A pesar de que estoy en mi antigua cama, no puedo dormir y eso es debido al pensamiento de que ya no estoy aquí como la señorita Creswell, si no, como la esposa de Ryan Volkova y que es mi esposo está en la misma propiedad que yo, a una distancia más lejana de lo que se ve.

Agotada, miro hacia el reloj en la pared y noto que es medianoche, por lo que, me siento en la cama, sabiendo que no hay manera de que pueda dormir. Con mi teléfono, intento colocar música relajante, pero, escucho un chapoteo, por lo que, me levanto y camino hacia el balcón donde observo a alguien en la piscina.

Ryan, sacude su cabeza cuando sale del agua y yo regreso por una sábana porque hace demasiado frio para quedarme en el balcón. Pero, a Ryan no parece importarle, porque está nadando aunque es medianoche y hace mucho frío.

‘Debería regresar e intentar dormir, después de todo, no me importa lo que