Savanah.Observé cómo se llevaban atado a Cole y desaparecían por la selva.Decidí tomar el consejo de el lobo y no llamar la atención, aunque dudaba que se olvidaran de mi. Cosa que comprobé en cuanto los lobos se perdieron de vista porque el tipo horrible que me cargó todo el caminó regresó y me dio una sonrisa asquerosa.-Me divertiré contigo mientras regresa el jefe.- Dijo lamiéndose los labios y yo suprimí un escalofrío.Ciertamente, Cole no me ayudaría en esta situación de mierda, así que todo dependía de mi propia astucia. No pude evitar pensar ¿Qué haría Lily en mi lugar?¿Qué haría Lily? ¿Qué haría…?Saldría de esto usando su cuerpo. Una brillante idea cortarme el pelo más temprano, ¿No?Después de una patada mental a mí misma, me concentré en regalarle mi mejor sonrisa al lobo asqueroso.-Bueno, me parece una excelente idea. ¿Quién irá primero?Me miró desconcertado.-Yo, por supuesto.- Dijo frunciendo el ceño y comenzando a agachazarse para tocarme.Me levanté rápidamente a
Savanah.El primer contacto de mi carne con el líquido fue lo peor. Sentí enseguida como esa cosa comenzó a recorrer el mismo camino que la sangre en mis venas. Resistí el impulso de sacarme esa cosa y comencé a sudar profusamente.-Lo sabía; directo en el torrente sanguínea su efectividad es mejor…- Dijo la Humana tomando notas. ¿En qué momento tomó el papel?- Bien, ahora algo de conversación para pasar el rato, tal como lo prometí.Vertió un poco más del líquido espeso se acomodó sentada a mi lado tomando notas.-Mi nombre es Marian y tengo… no sé, quizá unos quinientos o seiscientos años.Quizá no había escuchado bien.-Pero… eres… humana..- Dije con esfuerzo. Ni siquiera los lobos vivíamos tanto; a lo sumo unos ciento cincuenta si nadie nos mataba. Además, Marian no parecía mayor de unos veinticinco años humanos.-Lo sé. Quizá debo empezar diciendo que eso fue parte de un experimento exitoso.- Dijo vertiendo aun más líquido.Frunció el ceño al ver que se le había terminado y se le
Tracey.Mis ojos se abrieron con la mención del plan completo de Lily.-No creo que esto sea un buen plan.- Dije en un susurro porque no quería que el tal Julián escuchara mis dudas al respecto. Había algo en ese lobo que me daba una mala espina terrible.Lily se encontraba actualmente acomodando, o más bien, desgarrando mi ropa para hacerme parecer una loba barata.¿Por qué sus planes conmigo incluían que yo hiciera cosas deliberadamente sexuales? Si hasta hace poco menos de un mes yo era virgen, por el amor de la Madre. ¿Qué sabría yo de seducción?-¿Cuándo vas a aprender que todos mis planes funcionan de maravilla a pesar de lo locos que suenen?. Espero que hayas practicado ese pequeño truco con la lengua después de que salimos de la celda hace un tiempo.¿Cómo olvidar que invertí algunas horas de mi vida dándole un masaje bucal a un plátano en una sucia, oscura y maloliente celda? No es fácil de olvidar tu primer secuestro y posterior loca huida.-No lo he vuelto a usar… hasta hac
Cole.En algún punto del camino mientras Kyrian me actualizaba sobre nuestra situación, sacó sus instrumentos y me liberó de las esposas y cadenas. Era una buena ventaja tener a un lobo espía con trucos de espía en la nómina y como amigo.Cuando escuchamos todo el alboroto que venía en la dirección en la que los estaba guiando, todos nos transformamos en lobos y corrimos a mi señal.Nos detuvimos poco antes de que fuera obvia nuestra llegada y me asomé en mi cuerpo de lobo un poco para poder observar el alboroto.Los lobos habían sacado de algún lugar una liana de entrenamiento y se estaban turnando para arrojar un cuchillo en él. Mis oídos se agudizaron; dudaba que los lobos estuvieran jugando si Peter estuviera cerca así que la pregunta era ¿A dónde se fue ese lobo escurridizo?Seguí observando un poco más en busca de algún herido porque esa es la carta de presentación de mi pareja: La violencia. Al no ver nada, estaba a punto de dar media vuelta e indicarle a Kyrian que lo dejaba p
