El hombre que solo había visto con rostro serio durante mi noviazgo con Blake, tiembla notablemente ante las palabras de Jareth. Era como si el hombre a mi lado, fuera un justiciero que nadie puede tocar.
—Le aseguro que le daré una lección a mi hijo. Como he tenido tantos hijos ya grandes, di por sentado que él aprendería con el ejemplo de mis hijos mayores, pero, veo que me he equivocado— dice el señor Dankworth
—Padre, eres un alfa también, no deberías complacer a este señor, solo porque proviene de una adinerada— dice Blake con evidente molestia.
El hombre camina hacia su hijo y le da una bofetada que me hace estremecer al recordar los golpes que Carrier me daba cuando demoraba en hacer algo que ella quería inmediatamente.
Aunque me había prometido actuar fuerte, el golpe que despierta esos recuerdos desagradables, hacen que tiemble y el hombre a mi lado, me abraza recordándome que no estoy sola. La Adhara de aquel tiempo, ya no existe ni debe ser
Después de que ellos se marchan, el enfrentamiento termina, pero, un miedo aparece. Ya que, Jareth me había encontrado con mi ex prometido a solas y precisamente hablando de cosas que eran comprometedoras, y no sabía cómo iba a reaccionar.—¿Te encuentras bien? —pregunta Jareth y yo me alejo un poco de él para asentir.—Pensé que te habías marchado— murmuro y Jareth suspira profundo.—Sentí el olor de un hombre en la casa y me quedé esperando que pudieras hacerte cargo de ello. Cuando ya no pude esperar más, entré a la propiedad. Espero que no te moleste— dice Jareth y yo niego.—Gracias por no desconfiar de mí y dejar que me haga cargo— digo y él me sonríe.—Quieres ser fuerte, por eso, te dejo enfrentar esto. Pero, si ya no quieres serlo, puedes decirme y yo me haré cargo de todo&mda
El día de la bodaDespués de tantos preparativos, que hacían mi día más agotador, el día de mi boda llega y con este, el nerviosismo por el temor de que las cosas no salgan bien después de esto.Durante este tiempo había estado trabajando en la empresa de Jareth y sus amigos mi profesión. Por lo que, había dejado mi puesto de trabajo en la empresa donde Jareth y yo nos habíamos reencontrado.Aunque esa empresa es muy grande y está muy bien consolidada, ser parte de una empresa que promete mucho crecimiento, es una oportunidad que no pienso desaprovechar y por eso, me quede en la empresa donde ejerzo la carrera que estudie.—Ya estamos por comenzar la ceremonia— avisa la organizadora del evento y yo asiento.Jareth no quería que trabajará hoy, pero, sin familia que calme mi nerviosismo, lo mejor era distraer mi mente trabaja
Estoy muy conmovida por las palabras del señor John, al punto que tuve que utilizar un pañuelo que Jareth me había entregado, para poder secar esas lágrimas acumuladas en mis ojos, que amenazaban con arruinar mi maquillaje.La ceremonia apenas había comenzado, ya yo había confirmado que hoy era el día más feliz de mi vida. Porque, además del discurso del señor John al momento de entregarme, podía sentir la mano cálida del hombre que me sonreía cada vez que giraba a ver.La ceremonia había ocurrido sin algún problema. Por lo que, después de escuchar el tan anhelado: ‘los declaro marido y mujer’, El alivio me invade al confirmar que ninguno de los miembros de mi familia va a venir a arruinar esta boda.Justo cuando suspiro después de haber mirado hacia la puerta de la salida, el Sacerdote, nos da el permiso de besarnos y por eso ya ret
