Faltaban 45 minutos para dar las 3 de la madrugada, el tic tac constante de las agujas del reloj era lo único que sonaba, el silencio era sepulcral y daba algo de suspenso al ambiente. ¿La razón? hace aproximadamente 3 horas se había librado una sentencia a muerte, okey estoy exagerando, pero algo así sucedió. Mientras la respiración relajada de mi gemela yacía a mi izquierda, yo no había pegado un solo ojo en toda la noche. ¿Cómo dormir sabiendo que nos buscan para asesinarnos? ¿Cómo dormir sabiendo que en apenas 45 minutos seremos mandadas a una mansión ajena a nuestro hogar? mi intranquilidad es totalmente comprensible, es decir, estamos bajo el ojo de un enemigo de mi padre de hace siglos. ¿Y si nos encuentra? ¿Y si el plan no funciona? ¡Todo puede suceder! No estamos exentas a nada, el más mínimo despabilo o falla y a la mierda todo el plan. ¿En que momento mi vida cambio tan jodidamente? Oh sí, gracias a Archie, aunque estoy agradecida, si no fuese por él, seguiría sumergida en