En el casino estuvieron hasta poco más de la media noche, Rodrigo decidió regresar al apartamento. Mientras iban de camino Scarlet se sintió como perdida, sabía lo que estaba por suceder entre ellos en cuanto estuvieran a solas. Intentaba no preocuparse tanto por ello, pero era inevitable. Ella en una piscina de pensamientos intentaba convencerse así misma:
"Ana Julia, cálmate, él es como cualquier otro, ya este año has tenido sexo con dos hombres diferentes, qué más da, él es otro hombre. —Ella comenzó a temblar por dentro—. ¿Pero por qué me siento así? tengo miedo, pero todo es igual, haré de cuenta que lo hago por diversión, sí, eso haré, es más, voy a disfrutarlo —Scarlet miró a Rodrigo—. Él es guapo, al menos no es un viejo verde; respiraré profundo y lo haré bien, que quede complacido"
Cuando llegaron al apartamento Rodrigo le ofreció a Scarlet una copa de vino, ella la recibió no por gusto, sino por necesidad, le
Scarlet se quedó parada detrás de la puerta y respiraba con agitación, en ese momento ella no sabía lo que podía suceder o lo que aquellos hombres le fueran a hacer, solo estaba asustada y había actuado instintivamente, no pensó en que tal vez su actuación le acarreara consecuencias negativas.Pasó un rato, había mucho silencio en el apartamento. Scarlet pensaba que tal vez Rodrigo iría en cualquier momento a sacarla por la fuerza de su habitación para que cumpliera su compromiso; pero no fue así.Cuando los nervios se le apaciguaron ella razonó, comprendió lo mal que había hecho, estaba incumpliendo con una de las cláusulas del contrato, ella se quedó sentada al borde de la cama con preocupación, no sabía cómo le haría para reparar lo
Scarlet llegó con Israel a la casa donde hacían una fiesta, era un y ambiente muy animado, se trataba del cumpleaños número 37 de un amigo de Rodrigo. Él buscó la mesa donde se encontraba su esposo y le dijo: —Mi rey, quiero presentarte a la hermosa Scarlet. Scarlet él es Michael mi esposo. —Hola Michael. —Hola Scarlet, Israel me ha hablado mucho de ti. No me dijo mentiras cuando dijo lo hermosa que solías ser. —Gracias. Dijo ella sonriendo. Lo que quedaba de la noche fue de diversión para Scarlet que ahora tenía nuevos amigos en ciudad de México. Durante la fiesta un grupo muy allegado a Israel y su esposo estaban organizando un paseo a la playa al otro día. —¡Scarlet te sumas al paseo a la playa? —Le preguntó Michael. Ella miró a Israel, ya que él conocía más de los movimientos de Rodrigo. Él comprendió su mirada y respondió: —Podemos ir, por Rodrigo no te preocupes. *** Todos los Salvatierra se reuniero
Scarlet estaba en la playa con sus nuevos amigos. Varios de ellos incluyéndola se quedaron dormidos en sus sillas debido al cansancio que tenían de la noche anterior.Rodrigo se fue a la oficina después de la abrupta reunión que tuvo con su familia. Por ser domingo en la empresa sólo estaba el cuidador que le abrió la puerta principal. En ese momento deseaba estar solo para decidir cómo hacer las cosas. Entonces pensó en hablarles a los padres de Ángela que vivían en Miami, se dijo así mismo:"Si ellos aceptan a Scarlet me llevaré a Jr. a Estados Unidos, qué más da, viajaré los viernes por la noche cuando no tenga nada que hacer aquí en la empresa. Jr. permanecerá con sus abuelos maternos y con ella".Después sus pensamientos se concentraron en ella."Quisiera tenerla a mi lado, al menos podría sentir su c
El lunes muy temprano Rodrigo envió al chofer para que llevara a Scarlet al aeropuerto. Cuando el avión aterrizó en Miami la familia de Ángela la estaba esperando. Ella no se lo esperaba, pero la recibieron con todo el cariño del mundo, la pareja de señores tenían una gran sonrisa en sus bocas, también estaba su otro hijo. Regina le dio un beso en la mejilla, Alberto le dio un apretón de manos y le preguntó: —Bienvenida Scarlet, ¿qué tal el vuelo? —Bien gracias. Regina le dijo: —¿Si sabes que en verdad te pareces a nuestra hija? —Sí, Rodrigo me lo dijo. —Gracias por aceptar cuidar de mi nieto. —Me esmeraré en hacerlo bien. Scarlet tenía una sonrisa tímida, ya que no sabía que tanto podían saber ellos de su profesión en Los Ángeles. El hermano de Ángela también le dio la mano, él era un tipo más o menos de la misma edad de Rodrigo. —Bienvenida Scarlet, espero que su estancia con nosotros le sea mu
