NARRADOR OMNISCIENTE.Pasaron los días y Rafael aún no daba con el paradero de Linda, la había buscado por toda la ciudad sin resultado. Se reunió con varios pícaros buscando su ayuda y aunque estos eran salvajes y cada quien luchaba por lo suyo, Rafael consiguió persuadirlos para que lo ayudaran a dar con el paradero de la mujer que él escogió para forjar su linaje. Además, quería dar con el responsable que había ayudado a su mujer, sabía que ese hombre que la ayudó no era humano y se prometió a dar con ambos.En su búsqueda mando a varios pícaros a atacar las manadas de la ciudad, viajó a cada país buscando ese olor que le llenaba el alma, al igual que el olor de aquel hombre.Un hombre tomó el teléfono y dígito algunos números.—Creo que hemos dado con el paradero del hombre y la mujer que buscas —informo un hombre al ver que la llamada había sido aceptada.—¿Dónde? —pregunto el hombre musculoso al otro lado de la línea.—En la manada principal de nueva Zelanda, la manada Cristal
♡♡ Linda ♡♡Toda la semana la pasé ocupada y aprendiendo, además de eso empecé a leer el libro que me dio Jarrell para aprender acerca de los licántropos y era fantástico leer acerca de esos seres, la verdad no sé si existan y no sé si Jarrell lo sea, pero sería fascinante si en verdad lo fuera.Cuando fuimos a su oficina me sentía fuera de lugar, pero con los días y con la ayuda de Jarrell me fui acostumbrando al enorme lugar.No sé si eran cosas mías, pero una vez que fuimos a almorzar esa voz que a veces escucho en mi cabeza me dijo que no mirará para ningún lado, que me centrará en Estrellita y Jarrell y así lo hice, ya que las veces que no lo hago término mal, sentía como si alguien o algo nos observara. No le dije nada a Jarrell porque la verdad no sabía si eran solo cosas mías o no.Dos días después fue lo mismo, sentí la mirada, esa que provocaba una mala sensación en mí, por más que quise mirar quien era no pude, luego de unos minutos no sentí más esa mirada.En la noche Jarr
Jarrell.Me siento confundido, no sé cómo fue que llegué a casa, que pasó después de llegar, cómo fue que amanecí en la cama de Linda y abrazado a ella. Por más que pienso no logro recordar, mi mente está en blanco, tampoco sé cómo fue que termine con una especie de gel verde en mi cuerpo, mis heridas ya no están.Lo que me parece más extraño es que Linda tampoco recuerde nada, tal vez sí se desmayó al ver la sangre.Siento el olor de Waylon y de Leysa.—Jarrell, Jarrell —llama desde la plata baja.—Waylon —Digo levantándome.—¿Te sientes en condiciones de verlo? —pregunta Linda con voz preocupada.—Sí —digo saliendo de la habitación, paso a la mía por una camiseta.Bajo las escaleras la primera que se acerca es Amanda.—¿Estás bien? Casi muero al enterarme que te habían lastimado —me abraza, la aparto de inmediato —¿Qué fue lo que paso? —pregunta Waylon.—Fue un ataque de pícaros —pensándolo bien esos no son pícaros comunes, estos estaban más organizados.—Pícaros, han pasado tres a
❦ ✿ Jarrell ❦ ✿ —La expareja de mi mate es un maldito pícaro, Waylon, ese imbécil que la maltrataba es un pícaro. —¿Sabes lo que significa? —es lo que dice como si lo demás no importara. —No me interesa, ellos no tienen un lazo como nosotros, él la pudo escoger a ella, pero la diosa luna me la destino a mí no a él. —No te alteres hermano, protegeremos a tu mate de quien sea, después de todo es la mate del Beta, pero sobre todo mi hermano. —Es mi pelea Waylon, no la tuya. —Te recuerdo que tu peleaste a mi lado para que yo pudiera estar con Leysa, ahora permíteme ayudarte… ❦ ✿Linda ❦ ✿ Preferí salir para no seguir escuchando a esa mujer, me da coraje escucharla. Miro hacia el bosque, me siento atraída por este, es como si me llamara. Ignoro esa parte y empiezo a jugar con Estrellita. —No haces más que darle problemas a Jarrell —hago una mueca al escuchar su voz. —deberías volver al lugar de donde viniste, Jarrell no necesita una mujer como tú a su lado. —Te molesta
