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Salimos del aeropuerto para ir directo al Lamborghini de Lorenzo, él muy amable me ayuda adentrarme a su auto fino y caro, ¿por qué es tan lindo?
No me llaman las cosas caras porque a mí no me ha faltado nada y menos tengo ganas de tener nada de mi madre; estoy furiosa con ella y por lo pronto quiero pensar con la cabeza fría y no con el odio que siento en este momento.
Cualquiera pensaría que soy una chica caprichosa, pero la verdad que mi vida es una cajita controlada por mi madre, no tengo voz ni voto.
—Krystle… —pronuncia mi nombre cuando entra al auto—. Quiero que sepas que no te arrepentirás de haberme llamado.
Ah, eso espero, espero no arrepentirme de haber huido como una cobarde y haber permitido que el odio hacia mi madre me llevara a dejar a Elliott, el hombre que me enseñó como valorarme, como quererme y como ser la mujer que todo hombre puede desear.
—Gracias, Lorenzo y sé que debes querer saber el motivo de mi escape, pero creo que ahora no es el momento y menos el tiempo.
No creo poder estar preparada para hablar de lo que Hunter y mi madre me hicieron.
—Lo sé, pero quiero que sepas, que no te arrepentirás de esta bella ciudad y de una buena compañía —sonríe y yo asiento.
—No creo arrepentirme, aunque esto no es eterno, ya que aún no estoy segura si quedarme para toda la vida.
Tengo que enfrentar a mi madre, tengo que decirle que soy toda una mujer y que tengo sentimientos como los de ella. Puede que ella se comporte así porque mi padre le ha hecho mucho daño, pero eso no tiene justificación.
Ahora que estoy con Lorenzo me pregunto qué es lo que voy a hacer en un país y ciudad de la que no conozco. ¿De qué trabajaré?, ya que no pienso vivir a costillas de Lorenzo y menos aprovecharme de su hospitalidad; dicen que “la flor de lejos huele y que de cerca hiede”.
¿Puedo trabajar?, claro que puedo trabajar y de; empleada doméstica, de camarera o de vendedora, no importa si caigo bajo por lo que tengo un título, pero pienso que todo es trabajo y de ello no hay que denigrar, pero lo único que no buscaré es de cocina, eso no.
¡Quemaría todo! Ah, ya recordé que de cocina no se nada o lo esencial, eso dice mi interior.
Elliott.
(...)
—Elliott… Elliott… ábreme Elliott —dan un par de toques a la puerta—. Maldita sea Elliott, sé que estás ahí, abre la maldita puerta—gritan tras dar un par de puños sobre la puerta.
Le doy el último trago a mi whisky y agarro el móvil, nuevamente le vuelvo a marcar a Krystle y lo único que me sale es buzón y buzón. ¡Mierda!, porque no contesta el maldito teléfono, ¿por qué?
Por m****a no pude encontrarla, por m****a la dejé de ir y por m****a estoy encerrado en la oficina sin querer salir porque sé que haré una sola cosa y es matar a mi hermano y sacar a la estúpida mocosa, esa misma que provocó todo esto.
—Elliott, acabo de hablar con la madre de Krystle y viene para acá —grita Sol.
Rápidamente me levanto arrastro la silla hacia atrás y trato de acelerar mis pasos, pero mis piernas tambalean y no puedo tener un buen equilibrio. Eso es porque llevo más de veinticuatro horas tomando, la ansiedad y la preocupación es inmensa porque tengo miedo que le suceda algo a ella.
Con un poco de dificultad abro la puerta, dejando ver a mi amigo y a su novia. Paso mi mano por mi cabello alborotado, me hago a un lado y dejo pasar a ambos.
—Uuufff… aquí apesta a licor —arruga su cara tras llevar su mano para taparse la nariz.
No estoy, complemente borracho, lo único es que estoy ebrio, hay mucha diferencia en un borracho a un ebrio.