La mujer que nunca hubiese estado de acuerdo en tener sexo en un auto en movimiento y menos, con un vestido con tantas telas encima, se aferraba al cuello de su esposo porque el orgasmo que estaba por destruirme completamente, provocaba espasmos que si no era porque me aferraba a su cuello y él me abrazaba, habría caído desplomada.Los gemidos que en el pasado me hubiese dado demasiada vergüenza, hoy era motivo de satisfacción, porque me sentía demasiado bien y los gemidos, eran el sonido que confirmaba dicho placer.Jareth, tiene su rostro en medio de mis pechos y sabiendo como me enloquece, mordisquea levemente mis pechos, prolongando los espasmos del orgasmo que aún estaba en mi cuerpo.Me encontraba agotada y satisfecha, como si todo el día hubiese esperado esto, porque toda posible tensión que sentí desde que empezó el día, desapareció con este orgasmo.—&i
Obsesión, una palabra que Jareth había dicho muchas veces y aún no comprendía cómo debía interpretarlo. En la forma en que lo dice, parece que dijera un halago tipo de amor más grande que el propio amor. Pero, las obsesiones no son saludables. Entonces, es eso lo que me hace dudar.—Realmente quiero saber qué es lo que entiende por obsesión. Porque yo entiendo cosas muy distintas y dudo que eso sea lo que quieras decirme— murmuro y Jareth asiente.—Te lo explicaré cuando tenga una idea más centrada de cómo explicarte, porque eres mi obsesión. Ahora lo mejor es que salgamos antes de que se nos haga más tarde, —Dice Jareth y yo de inmediato niego al saber cómo estoy en estos momentos, por sucumbir a la tentación de mi esposo.—¡¿Te has vuelto loco?! —pregunto escandalizada.—Creo que los dos s
Era evidente que la mujer frente a nosotros no le agradaba mucho que estuviéramos así de cerca el uno del otro. Pero, lógicamente eso es algo que no me importa. Anteriormente, no era una chica vengativa, pero desde que me di cuenta de que cazas o eres cazado, prefiero ser la primera.—Señor Every, no le preste atención a mi tonta nieta. Ella no sabe lo que dice. Al parecer, mi hijo no supo educarla bien, —dice el anciano y Jareth suspira profundo.—No estoy interesado en que me vean como una persona intimidante y amenazante que comete actos injustos a alfas menos fuertes que yo. Pero, si ella continúa molestando a mi esposa, no me voy a contener. ——Comprendo perfectamente lo que quiere decir y le aseguramos que esto no va a volver a suceder, —Dice el anciano con nerviosismo.—Usted no necesita disculparse. Quien cometió el error es quien debe hacerlo y no la veo muy intere
Perfectamente que el llamado de Eda Every, sólo significaba una cosa; desastre. La mujer con demasiada energía y muchas ideas un poco extrañas, se tambalea mientras camina hacia nosotros a tal punto de que el líquido de su copa se derrama por el suelo.—¿Quién permitió que bebiera hasta este punto? —Pregunta mi esposo con preocupación.—Seguramente supo cómo beber tanto sin que se diera uno cuenta, pero, es evidente que ya no se puede hacer algo al respecto, sino soportarla e implorar que quiera irse a dormir temprano— dice el señor Every mientras su esposa sonríe.—La noche es joven, no sé porque quieren marcharse tan pronto. ——Cariño, los invitados ya quieren marcharse, ya es pasada la medianoche— dice su esposo.—Eso es porque no he contado anécdotas del increíble Jareth Every. Les asegur
Llegamos a nuestro destino, una gran casa a orilla del mar, donde se puede ver todo desde el interior de la casa, porque la mayoría de las paredes son de vidrio. El viaje fue agotador, pero, la vista lo compensa cuando al momento de sentarme en la sala, el amanecer aparece con un sol que ilumina poco a poco el mar.—Hemos pasado toda la noche viajando, dime si deseas dormir unas horas o si ya quieres disfrutar del lugar— dice Jareth y de inmediato, me voy por la segunda opción.—Quiero caminar por la playa— digo y él asiente.—Voy a cambiarme, puedes salir primero si lo deseas— dice Jareth y yo salgo descalza para sentir la arena en mis pies.Al estar siempre en escandalosas ciudades, nunca había tenido la oportunidad de estar en una playa real y no un centro de recreaciones con piscinas que intentan imitar las olas y arenas de una playa.Por lo que, sonriente avanzo hasta el agua que