Al día siguiente
Después de la reunión que los Every tuvieron en el estudio, nadie más vino a hablar conmigo. Solo recibí las comidas y personas que me estaban ayudando a relajar mi cuerpo y distraer mi mente, contándome de las primicias que hay en el mundo del espectáculo.Ello, me relajó un poco, sin embargo, no pude olvidar que si hay algo extraño que está pasando en la familia Every, ¿quizás si les he causado un problema grande en la manada por lo que hice?Termino de peinar mi cabello y me miro en el espejo. Mi rostro ha cambiado, se ve casi igual que siempre, pero, no puedo ver un brillo que me hacía ver bien. Que se mostraba de una manera agradable en mi mirada.—¿Estas bien, cariño? — pregunta la señora Eda en el umbral de la puerta.—Estoy bien——Te estaba llamando desde hace algún tiempo, pero, noCon la calma en mi corazón presente, caminamos por las zonas verdes del lugar en silencio. No sabía si eso era todo lo que no me había dicho que ha pasado esa noche, pero, ya me sentía satisfecha con saber que alguien luchaba porque fuera respetada.‘Pertenezco a algo grande y aunque me meta en problemas, no me amenazan con sacarme de la familia y por ende, de la manada’ me digo mentalmente.—¿Qué vamos a hacer a partir de ahora? — preguntó al desconocer cuál es mi papel en la manada.—¿¡Que debemos hacer para sanar el daño que hemos hecho!? — pregunta en medio del llanto una voz femenina.—No llores, cariño. Todo esto es mi culpa y yo voy a arreglarlo— dice el señor Every.—Madre…— dice Jareth y yo niego cuando quiere acercarse.—Deben hablar a solas. Vayamos para otro lado— digo y Jare
Desayunamos en la terraza mientras hablamos de cosas triviales. Aunque se puede ver el cuerpo relajado de Jareth, esa mirada cargada de culpa no se disipa. Lo cual, me produce curiosidad.—Sí deseas, hoy podemos salir a recorrer todo el lugar. — dice ya red después de tomar un poco de zumo de naranja.—Creo que he tenido suficiente paseo por hoy. Pero, agradezco tu invitación. — Murmuro, mientras comienzo a escuchar el teléfono de Jareth sonando con insistencia.Él mira su teléfono y posteriormente a ello, lo apaga porque éste deja de sonar.—¿No tienes pensado atender la llamada? — Pregunto curiosa mientras mezclo un poco de azúcar en mi café con leche.—Les dije a mis amigos que hoy iba a descansar y por eso no pienso atender ninguna llamada, por muy importante que sea. ——Tienes dos empresas de las que básicamente eres el
Decir que todo está bien durante la reunión, que se siente mucho más de lo que pensaba. La señora Eda me recuerda una y otra vez que con ella puedo contar en todo momento y que si por algo deseo alejarme de Jareth, puedo ir hasta donde ella está. Porque ella me recibirá con los brazos abiertos.La calidez de sus palabras y su abrazo, me reconfortan y me recuerdan que aunque no he tenido el amor por parte de mi familia, ellos, mi familia política me lo estaban brindando ahora.—Espero de corazón que de ahora en adelante todo sea felicidad entre ustedes, mis niños. — dice la señora Eda dándole un beso a su hijo en la mejilla.—No te preocupes, madre, ya he aprendido la lección. — Dice Jareth con seguridad.—Espero que eso sea cierto, hijo. No hay cosa más horrible que darse cuenta de cuán valioso es algo después de que ya uno lo ha
Una semana despuésEstaba aburrida. Nunca había tenido unos días tan aburridos como ahora. Jareth realmente había cumplido con su promesa de no salir a trabajar. Cosa que no entendía porque yo estaba perfectamente bien, pero, él insistía que debía descansar.No se alejaba mucho de mí, siempre que tenía que trabajar, lo hacía en silencio cerca de mí mientras yo trabajaba en lo que me correspondía en la empresa, lo cual, era sospechosamente poco. Por lo que, en menos de dos horas, ya estaba desocupada.—Si sigues dándome tan pocas responsabilidades, voy a morir del aburrimiento— me quejo.—No es mi culpa que las cosas estén tan calmadas— responde Jareth y yo lo observo con ganas de acabar con él.—Estamos en un lanzamiento de una empresa que está desarrollándose, si hay un momento donde todo es
