No decimos algo más y yo me bajo del auto apenas llegamos a la propiedad del señor John. Sin embargo, mi intento de huida queda a medio camino cuando el hombre que me había traído con unos pocos pasos ya me ha alcanzado y tomado mi mano.
—¿Qué te sucede? ¿Sucedió algo que te molesto? ¿Hice o dije algo que te haya desagradado? — pregunta Jareth directamente y yo deseo realmente decirle que mi malestar es por saber de esa mujer.Pero, sentía que no tenía el derecho de hacer esa o cualquier otra pregunta al hombre que por unas horas había pensado que estaba en una misma página conmigo. En una donde sin saber mucho de él y Jareth todo de mí, no había secretos.Sin embargo, esa fue solo una ilusión, porque el hecho de que yo no tenga secretos, no quiere decir que él o su familia no los tenga y pensar que esa víbora tiene raz&oacutRealmente no podía creerlo, en el pasado, mi padre solo me había ignorado o le había mostrado apoyo a mi hermana o mi madrastra y yo duraba toda la noche llorando por sentirme sola.Pero, esta vez que el problema había crecido notoriamente, estaba bastante tranquila. Como si no me doliera y si me dolía, pero, ya no lo veía como el motivo de mi llanto. Con pasar un día con los Every, había comprendido que no merecía mi llanto.Eso era muy sorprendente, porque me decía que no era una mujer débil, si no que, había depositado mi energía y mis esperanzas suplicando migajas de un amor que debía recoger del suelo.—Oh, eso— susurro y ellos me miran con lastima.—No necesitas fingir que no te duele. Sabemos que es demasiado doloroso que tu única familia te trate así y use tu odio para ser noticia— dice el señor John y yo sonr&iacu
Narrador omnipresenteMientras Adhara informa de lo que va a hacer a partir de ahora a las personas que le habían mostrado apoyo incluso cuando había quedado en la calle, Jareth Every había regresado a casa de sus padres y sin interés de entrar al salón donde estaba la fiesta, se marchó a la oficina donde estaban todas las cámaras.Sabía que algo había pasado en su ausencia, por lo que, sin deseos de irse a dormir sin saber lo que sucedía con Adhara, comenzó a revisar las cámaras de seguridad del salón y maldijo al ver como su madre había presentado a muchas personas a Adhara.—La abrumó— dice Jareth mientras se culpaba por haberse entretenido demasiado con los problemas de sus amigos e ignorar que el peligro era su propia madre.Continúa revisando las cámaras de seguridad para saber qué otra cosa había sucedido y
La noche había sido largo para todos. Eda había tenido una fiesta hasta el amanecer por celebrar el cumpleaños de su hijo y el compromiso con Adhara, Chantal, había estado maldiciendo toda la noche la suerte de Adhara y ella no era la única.La forma en que fue cuidada Adhara por los Every, era tema de conversación entre todos los que estuvieron presentes y estaban diciéndole ello a su familia.Jareth, por su parte, se la había pasado haciendo ejercicio, porque no podía dejar de pensar en la mujer que le había hecho olvidar cuan estricto era en la limpieza y como en el pasado la habría regañado por subirse en la isla de la cocina casi desnuda.Parecía que hubiese sido alguien más, porque había soportado los fluidos de la mujer en su ropa, en el auto y en la cocina, como si fuera algo normal e incluso, la había besado en lo más profundo de su ser, cuan
Narra AdharaEstaba claro que no había manera de hacerlos cambiar de opinión y no podía mantenerlos aquí por más tiempo. Ya que, la incomodidad de los ancianos era evidente. No es normal que una persona de tan alta categoría, este visitando a un omega.Era como si en el tiempo de antes, el emperador visitara a un esclavo a su casa. No era algo lógico y si sucedió en el pasado, debió ser igual de incomodo como lo es ahora estando frente a los Every y el señor John.—Entonces, como está aquí, es evidente que no es una broma eso de hacer la boda pronto— susurro terminando de procesar lo que me ha dicho.—Por supuesto que no, cariño. No bromearía con algo tan serio. Así que, vamos, hay muchas cosas que hacer— Dice la señora Eda y yo busco la manera de escapar de ella.Sabia como eran las compras con ella y aunque me sentí
No sabía cómo rechazarlo, aunque su madre era más conversadora y lo arrastraba uno a muchas cosas por medio de su discurso, Jareth Every era de acción. Él era contundente y en su mirada, no había manera de negociar algo para que como su madre se marche.Así que, evidentemente, las cosas no estarían fáciles con él. Aunque observando el tiempo que he pasado con él, puedo decir que nada es fácil con el hombre frente a mí, ¿Por qué tuve que enredarme con él?—Te estoy esperando— dice Jareth y yo tomo su mano sabiendo que no hay manera de escapar de esto —Buena chica——No estas entrenando a un perro, señor Every— le recuerdo y él me sonríe.—No te vería como un perro, si debería relacionarte con algo, seria con un conejo. Porque eres muy tierna, suave y…— dice Jareth da
Necesitaba controlar la situación, porque el hombre que estaba sobre mi cuerpo parecía un animal y no precisamente de esos tiernos. En pocas palabras, parecía que estuviera en celo, pero, eso era imposible porque ello solo nos sucede a las mujeres.—Debo tenerte— susurra Jareth y yo lo aparto un poco.—Concéntrate en mí un momento——Nena, por estar tan concentrado en ti, es que estoy así de mal— dice Jareth y yo respiro profundo para no enloquecer con el aroma que su cuerpo desprende.—Realmente tengo hambre. No comí después de lo poco que comí en tu casa y esa energía la consumí casi de inmediato. Así que…— susurro y Jareth lleva su rostro a mi cabeza y aspira fuertemente mi cabello, para después alejarse.Su corazón agitado, comienza a disminuir su frecuencia de latidos y él se aleja lentamente de m
Tres horas despuésMi cuerpo ya no me pertenecía. No sabía cuántas veces podía volver a tener mi orgasmo, pero, sentía que si tenía uno más, terminaría muerta. Mi cuerpo ya no podía moverse y era por ello, que estaba sobre el pecho del hombre que me bañaba como si fuera una muñeca o una bebé que no puede moverse por tener tanto agotamiento.Su toque era suave, muy distinto al salvaje tratamiento sexual que hemos tenido. No habíamos comido y aunque nos habían dicho hace rato que nuestro pedido estaba sobre la mesa, no habíamos tenido interés en comer cuando nuestra hambre era sexual.—¿Sí te dejo en la tina por un momento mientras voy a buscar la toalla, no te hundirás en el agua? — pregunta Jareth y mi forma valiente e independiente que estoy formando, quiere apartarlo y decirle que puedo sola.Pero, mi cuerpo me
Jareth suspira profundo y yo reúno fuerzas para alejarme de él y aun sintiendo dolor, caminar lo más lejos de él mientras busco ropa. ahora, no solo sospechaban que tuviéramos sexo, si no que, lo habíamos confirmado sin pensarlo.—Disculpa a mis amigos, ellos son muy bromistas— dice Jareth y yo siento que voy a morirme de lo roja que me encuentro.—Debemos apresurarnos. Dejaste a un lado tus obligaciones por estar tenido un poco de sexo. — Me quejo.—Adhara, si debemos estar de acuerdo en algo, es que tres horas de sexo y más de tres orgasmos, no cuentan como ‘un poco de sexo’. Así que, no le restes importancia a algo que debería estar en el libro de récords— dice Jareth y yo me siento demasiado avergonzada para seguir con la conversación.—Busca tu ropa. Debemos marcharnos— digo avergonzada mientras busco mi ropa.&m