Ariel la observaba desde su cómoda altura, Jesse sentía un dolor en el cuello por la tensión. Agradecía no completar la oración.Samanta no sabía que decir para romper el silencio incómodo, su hermana parecía no saber que decir.- ¿ Qué te dijo el doctor cariño?- se acercó y se inclinó hacia ella para darle un beso en la mejilla.- Hola Sam, Disculpa por llegar más tarde ¿ aún les puedo ayudar en algo?- - Bien...venido Ariel... no es tarde, no te preocupes por ayudarnos, debes venir cansado del hospital ¿ quieres un café?- trato de salir del momento incómodo de la mejor forma.- ¿ No te causaría problema?- se inclinó hacia Sam avergonzado.- Será un placer, vayan al estudio mientras lo preparo.- les tomó de los brazos y se los llevó hacia el estudio.- Traeré algo para comer, debes venir hambriento.- le cerró un ojo y abandonó el estar.- Muchas gracias.- alcanzó a decir Ariel.Jesse no había dicho nada desde que lo vio llegar, siguió como hipnotizada las indicaciones de su hermana ma
Jesse seguía sin responder a la pregunta, estaba concentrada mirándolo allí haciendo el ridículo por ella. - No te arrodilles... no hagas eso...- se sonrojó de forma inconsciente. - Quiero una respuesta.- le ignoró permaneciendo en esa postura. - Te amo... por supuesto que acepto casarme contigo.- le respondió con una gran sonrisa. Ariel le puso el anillo en el dedo anular, le abrazó y se abalanzo sobre ella. - ¡ Ariel, cuidado, me aplastarás!- se reía. Ariel le llenó de besos en las mejillas, trató de no hacerle daño, la abrazó con cuidado. - Ariel... - murmuró con su rostro pegado al de ella.- ...¿ Qué piensas hacer?- pudo sentir en el pecho de su novio el corazón sobresaltado. - Sé qué no es el lugar... sólo es que... te ves tan linda...- - Mi hermana puede entrar en cualquier momento.- quería besarlo y abrazarlo pero sabía que no debía ceder.- Vamos... debes alejarte...- >- Tienes razón.- se sentó a su lado y se ordenó el cuello del abrigo, Jesse hizo lo mismo. Justo en
Daniel llegó con sus hijos del centro comercial.Los niños corrieron a saludar a su tía mientras que Daniel cargaba con todas las bolsas de las compras.- Parece que te estrujaron los bolsillos estos niños.- se burló Jesse ayudándole con los paquetes. -Papá no tiene mucho tiempo libre para salir con nosotros, así que aprovechamos la instancia.- le explicó alegre Lucas, quien ya medíalo mismo que su tía menor.-Volviste a crecer Lucas.- le felicito su tía.- Por eso necesitaba ropa nueva.- le contestó avergonzado.- Tienes trece años, todavía te queda mucho por crecer.- su sobrino sería tan alto como su padre.- Quiero ser tan alto como el tío Ariel, así podré mantenerme en el equipo de basquétbol.- seguía admirando a su novio Ariel, le pedía siempre que le ayudara a entrenar.- No necesitas ser tan alto si eres un jugador rápido.- sonrío Jesse.- Quiero ser alto y fuerte, por eso como mucho.- recalcó Lucas.-¡!Estás tan lindo niño¡- le pellizco las mejillas Jesse.-¿ Lindo? ¿ Cómo un
La celebración del cumpleaños de Richard comenzó y el jardín se lleno de risas y gritos de niños de su edad.Antes de la fiesta, Jesse le ayudó a su sobrina a escoger uno de los vestidos que le compró su padre en el centro comercia. La niña seleccionó uno color coral, no entendía para que le pedía su opinión si finalmente ella ya tenía uno favorito, pero prefirió seguirle el juego.Se aguantó la risa al verla contemplarse en el espejo y arreglarse el cabello como si fuese una chica adulta.-¿ Podemos bajar Helena?- se puso detrás de ella.-Sí tía, ahora sí podemos ir.--Te ves muy linda sobrina.--Lo sé tía, lo sé.- salió del dormitorio antes que ella y eso le dio espacio a poder reírse de la situación.En el jardín estaban todos los invitados aprovechando el buen tiempo.Las mamás disfrutaban de la comida y bebida que se sirvió en grandes cantidades. Samanta contrató personal para que le ayudara a servir a sus invitados y juegos para los niños.La cama elástica fue la sensación de la