Jarrell.Miro a mi hermano y asiento, aunque sé que esta pelea es mía solamente y no es por el amor de Linda, porque su amor yo me lo puedo ganar, pero estoy seguro de que él hará lo que sea para poder tenerla a su lado, algo que no voy a permitir, primero tendrá que matarme para poderla llevarla consigo.—Debes mantener a Linda vigilada, si ese pícaro la quiere hará lo que sea para tenerla a su lado y si está con Aníbal peor será, ese pícaro es un despiadado es mucho más salvaje que todos los pícaros juntos.—Crees que no lo sé Waylon, pero yo también puedo ser despiadado y mucho más si se trata de mi mate.—Sí, pero sí él está prendado de Linda, no es nada bueno Jarrell, será difícil, y mucho más si Linda tiene sentimientos hacia él.—Lo único que ella tiene hacia él es temor.—¿Y si no es así? —miro hacia otro lado, me duele pensar que ella sienta algo por ese pícaro.No se aun cuantos años tenían ellos juntos, pero no creo que ella se haya enamorado de él.—No sé si ella está enam
✰✰Jarrell ✰✰—Linda espe… —soy callado por los labios de Amanda, la aparto con cuidado para no llamar la atención. —¿Qué carajos te sucede?—Eres mío Jarrell, siempre has sido mío —la tomó del antebrazo.—No soy ni seré tuyo, que está sea la última vez que quieras demostrar lo que no somos.—Lo hago por tu bien —busco con la mirada a Linda, pero no la veo en la mesa donde estábamos.Busco su olor este me guía a la terraza, percibo su olor junto con otro muy particular, no me gusta ese olor en especial, a medida que me acerco su olor se intensifica junto con otros. Darek gruñe al sentirlos.“—¿Qué hacen los pícaros aquí?“—Es un lugar abierto Darek, es obvio que su olor y el de otras especies esten aquí.—Pero precisamente aquí.Me acerco a la terraza, gruño al ver a tantas personas…Linda. —Yo y Jarrell, ¿de qué estás hablando? —Espero por la respuesta, pero no consigo nada. —oye respóndeme me escuchas —toco mi cabeza. —no me dejes hablando sola —digo hablándole a lo que supuestament
Linda.Siento una mano posarse en mi cadera, me tenso al sentir el olor de su colonia, mi corazón late desenfrenado, deposita un beso en mi cuello que me hace estremecer.—Estás tan hermosa —el calor de su aliento en mi cuello hace que mi piel se erice —no sabes cómo te extrañe mi amor —trato de girar hacia él, pero me lo impide pasando su brazo por mi cintura y pegándome a su cuerpo. —hueles tan delicioso como la primera vez que nuestros caminos se cruzaron, ¿lo recuerdas amor? —dice pasando su nariz por mi cuello.—¿Có… cómo? —logro articular ignorando su pregunta.—Eres mía Linda, no puedes estar lejos de mí —acaricia mi antebrazo.—¿Por… por… qué? —mi cuerpo tiembla ante su contacto.—¿Por qué, qué Amor?—¿Por qué estás aquí, cómo me encontraste, Rafael?—Como adoro escuchar mi nombre salir de tus labios —me gira hacia él haciéndome chocar contra su pecho, quedamos frente a frente, se ve tan diferente, tan guapo, es como si haya regresado cinco años atrás y está igual al hombre de
NARRADOR OMNISCIENTE. Rafael, estaba dispuesto a llevar a Linda consigo. No podía creer que esa bella mujer era la mujer que él había elegido para pasar el resto de su vida, estaba tan hermosa se percato de lo tonto que había sido durante todo esos años, por más que pensó una y otra vez llevarla así sea a la fuerza, no podía ya que la pequeña no estaba con ella. Sabía que debía marcharse cuanto antes, pero no sin antes saborear el delicioso néctar de sus labios, esos labios que lo enloquecieron desde la primera vez que los probó. Se marchó al sentir el olor del Beta, sabía que era mejor dejarla por ahora, pero pronto la llevaría con él ese era su pensamiento. Quiso hacer de Linda una mujer fuerte debido a lo que es ahora un "PÍCARO" ellos no son iguales a los lobos que pertenecen a una manada, estar fuera de una manada los convierte en salvajes y su naturaleza cambia, por ello debía y quería hacer de Linda una compañera fuerte y decidida. Se lamentaba no hacer las cosas como lo h