El hombre me sonríe desde lo más alto de la columna y todas suspiramos emocionadas como si estuviéramos en un trance. El hombre recibe nuevas indicaciones, mientras el presentador saca un pañuelo y limpia el exceso de sudor de su frente.
—Señora…——¿Cuál es el miedo? Se supone que si está esta actividad en el circo, es porque es seguro— digo cuando veo que esta por suplicarme que detenga a Helmut—Se ha hecho muchas veces y se ha revisado la seguridad del espectáculo, pero, recuerde que el señor es el más alto y musculoso de la isla. Eso interfiere en lo que ya hemos calculado y por eso… tengo miedo— dice el presentador.—Bueno, dudo que alguien lo haga cambiar de opinión——¿Y si sube y le dice que quiere hacerlo usted? — pregunta el hombre sin usar el micrófono, pero, al parecer, Helmut tNo me consideraba una mujer que le gustaba alardear. Eso se lo dejaba a Ariana que lo hacía tantas veces que eran suficientes para toda la familia. Pero, esta vez, quería hacerlo. Quería sonar muy segura y decidida frente a él y todos los presentes.Quería que también se llevaran una imagen de que yo soy muy valiente y que también, iba a ser una chica que podría ser comparada con un alfa, porque era fuerte, decidida y fuerte, solo que de una manera distinta a un gran alfa, pero, eso no lo hacía menos.—Entiendo. Quédate entonces, jamás dejaría que te lastimaran— dice Helmut sonriéndome incluso con la mirada, para después cambiar su forma de verme, por una mirada asesina que le dirige al hombre que esta por lanzar los cuchillos.Creo que si llega a fallar, algo grande va a pasar. De eso estoy segura.—Tranquilízate, por favor. No nos va a pasa
Mi mente se siente aturdida y mi cuerpo pesa por todo lo que el hombre frente a mí me ha dicho. Algo en mi mente me decía que era imposible que ello fuera verdad, pero, mi cuerpo me decía que no debía creer que era mentira.Parecía que mi mente se negara a aceptar algo que mi cuerpo ya sabía. Por lo que, no sabía a quién creerle y eso, me tenía aturdida y también sin fuerzas para hacer algo más que perderme en mis propias sensaciones y pensamientos.—¿Te encuentras bien? — pregunta Helmut y yo con cuidado me siento en uno de los muebles en el lugar.—Yo… solo estoy procesando las cosas que me estás diciendo— murmuro y él suspira profundo.—Me habían recomendado que no te dijera todo esto, porque la mayoría de nuestros recuerdos, no fueron buenos. En el pasado, fui un imbécil que por mis experiencias pasadas, t
Días despuésMe encontraba en la cama, en posición fetal pensando de más en todo lo que no recuerdo, mientras los niños tocan a mi puerta. No sabía que hacer, esa era la realidad y por ello, no era capaz de siquiera avanzar un paso fuera de mi habitación.—Madre, por favor, ábrenos. Queremos saber cómo te encuentras— dice Albert—Estoy bien. solo quiero descansar un poco— murmuro deseando que eso los calme.—No sé qué sucedió realmente. Pero, ustedes están actuando extraño desde la salida al circo— dice Albert y yo suspiro profundo.Esa noche habían pasado muchas cosas. Verlo en peligro, me había hecho comprender que lo quería. Pero, saber esa historia que aparentemente habíamos tenido los dos, me había bloqueado y vaya de qué manera.—Estoy bien, lo digo en serio— murmuro.—No lo estás, madre. El señor Baumann tampoco lo está. Ya no viene a buscarnos para salir juntos y aunque salimos por la insistencia de Ariana, él parece no estar mentalmente con nosotros.
