Ella no me estaba ayudando,solo me estaba utilizando para obtener lo que quería disfrazándolo de buena acción.Eso yo lo tenía claro así que no le daría la satisfacción de verme llorar.Cuanto más nos alejábamos de la manada el vacío en mi pecho se hacía más grande y se hacía más difícil aguantar las lágrimas.Miré hacía la oscuridad de la ventana y una imagen vino a mí. Recordé a Sandrine diciéndome que yo era la