Cuando se marcharon Jr. y su padre, cada uno de los trabajadores volvieron a su lugar, Raiza y Annie regresaron a sus casas, Braulio se encerró en la biblioteca a leer un libro y Elene se encerró en su habitación.Lucrecia invadida por la tristeza buscó algo que hacer de oficio que le ayudara a sobrellevar la ausencia del pequeño. Las muchachas de la limpieza y la cocinera sabían que estaba sufriendo y se compadecieron. Ella tomó un paño y le pidió a una de ellas que le bajara de la pared las piezas de cobre que adornaban la cocina, "Tienen tanta grasa que ya no se sabe si son de cobre y si son de barro" —Dijo ella justificando su acción repentina—. Toda la casa parecía que estaba en luto, en general comenzó a reinar un profundo y desbastador silencio.Por noche nadie bajó al comedor. Lucrecia como siempre le llevó la
Al otro día Regina los animó a todos para ir a la playa. —Pero mujer hasta hoy apenas es miércoles. —Dijo Alberto. —Por eso precisamente, no habrá casi gente, si pasamos la noche en el apartamento de la playa, en la mañana temprano será solo para nosotros toda la arena y en paisaje. ¿Tú qué opinas Ángela? —¿Yo? —Sí, tú. —Bueno, creo que Regí... mamá tiene razón. Rodrigo agregó. —A mí no me caería mal ir unos días a la playa, necesito desconectarme del trabajo y los negocios. —Entonces supongo que deberé obseder a la mayoría. —Dijo Alberto sonriendo. —Entonces no perdamos más el tiempo y vamos a preparar todo, nos quedaremos hasta el domingo su tú estás de acuerdo Rodrigo. —Por supuesto que lo estoy. En la playa. Regina, Alberto y Jr. se metieron a la playa con Scarlet; Rodrigo se quedó sentado en su silla playera recibiendo sol y de allí los observaba, ellos estaban felic
Rodrigo se fue con ellos a la oficina, allí se calmó. Al mediodía cuando llegó a su casa a almorzar, Braulio estaba furioso y discutieron en la sala. —¿Cómo se te ocurre golpear a Alejandro delante de todos los ejecutivos del ramo inmobiliario? ¿Es que ya no tienes vergüenza? —Él fue el que empezó papá. —Y tú como un gallito fino decidió enfrentarlo delante de todos. —Se burló de la muerte de Ángela, ¿Tú qué habrías hecho en mi lugar? —Mantenerme dentro de mis cabales, cuando se es el representante de una empresa como la nuestra hay que tener nervios de acero y las emociones al margen. Rodrigo puso una expresión de tristeza y agachó la cabeza, Braulio comprendió lo que su hijo sentía en su corazón, entonces se acercó a él y le puso la mano sobre el hombro y le dijo con voz calmada: —Debes ser muy fuerte de ahora en adelante, Alejandro usará toda su artillería para destruirte, intentará desprestigiarte a ti y a todos los Salvati
Cuando llegaron donde estaba el auto Ángela dijo algo sorprendida: —Es igual a mi auto. —¿De verdad? este me lo dio mi padre en mi cumpleaños. —¡Vaya! —Ella estaba anonadada, porque pensaba que era el chofer de la familia de Alejandro. Pero no hizo algún comentario al respecto. Rodrigo se percató de ello. —Alejandro te dijo que enviaría por ti al chofer de su familia? —Si, después me dijo que estaba de reposo, pero luego me dijo que enviaría a otro. —A si claro, es que en realidad no soy su chofer, Alejandro y yo somos amigos. —Ya cobró sentido. —¿Qué? —Tu porte, no pareces chofer, y el auto, sé lo que cuesta, mi padre jamás se lo dejaría al chofer. —Bueno, aclarado el asunto, mejor nos vamos, se ve que nos espera una fuerte lluvia. Por el camino se conocieron un poco más, Ángela ignoraba por completo la sorpresa que le tenía Alejandro. Antes de salir de la ciudad comenzó a llover y hubo