Mientras que el avión estaba en pleno cielo, Rafael estaba nervioso y contento de volver a encontrarse con su familia porque había sido desde medio año que tomó la decisión de irse con su esposa.

—Sabes que debes dormir porque vamos a tener un viaje de regreso muy largo—era la tercera vez que Ruth le había mencionado lo mismo, pero a este hombre intentaba hacerle caso.

—Si mujer, está bien.

Luego, le paso unas galletas que habían comprado a pesar de que aquí mismo una de la aeromoza joven, sin embargo, igual esperaban llegar en unas horas.

Sin tener ni idea de que el resto de su familia estaba en el hospital, algo que aun Michael ni siquiera les había dicho.

—Me imagino que cuando llegues vas a salir con los chicos o sigues teniendo como preferencia a Saúl como siempre—comento esta mujer cuando se dio cuenta de que Rafael estaba dormido.

No dudo en ningún momento darle un beso pequeño en su frente, mientras que le parecía tierno verlo así acostado.

Ella no dudo en sujetarle la