No debo caer en su juego. Es mi esposo, lógicamente me excita con solo verlo, ha sido la mayoría de las veces amable conmigo, pero, no puedo caer en su juego. El que se enamora pierde y yo no puedo perder.Él ha mostrado que puede ser frio con la mujer que incluso va a darle un hijo y básicamente es de su mismo nivel como lobo, como persona adinerada e incluso como educación. Así que, si con ella es así ahora, no quiero imaginarme como seria conmigo cuando el interés se pierda.Mientras me digo mentalmente, porque no debo sucumbir a sus tentaciones, su teléfono comienza a sonar insistentemente y yo dudo si llamar o no para informarle. Después de todo, había dejado en claro que no quería que alguien molestara.Tu teléfono suena insistentemente y yo me preocupo porque sea algo demasiado importante. Después de todo, él tiene dos trabajos que fácilmente no puede
Era evidente que él quería lanzarme a la profundidad de la lujuria, pero, yo debo impedirlo. No puedo ser tan fácil como en el pasado he sido con un hombre que al parecer, tiene varios secretos. Que aunque le pertenecen desde antes de conocernos, es importante que me los cuente antes de que haya otra sorpresa. Una que nos distancie definitivamente.—Aléjese de mí, por favor. — Digo colocando mis manos sobre su pecho para apartarlo tanto como sea posible de mí.—¿Estás segura de que eso es lo que deseas? Porque tu rostro sonrojado y esas hormonas que me están enloqueciendo nuevamente, me dicen lo contrario. — Dice Jareth y yo maldigo para mis adentros al saber que tiene razón.—Hablo en serio sobre alejarse de mí, señor Every— digo firme y él suspira profundo.—¿Qué hice ahora para que me llames así? — se q
Realmente no tengo ni la más remota idea de qué es lo que está sucediendo por la cabeza del hombre que ahora es mi esposa. Pero sí tengo un punto de referencia y es la noche que pasé en el club.No logro recordar todo lo que sucedió, porque casi de inmediato me desmayé, así que, debo buscar a alguien que me pueda decir que es eso, que Jareth no se atreve a informarme. Pero, que sí lo tiene tan ansioso que me cuida demasiado.Por fortuna, pude ganarle a su terquedad y por eso nos encontramos en un auto camino a la empresa. Donde sus amigos ya nos esperan caminando de un lado a otro. Cuando el auto se detiene, ellos son los que me abren la puerta y suspiran aliviados al verde.—Qué bueno que has venido. — Dice uno de sus amigos.—¿Qué fue lo que sucedió? — Pregunto confundida.—Parece que nadie en la empresa sabe hacer lo que tú haces
No podía preguntar directamente si ellos habían abusado de mí, porque, aunque no me sentía invadida o adicta a algo, si me sentía distinta. El brillo que había empezado a tener, ya no se veía y por eso, dudaba y temía.‘¿Ellos lograron abusar de mí?’ me pregunto mentalmente y la sola pregunta causa que me estremezca.—¿Ellos…? — pregunto en un hilo de voz.—No abusaron sexualmente de ti— dice Jareth y yo suspiro aliviada.—Casi me da un infarto——Pero, si te tocaron y rompieron la ropa. incluso uno de esos desgraciados, se atrevió a lamer parte de tu cuello mirándome con burla…— dice Jareth empuñando sus manos con tanta fuerzas que se tornan blanca y de ellas sale un pequeño hilo rojo de sangre.De inmediato, tomo sus manos y él las deja de tensionar tanto, por lo