Ah, a la m****a todo el mundo, lo único que me interesa es saber dónde está mi Krystle.
—Que es lo que quieren —gruño.
—La madre de Krystle está en camino y lo único que ella desea es encontrar a su niña y a matar a tu hermano —habla entre dientes.
Muevo mis hombros y le resto importancia con lo que esa mujer quiera hacer con mi hermano, ello se lo buscaron y ahora que se atengan a las consecuencias, mientras que no se meta conmigo, todo estará bien, ya que no tengo que pagar aún más los platos rotos que ambos hacen, suficiente con el odio de Krystle.
—Eso se lo puedes decir a Hunter porque en este momento lo último que quiero es escuchar son los gritos de ella o las súplicas de mi hermano.
—Este no eres tú Elliott —se acerca mi amigo y posa su mano en mi brazo—. Vamos, tienes que darte un baño.
No necesito la lástima de nadie, no quiero a nadie cerca. ¡Es que nadie entiende que solo la quiero a ella!
—Nooo… ¡Te he dicho que no!
—Deja de comportarte como un imbécil Elliott, y mejor regresa hacer el mismo porque así no podremos encontrar a Krystle —grita.
—Ja, ja, ja... Eso díselo a tu novio porque fue él quien se encargó que viajara a un país del que no sabemos.
Edgar no suelta mi brazo y me dice que él puede encontrarla, pero no me ayudará si no vuelvo hacer el mismo de antes, ya que no quiere a un hombre ebrio y un hombre del que no resolverá nada tomando.
Sí, el licor hace que olvide todo el dolor que mi corazón siente, nadie me puede decir que me entiende, ya que eso es una patraña, nadie en este puto mundo entiende lo que siento.
—Lo único que hizo Edgar fue dejarla ir porque ella necesita pensar y no pensara si ustedes están acosándola —no le quito la mirada a mi amigo mientras escucho las palabras de Sol—. Es mi amiga y me duele que me haya dejado, entiende que no eres el único que está preocupado.
—Sol tiene razón y por ello debes acompañarme para que te des un baño de agua fría.
—Él no va a ningún lado porque primero me tiene que decir dónde está mi niña —taran... ran... ra… y ahí está la mujer que todos estábamos esperando.
La mujer esta furiosa y puedo ver como salen de su cabeza sapos y culebra. Ella debe estar preocupada y a la vez con mucho miedo porque Krystle la odiará, ya que ahora pasan mil cosas por su cabeza y puedo asegurar que no muy buenas.
—No lo sé y no creo que ella nos quiera ver, ya que por su culpa ella piensa que todos somos culpable del soborno que usted hace para protegerla —ella comenzó y yo terminare.
—Lo sé, pero eso no justifica que te haya dejado cargo del tesoro que más quiero y tengo, como pudiste permitir que ese mocoso de m****a dijera todo lo que a mí me correspondía decir.
—Todo se salió de las manos, ella no es una niña de la que uno debe controlar y menos ordenarle —miento, Krystle era una buena sumisa, ¡era mi sumisa!
La madre de Krystle tiene que asumir lo que ha hecho, ¡le ha dado una suma alta de dinero a mi hermano con el único propósito de que él se aleje de ella!, pero lo más gracioso es que mi hermano sin pensarlo agarró ese dinero, no la dejó, pero si le hizo mucho daño acostándose con un sinnúmero de mujeres.
Lo malo que hice yo es no decirle a Krystle lo que su madre y mi hermano hicieron, mi justificación es que no es a mí al que le correspondía decir semejante noticia, ahora lo malo que yo agarré barco y ahora ella me odia, me ha dejado, se ha ido.
(...)
Me harté completamente de toda esta m****a y lo último que quiero es discutir y menos en esta circunstancia, estoy ebrio y no es recomendable decirles sus verdades, aunque se los puedo decir bueno y sano.