Kyrian.En cuanto un lobo muerto había dicho “pelirroja” todo mi ser se incendió en alarma, pero cuando dijo algo sobre unos experimentos tuve que controlarme para dejar que terminara de hablar.Entonces vino otro lobo muero y sacó mi lado territorial hablando burdamente sobre mi pareja. No había más opción que matarlo en cuanto me dijera hacia dónde tenía que correr para salvar a mi pareja.Los arbustos arañaban mi piel y me arrancaban algunos trozos de mi pelaje pero no disminuí la velocidad.Había leído sobre los volcanes; no teníamos de esos en nuestro Continente pero sabía que en el Oeste tenían algunos. Sus cuevas estaban llenas de piedras preciosas y, por lo que tenía entendido, así era como financiaban la guerra contra el Este.No tardé mucho en divisar un volcán de tamaño poco impresionante y comencé a olfatear; el olor del azufre invadía mis sentidos pero tenía la vaga esperanza de encontrar el rastro de mi pareja. ¿Por qué no la había vinculado a mí? Esto hubiera sido infin
Lily.-Quizá no fue mi momento más brillante, pero por favor, no me hagas ir al cielo donde no hay pizza.- Dije sollozante.El pájaro solo me miró y parpadeó.-Oh, ¡Vamos! Ya te dije que lo que le pasó a ese árbol de todas formas le iba a pasar con el tiempo. ¿Cómo iba a saber que habían un montón de nidos sobre él?El pájaro siguió juzgándome con la mirada.- Si Bueno, te reto a tratar de barrer las miles de hojas que caían desde ese árbol diario. ¡Tenía nueve años! ¿Sabes lo difícil que es manejar una escoba a esa edad? Incluso el tío Chad se tardaba unas cuántas horas.No sé cuánto tiempo había estado aquí en uno de los Altares a Nuestra Gran Madre. Era confuso porque cada vez que intentaba alejarme por el único camino, regresaba irremediablemente al mismo punto de partida. No importaba hacia qué dirección fuera, siempre regresaba.Suponía que estaba muerta y, ya que solo había visto a otro ser ¿Vivo?, suponía que este pájaro tenía que ser mi guía espiritual o algo.-De acuerdo, ya
Mateo.-¿Qué debemos hacer ahora, príncipe Mateo?- Preguntó uno de los guardias cuando terminaron de hacer lo que mis primos les había pedido hacer.Lo miré desconcertado hasta que recordé que, técnicamente, yo era el lobo de mayor rango después de Kyrian y Cole.Volteé hacia el “taller” y supuse que la madera apilada sobre las paredes exteriores del edificio era para hacer arder y estallar estas cosas. Yo escribí frenéticamente y entregué mi libreta al lobo.-¡Arqueros! Busquen un árbol lo bastante alejado de este lugar en el que puedan disparar a la distancia flechas incendiarias para quemar la leña que el General Cole nos ha ordenado colocar. El resto de los lobos, corran en esa dirección.- Dijo señalando conmigo hacia el norte.- y pónganse a cubierto hasta que pase la explosión.Me dirigí junto con el grupo que no incendiarían sus flechas hacia el Norte. No era un estratega militar, así que solo tomé una dirección cualquiera.Fue bastante grande mi sorpresa cuando encontramos otro
Savanah.Tuve sueños extraños en los que Kyrian aparecía.Algo sobre una humana queriendo destruir a todos y cada uno de los lobos en el mundo y luego al bastardo que me pidió que lo rechazara diciéndome que me salvaría de la muerte.Y por supuesto que debían de ser sueños porque ese lobo se encontraba a dos Continentes de distancia y con un montón de lobas que le calentaban su cama por las noches. Jodido gigoló.Mi cuerpo se sentía tembloroso y exhausto por momentos antes de sentirme bien otra vez. Parecía que agregó a la mezcla algún tipo de narcótico también la Humana porque no podía pensar con claridad.Traté en varias ocasiones de abrir los ojos hasta que por fin mis esfuerzos dieron sus frutos. Me incorporé de la mesa fría en la que me encontraba y miré a mi alrededor buscando a la humana.Casi salto cuando me di cuenta de que a mi lado estaba el lobo de mis pesadillas. Por alguna razón, sus suaves caricias en mi pelo no me dieron indicios de que estaba aquí..-Me gustaba largo.