Clint nos reúne a ambos y los guerreros nos rodean a Cara y a mí. Estoy más que preparado para combatir a mi chica. Aunque sé que esta no será su mejor condición, no me cabe duda de que me hará trabajar para ganar. Y ganaré.

Empezamos, midiéndonos el uno al otro. Lanzando golpes y patadas, probando alcance, velocidad y flexibilidad. Después de unos minutos, empezamos a ir duro. Estamos a unos 20 minutos antes de lanzar mi movimiento característico. Voy a por el uppercut, veo que se anticipa y se agacha, dándome un duro golpe en el pecho. Maldita sea, mi chica sabe dar puñetazos.

"Estás tirando tus golpes, Alfa", dice ella, un poco cansada.

"No quiero lastimar a mi novia, pequeña guardiana", respondo mientras intento barrer sus piernas. Ella salta para evitar el derribo. Me golpea pero no me derriba.

Vamos de un lado a otro y veo que se está cansando. Me ha derribado varias veces y yo también la he derribado varias veces, pero ninguno de los dos ha conseguido la clavada.

El cansanc