Todos nos concentramos tanto en la salud de Ariana que no sentí alguna incomodidad al estar con Helmut cerca. Ya que, la salud de Ariana era el tema de preocupación de todos. Algo que molestaba a Ariana que se aferraba a mí negándose a ser revisada.—No quiero que me toquen. Estoy bien, no molesten con esto— Dice Ariana molesta.—Cariño, nos preocupamos por ti— dice Helmut.—Estoy bien. No necesitan preocuparse cuando claramente las cosas están bien conmigo— dice Ariana aferrada a mi cuello.—Tiene fiebre. Debemos hacer los estudios pertinentes para descartar o confirmar que algo está mal con la joven señorita— dice uno de los médicos y eso hace que Ariana se aferre más a mí.—No voy a separarme de mi madre. Déjenme en paz, por favor. — Dice Ariana.—Cariño, ¿desde cuándo te has sentid
El tiempo pasa y por insistencia de ambos, termino haciéndome varios exámenes para saber cómo se encuentra mi mente y porque, tengo tantos malestares en mi cabeza. Mientras espero que me den los resultados, camino hacia donde los había dejado, deseando recibir buenas noticias relacionadas a Ariana.—¿Ha pasado algo? — pregunto curiosa al ver que ninguno de los dos habla.—Bueno…— dice Albert,—Solo es una fiebre porque al parecer, sus riñones están mostrando infección. Así que, no es algo demasiado grande su afectación de salud— dice Helmut y Albert no asiente. Es como si estuviera aturdido.—¿Realmente solo está sucediendo eso? — pregunto sintiendo que algo más sucede.—Es solo eso. No debes preocuparte tanto. Ya le han mandado un tratamiento a Ariana por su problema de los riñones, no necesitas preoc
Aunque me mantuve alerta, por lo que me pudiera decir Cleotilde sobre mi vida em el pasado. No hubo necesidad de detenerla de una conversación inquietante, porque ella comenzó a hablarme del presente y cómo había sido su vida.Ya después de haber cenado con los niños y ella, se marchó con su pequeño y yo suspiré profundo agradecida de no haber tenido más noticias impactantes. Después de un día lleno de tensión, camino hacia mi habitación después de haber dejado a los niños en sus respectivas habitaciones.Aunque he deseado hablar con Helmut y aclarar las cosas, no tengo la energía para hacerlo y por ello, abro la puerta de mi habitación. Sin embargo, evadir las cosas no es una solución eterna y de lo que huyo, se me presenta en medio de mi cama con una mirada lastimera.—Helmut…— susurro y él levanta su mirada d
No tenía pruebas respecto a ello, pero, su forma de actuar solo me decía que algo así de malo era lo único que podría desesperarlo así. Por lo que, respiré profundo intentando reunir fuerzas para preguntarle.—No puedo renunciar a ti. No me importa cuánto me digas que me aleje o seamos extraños, no puedo hacerlo— dice Helmut pegando su frente a la mía.Gotas de agua caen sobre mis mejillas y pecho y sé que es porque él está llorando.—No me dejes, por favor. No me hagas despedirme otra vez, porque sé que esta despedida va a matarme de la manera más tortuosa. — Dice Helmut y yo confirmo mis sospechas.—Las cosas no están bien conmigo, ¿no es así? — pregunto y él llora como si de una fuente que sé cómo activar se tratara.Una sola frase, había causado que él ll
Helmut se marcha después de decir que estoy cansada, aunque realmente con la noticia que he recibido tengo todo, menos sueño.Es cuando estoy en la privacidad de mi habitación, que tomo el sobre con las memorias USB y con manos temblorosas, tomo el computador de mi habitación y comienzo a buscar el primer video.Verme en la pantalla sin saber que soy grabada, hace que me sienta como un pequeño ratón siendo vigilada por el gato antes de ser comido y es claro que ya me comió, porque si realmente sus hijos son míos, claramente no los concebí por inseminación artificial o in vitro.Entonces, era evidente que todo ese caos de nuestra noche de bodas, fue solo el inicio de un matrimonio caótico, donde parecíamos todo, menos una pareja de recién casados. Esa era la realidad.Continúo viendo las grabaciones y sonrío al ver la Aitana inocente leyendo novelas mientras hu