Estoy aterrada, por unos minutos me quedo congelada mirando a Alex sin saber qué hacer. Por el intercomunicador escucho a los gemelos llorando a todo pulmón como si supieran que algo grave le ha sucedido a su padre.¡Nerea, recomponte! Tienes que hacer algo para ayudarlo. Con todas mis fuerzas comienzo a moverlo hasta lograr subirlo al sofá. Le reviso la cabeza con suma delicadeza para comprobar que no se haya dado un golpe grave. De inmediato, tomo el teléfono y llamo a emergencias. Tienen que venir a atenderlo en cuanto antes. Él estaba perfectamente bien cuando entró por esa puerta, estaba feliz. No tengo idea de qué le pudo haber sucedido para que, de un momento a otro se pusiera tan mal.-¡Alex! –lo llamo dándole unos toquecitos en su rostro a ver si despierta, pero nadaPara mi suerte, los paramédicos llegaron en cuestión de pocos minutos. El alivio recorrió mi cuerpo de forma inmediata. Corro hacia la puerta y la abro dándole paso a los médicos para que comiencen a examina
-Está bien Nerea, déjame hablar –las marcas de las ojeras están demasiado presentes todavía, sigue necesitando descansar-Alex –digo tapando el auricular del teléfono- yo me estoy ocupando de esto, puede ser que no lo recuerdes, pero anoche te pusiste muy mal y los doctores te prohibieron completamente trabajar-No será nada, solo diré lo que tiene que hacer en mi ausenciaLo miro un poco desconfiada, pero, con lo cansado que lo veo, no creo que él tenga muchos deseos de salir hoy de aquí.Comienzo a caminar para alejarme de su conversación y darle más privacidad, pero él me detiene agarrándome el brazo:-Los bebés deben estar despiertos ya, llévalos a mi habitación por favor, en cuestión de minutos estaré ahí con ustedesSolo asiento con mi cabeza, después de esto que acaba de suceder, no quiero arriesgarme a molestarlo más. Este trabajo es importante para mí, no me puedo dar el lujo de perderlo por ser una contestona.Hago tal y como él me indicó. En efecto, los gemelos est
Después de ayer, no estoy teniendo un día muy fácil que digamos con los pequeños. Ellos estuvieron todo el tiempo con Alex y ahora les está costando un poco de trabajo acostumbrarse a que no esté en la casa. Los pobres, deben extrañarlo.Quizás sea bueno para ellos que los lleve a la empresa, así ven a su padre y este tiene unos minutos de descanso de tanto trabajo.Claro Nerea, vamos a hacer como que tú no tienes deseos de verlo también ¡Qué bah! Si a ti te da completamente igual ¡Por Dios! Soy una ridícula. No puedo hacer mejor el papel de tonta, si es que me queda perfecto.No me interesa lo que mi subconsciente piense de mí. Sé que es absurdo de mi parte sentir algo por él o pensar que podríamos llegar a algo más entre nosotros, pero no me importa, voy a ir y lo veré y punto.Justo como lo planifiqué, un rato después estoy cruzando las puertas de entrada de la Corporación Black. Otro guardia me recibe en la entrada y recuerdo mi incidente aquí de hace unos cuantos días atrás. Teng
El corazón me da un vuelco cuando escucho su voz, cuando pronuncia su nombre, suena tan bien saliendo de sus labios. No es lo mismo que otra persona lo diga a que lo diga él, suena como si fuese suyo, aunque, evidentemente, no lo es.-Alex ¿quién es esa chica? La voz de ella tiene en mi todo el efecto contrario que la de Alex. Acaba de preguntarle con desdén, como si fuese un grano de basura dentro de todo un contenedor ¿Qué demonios les sucede a las personas de este edificio?Justo en este momento estoy cayendo, la secretaria de Alex sabía que estaban ellos dos dentro de su oficina. Me dijo que pasara a posta, probablemente para buscarme un fuerte regaño de parte de él. No tiene idea de que ha logrado hacer algo mucho más grave que eso, ha logrado que mi corazón se parta en dos.Debo ser muy estúpida por haber confiado en ella, la sonrisa que me puso tenía que ser advertencia suficiente para mí, pero, más tonta soy al hacerme ilusiones con este hombre que no me debe absolutamen