Intenté irme a mi habitación para recostarme en mi cama y sentir el aroma impregnado que Krystle dejo en ella, pero la señora está insoportable, hasta se posó frente a mí impidiéndome el paso. ¿Qué le puedo decir?
Qué más quisiera haber detenido a Krystle o secuestrarla para impedir todo lo que está sucediendo, pero si lo hubiese hecho todo hubiese sido peor porque ella me hubiese odiado más de lo que me odia, pero eso no lo sé porque no lo intenté. M****a y más m****a me suceden.
¿Por qué mi vida se ha convertido es una vida tan complicada?
Como deseo regresar el tiempo, quiero tener un reloj e impedir que mi hermano se quedara en el mismo lugar en el que mi diosa estaba o me la hubiese llevado lejos de toda esta m****a, es injusto todo lo que está sucediendo.
Kystle no escapo porque le pedí que fuese mi sumisa, ella se fue por lo que su madre y Hunter hicieron.
—No te puedes ir y dejarme con la palabra en la boca, esta conversación aún no ha terminado —su cartera la lanza al suelo—. Entiende que no te dejaré ir sin antes decirme que pasó con mi niña, decirme paso a paso de todo lo que sucedió aquí, ¡lo necesito, entiende que estoy agonizando!Ja, ja, ja… esta señora es única, la verdad que cada palabra me sorprende y su furia me causa risa, ya que se comporta peor que una niña, ¡corrección!, peor que su hija.—¿Mmm?, no sé dónde está Krystle y le recomiendo que la busque porque ella está en un momento del que toca fondo y demasiado fondo.Me duele pensar que ella debe estar sufriendo y pensando en mil cosas, pero tiene que saber que no le podía decir, no era la persona indicada para darle tremenda bomba.—¿Dónde está tu maldit
—Oh, y puedo deducir que eso se debe a mucho trabajo, sé que mi madre es exigente, pero te tienes que dar un par de días para ti y tu familia.Sé perfectamente que uno tiene que trabajar para obtener lo que uno desea, pero no le veo sentido trabajar una eternidad para luego vivir solo como un perro. Todo tiene su tiempo y creo que se puede tener todo en la vida.—Ven, te quiero decir algo —toma mi mano y me guía hacia el sofá invitándome a que me ponga cómoda—. Lo que te quiero pedir es que no te vayas, bueno, hasta que pongas en orden tus pensamientos, lo que quiero darme a entender es que mientras estés en esta ciudad puedes vivir aquí y no acepto dinero.Oh, eso es lo que quería escuchar, pero no creo hacer todo lo que me dice, aunque sus intenciones son buenas, ya que realmente no estoy lista para quedarme en un solo lugar o depender de alguien.—Gracia
***Hace media hora que Lorenzo salió de la habitación pensando que iba a darme un baño, pero la realidad es que no tengo ganas de encerrarme en el baño y menos salir, lo único que deseo es dormir y dormir, así que no perdí tiempo y lo primero que hice desde que entré a la habitación fue acostarme sobre esta suave cama.Al principio tenía ganas de darme un rico baño caliente, pero ahora quiero cerrar mis ojos.Para ser sincera no me ha dado tiempo de admirar a mi alrededor, lo único que quiero es no pensar más en mi madre, en mi amiga, Elliott y menos en aquel hijo de puta que me engañó de la vil manera.Me levanto de la cama al escuchar el motor de un auto arrancar, ¿quién será? Me asomo por la ventana y veo que es Lorenzo alejarse, ¿dónde irá? ¿Espero que no me traicione? Es la única pe
—Y tú también los conocerás —masculla con voz ronca y yo me sobresalto.—Aaahh… Me vas a matar de un susto —me sobresalto y mi corazón se acelera—, no le veo nada malo que digas, “ya llegué”—recalco.—Lo siento, pero no pude evitarlo —sonríe y camina hacia la isla dejando un par de bolsas. —. Pensé que te darías un baño y por eso no te moleste—me voltea a ver—. Ahora puedo ver que ambas se conocieron y que se llevan bien—dice tras tomar un banquillo y se acerca a mí.No es posible, este hombre me matará de un infarto, veo que a Karina le hace gracia todo lo que Lorenzo hace, no es que sea aburrida, pero ahora me siento con mucho bajón emocional.—Claro, olvidaste ese detalle y no es que me queje, ya que es todo lo contrario, espero que no te moleste que tenga una amistad con Ka