-¿Se casarán? ¿ Cuándo?- trato de disimular su sorpresa. -En dos meses.- le susurró Sam. -Me sorprende que no lo hicieran antes.- hizo una mueca divertido. -¿ Sí?- -¿ Por qué con tan poca preparación?- los matrimonios solían demorarse unos seis meses en los preparativos, no entendía la prisa. -El verdadero motivo, no puedo decírtelo aún.- -¿Necesitas de mi ayuda?- sabía que el apresurado de la ceremonia tenía un significado oculto. -Sólo cuidando de los niños.- le dijo con toda confianza. - ¿ No quieres que te ayude con los preparativos? Puedo usar mis contactos. -Quiero que mi hermana tenga un matrimonio digno de recordar, sólo con los familiares cercanos.- Daniel se quedó callado unos segundos, le picó la conciencia esa frase “matrimonio digno de recordar”. Era tan desafortunada esa fecha, que su esposa jamás le recordaba el día de su boda, pues no pasó más de una fría firma ante un juez, sin fiesta, sin luna de miel, porque él estaba de duelo por la muj
- Yo me hago cargo de Neftis, ve a descansar- le dijo Ariel quitándole el frasco con el alimento de la gata.-Pero yo puedo hacerlo… no me siento cansada.-- Mañana iremos a la clínica Pacífico, no quiero que despiertes de malhumor..le recordó.- Yo no despierto de mal humor.--Estás más somnolienta por el embarazo, así que aprovecha de dormir.- le dio un beso en la frente.-Está bien, te esperaré en la cama.- subió a su dormitorio despacio esperaba que Ariel cambiara de opinión.Ariel alimentó a Neftis, luego la dejó en su cama y apagó las luces. Estaba cansado, el día fue largo, pero estaba contento por la noticia del embarazo de Jesse y que aceptó su propuesta de matrimonio.-Llamó a su hermana Amanda y le contó la respuesta positiva, ella emocionada le pidió ser la madrina de la boda, a lo cual Ariel aceptó.Se dio una ducha rápida y se envolvió en su bata.Cuando llegó al dormitorio, Jesse ya se había quedado dormida, se acostó a su lado y la abrazó para conciliar el sueño.Tempra
Ariel y Jesse llegaron a la clínica Pacífica justo para la hora agendada.Jesse se revisaba en el espejo del auto, le daba vergüenza que el médico descubriera alguna marca de lo que hicieron antes de la consulta médica.Rápidamente le llamaron por el alta voz en la sala de espera.- ¡Señorita Jesse York!- dijeron por el alta voz- Pase al box 6 por favor.Ariel le acompañó en silencio y entró con ella al box de consulta.Dentro sentado tras el escritorio estaba el doctor Renato Madrid, se veía de unos 40 años y con un semblante tranquilo y encantador.- ¡Doctor Summer!- le saludó el ginecólogo reconociéndole de inmediato.- No sabía que venía con su novia.- Dr. Madrid, buen día, el cupo especial que le solicite es para ella.- Jesse todavía procesaba el echo de que le llamaran Doctor, ya que en casa jamás hablaban sobre su título. No pasaba desapercibido.Ariel le estrechó la mano y ambos miraron a la aludida.- Buen día doctor Madrid, soy Jesse York
- Mucho gusto.- le respondió Jesse, llevaba una credencial con su nombre, era una enfermera de la clínica.- ¿Viniste a control ginecológico?- le preguntó- Sí… mi novio me recomendó uno de los médicos de esta clínica.-- Su novio es alguien bien informado.-- Así es.-- Que disfrutes tu jugo, un gusto.- se estaba despidiendo cuando se encontró con Ariel saliendo de uno de los box de atención.- ¿ Doctor Summer?- le reconoció.- ¡ Jefa! ¿ Qué hace aquí?-- Jovencito yo soy mujer, tengo más motivos de venir a este sector que usted.- bromeo.-- Este…- no sabía si hablar del embarazo de Jesse.-- ¡No me llames jefa! Soy enfermera supervisora no tu director médico.- parecía entender lo incómodo de la situación.- ¿ La conoces Ariel?- se acercó Jesse.- ¿ Ustedes andan juntos?-- Sí, ella es mi novia Jesse.- se dispuso al lado de la aludida.- Jessy ella es la mujer que quería