No sabía que él tenía tan buena opinión de mí, se siente bien, pero, de repente me doy cuenta, eso no es suficiente, eso no hará que me mire como algo más. Es tiempo de que me dé cuenta de que entre nosotros nunca va a suceder nada. Simplemente me considera como una buena persona porque lo soy y porque cuido a sus hijos como si fueran míos, pero nada más.Solo le gusta que sea buena en mi trabajo y que lo haga con tanta dedicación.-Me alegro que te guste la forma en la que realizo mi trabajo –le digo con la cabeza baja, no quiero que vea la decepción en mi rostro-¿Qué dices? No me has entendido para nada, no es que hagas tu trabajo bien, o sea, sí lo haces, pero no es a lo que me refiero. No sabes que me paso todo el día pensando en llegar a casa y encontrarte ahí con los niños. Tú has hecho de mi casa una familiaMe quedo mirándolo fijamente. Estoy escuchando cada palabra que sale de su boca, pero no logro entenderlo. No quiero malinterpretar las cosas y ponernos en una situac
Estoy muy concentrada fregando los platos donde acaban de cenar los gemelos. Los escucho jugando muy divertidos en su lugar de siempre y pensando en todo lo que ha sucedido hoy. Sin dudas ha sido un día bastante complejo, pero me ha encantado.Cuando menos me lo esperaba, dos manos se apoyan en el borde del fregadero. Es Alex y siento su cuerpo pegado contra el mío y su boca junto a mi oído. Su aliento está directamente contra mi nuca haciendo que la piel se me ponga de gallina.-¿Quién era ese chico? Me pregunta y tengo que hacer un esfuerzo sobrehumano para poder analizar lo que me está preguntando y, sobre todo para poder responderle. Mi cerebro solo se concentra en la cercanía que hay entre su cuerpo y el mío, entre su piel y mi piel.-No sé de qué me estás hablando-El chico con el que estabas conversando de forma muy cercana bajo el edificio¿Qué? ¿Cómo ha sabido que estuve hablando con Ulises? ¿Acaso me tiene puestas cámaras en el coche de los niños?-Es Ulises, uno
Voy directamente hacia mi cama y siento cómo mi pecho se va apretando cada vez más. Es una sensación terrible como si algo muy pesado estuviese encima de mí dificultándome respirar. Un nudo se me forma en medio de la garganta y, en menos tiempo del que creo, comienzo a llorar desconsoladamente.Estábamos teniendo una conversación seria. Le estaba mostrando todo lo que sentía mi corazón. Estaba completamente desnuda de alma ante él y no le importó, pero claro, la culpa es totalmente mía por pensar que iba a hacer lo mismo.¿Qué tenía que decir, que también sentía cosas por mí? Que ilusa. Eso nunca va a suceder. Incluso si sintiera algo, no creo que lo dirá nunca ¿Cómo será visto por todos los de la alta sociedad cuando sepan que sale con su niñera? Es algo imposible.De pronto, el tono de mi teléfono me saca de mis pensamientos. Lo reviso y es Ulises.*Hola ¿qué haces?*La verdad, no sé ni qué responderle. Lo que menos quiero es buscarle un problema en la empresa. Si Alex se entera
Él no tiene ni idea de lo que ha hecho al romperme el teléfono, no me interesa nadie más que mi madre.-Yo sé que puedes hacerlo, pero déjame intentar arreglar esto, yo lo causé, así que, yo mismo lo enmendaré-No es necesario, lo único que me hace falta ahora es una forma de comunicarme con mi mamá-Puedes usar mi teléfono-No lo entiendes, no es tan sencillo como eso. El señor que me engendró era un cretino abusador con mi madre, ella huyó de la casa conmigo cuando yo era apenas una bebé. Desde entonces, cada cierto tiempo, ella cambia su número de teléfono para que él no pueda dar con ella y hace poco me escribió para avisarme del nuevo número, estaba muy cansada como para guardarlo en ese momento, los gemelos me agotan mucho, ahora no puedo contactarlaA medida que voy explicándole la situación a Alex, trato de hacer que el teléfono funcione una y otra vez. Lo agito, le doy golpecitos en la parte trasera, aprieto el botón de encendido miles de veces, pero todo es en vano.