Krystle.Dios mío, que es lo que he hecho, porque siento que voy a morir.—Señorita Krystle, tiene que ir al médico —me quejo una y otra vez de la insistencia de Karina.Tengo un par de semana con muchos malestares, pero los he ocultado porque no quiero incomodar y menos molestar a Lorenzo, no quiero que se preocupe aún más cuando me siento incómoda estando en su casa, aunque él me dice que no tengo por qué sentirme mal, ya que puedo estar todo el tiempo que quiera.Llevo un mes aquí, pero no me puedo acostumbrar estar lejos de mi casa y de la madre que me toco, pero nuevamente recuerdo porque estoy aquí y me tranquilizo.Ah… Me levanto, corro al baño y llego justo a tiempo antes de derramar todo el piso de vómito. Ay, como me duele el estómago y no se diga de la garganta, luego de unos minutos consigo levantarme c
—Pasa algo —dan dos golpes a la puerta.¡Sí! Aquí dentro pasan muchas cosas, me acabo de dar cuenta que estoy embarazada, ¡que estoy embarazada! No es una broma y menos una pesadilla, totalmente todo es real, todo lo que me está sucediendo es real.—No, pero prepárate porque me acompañaras al médico —limpio mis lágrimas tras levantarme y voy por otro test.¡Puede que esta prueba esta vencida o mal fabricada! Sí, esa teoría puede ser efectiva, sí, la que está mal es la prueba y no yo, pero luego que me llegue a enterar de que todo es una falsa alarma, juro que demandaré a esa farmacia por vender productos vencidos.¡Pero puedes repetir el test!Nuevamente decido repetir el test al recordar que puedo tener una oportunidad.Llevo a cabo el mismo procedimiento con la prueba anterior.Nooo. Esto es un
—Hablaré con él —susurro al ver que Lorenzo la intimida con la mirada—. No te preocupes y menos pienses que Lorenzo te despedirá—ella me regala una sonrisa tímida para luego dar media vuelta e irse.Karina se aleja y se dirige en la dirección a la farmacia, mientras que yo camino a paso lento en dirección a Lorenzo, espero que no piense que soy una malagradecida y menos que piense que le quiero robar a Karina.Los nervios me matan, es lógico que sienta que estoy a un paso del abismo, siento un nudo en mi garganta, al parecer no me basto llorar en el trascurso de camino para sentir que me desvanezco.—Estaba preocupado por ustedes —suaviza su mirada dejando el enojo y, la preocupación se hace presente.No te imaginas de lo que me acabo de enterar, pero ya verás cuando te enteres, hasta puede que se arrepienta de haberme brindado vivir en esta casa.Es
—Sol —tomo una bocanada de aire—, sabes quién es la persona que te habla y por ello te pido que no digas mi nombre y menos decir que te he llamado—añado, necesito que le quede claro que no quiero que nadie más que ella sepa de mi llamada.Puede que me arrepienta luego, pero ahora más que nada necesito de alguien que me escuche, pero también necesito saber cómo están las cosas.—Sabes que eres el amor de mi vida y que soy capaz de dar todo por ti.Siento como se me estruje el corazón al escuchar como su voz se debilita. Ella debe estar sufriendo, pero no de la manera de la que me encuentro yo.—Lo sé y por eso el motivo de esta llamada —mi voz tiembla—, quiero decirte que eres mi amiga y que creo en ti, pero no me pidas que crea en los demás.Ahora que estoy un poco serena me pongo a pesar de que los únicos culpables de todo e