Eagle guardaba las maletas de ellos en el taxi cuando una voz familiar los llamó.
-Scarlet, Scarlet- vieron como el director del centro se acercaba a ellos, principalmente a la mujer y se detenía frente a ella.
-¿Qué ocurre?- ella inclinó la cabeza y el hombre le comentó algo en voz baja para después juntar las manos como pidiendo un favor.
Eagle no pudo oír dado que estaba un poco lejos, pero vio cómo su pareja resoplaba y dejaba caer sus hombros. Se giró y caminó hacia él. Su rostro estaba sombrío.
-¿Ocurre algo?- él rodeó la cintura de ella y besó su sien al notar su estado tenso.
-Vuelve primero Eagle. Yo voy a tener que quedarme por cuestiones de trabajo- ella resopló y se dejó caer contra él- Llamaré a mis padres para que te lleven a Rufus cuando estés en la casa- Yo tengo que atender a unos
Scarlet se sentía terrible. Con cada escalón del avión que bajaba su pecho se apretaba y las lágrimas amenazaban con llenar sus ojos. Ya no sabía qué hacer para no desmoronarse allí mismo. Ser chantajeada de aquella brutal manera era algo que aún no podía entender. Toda su vida se había cuidado para caminar con cuidado para no ser chantajeada de aquella forma, muchas personas querían aprovecharse de ella. Y solo un segundo, solo había sido un segundo en que había bajado la guardia y esto había pasado.-¿Está bien?- escuchó la voz a su lado de alguien hablándole y fue cuando se percató que se había detenido recostándose en una de las columnas a las afueras del aeropuerto- Está pálida, desea que llame a alguien.La mujer que le hablaba mostraba una expresión preocupada.-No, no se preocupe, solo dormí mal y estoy cansada. Tomaré un taxi hasta mi casa, gracias por su preocupación- Scarlet le sonrió como pudo cuando por dentro apenas tenía fuerza para estimular los mús
Eagle había notado que Rufus había estado algo inquieto en su paseo. Después de recogerlo en la casa de sus futuros suegros el perro se había quedado cerca de él todo el tiempo. Quizás porque lo había encontrado amarrado mientras arreglaban el patio en donde había hecho un desastre. Había tenido que escuchar una charla de casi veinte minutos por parte de Ariadna antes de que esposo le hubiera ayudado a escapar.Pero esa tarde Rufus no parecía del todo bien. Estaba diferente así que el paseo no duró mucho. Él tampoco estaba de humor como para relajarse tanto. Estaba tan tenso que dolía y las personas no se atrevían a acercarse a él como lo harían naturalmente y más ahora que su rostro era algo público.La razón era muy sencilla: Scarlet no había respondido ninguna de sus llamadas. Primero dejaba que el timbre sonara hasta que se caía la llamada, pero después simplemente daba apagado. Se preocupó y había llamado al hotel donde le notificaron que todo estaba bien con
¿Qué no tenían nada de qué hablar? Debía estar jugando con él. Ellos si tenían mucho de qué hablar. Así que Eagle insistió.-Esto no puede quedar así Scarlet. Como que no vamos a hablar cuando pretendes romper conmigo por un simple papel y cerrando el contrato que teníamos. EL dinero es lo de menos, no me interesa, quiero saber porque estás haciendo esto- golpeó la puerta con fuerza- No me hagas esto, no nos hagas esto- su voz se fue quebrado hasta que su frente cató sobre la madera- Abre esta puerta y hablemos.-Eagle, yo no quiero seguir con esta relación. No voy a cambiar de opinión- la voz de ella sonó grave y fría a la vez.-No lo creo Scarlet. No estás siendo sincera- Eagle casi gritó- Tú misma aceptaste casarte conmigo. Nos llevábamos bien, nos entendíamos. No puedes haber cambiado tan rápido de la noche a la mañana.A su lado Rufus ladró ante la desesperación que escuchó en su amigo humano y raspó más la puerta. En otro momento lo hubiera regañado más
Una semana, si había pasado toda una semana y Scarlet no sabía cómo lo haría. Sentía que se estaba consumiendo por dentro y tenía que hacer algo. Por más que lo pensaba no podía encontrar alguna forma de deshacerse de Axel sin dañar a Eagle en el proceso. Había visto las noticas de él por las redes y como era aclamado, tanto por su libro como por su físico. Incluso habían hecho una encuesta de que parte era la más linda de élHasta en una entrevista le habían preguntado si todas las experiencias que narraba en su libro las había probado en la vida real. Y de alguna forma él había evitado la respuesta. Aunque eso no había sido lo que le había llamado la atención a Scarlet, sino que él tuviera aun puesto el anillo de compromiso que ella le había comprado. Eso la hizo sentirse aún peor.A esa altura no podía usar su número, Axel se las había ingeniado para bloquearlo y solo tener el de él para comunicarse con ella y de paso un rastreador en caso que hiciera una llamad
La mano de Scarlet se detuvo sobre el cerrojo de la puerta de su casa sin poner la contraseña. Temblaba por dentro, pero mantenía un control fuerte de su cuerpo para no mostrarlo. Entonces una mano se posó sobre la suya y un aliento caliente acarició su oído.-Acaso no piensa abrir. Has estado así por más de un minuto y no tengo intenciones de quedarme perdiendo el tiempo aquí afuera. Tengo cosas más productivas que hacer.Scarlet cerró los ojos y respiró profundo. Debía aguantar. No mostrarse débil. Puso el código lo más rápido que pudo para que Axel no lo viera y la puerta se abrió ante ellos. El primero en pasar fue el hombre detrás de ella y Scarlet solo pudo permitirlo. Axel siempre había difícil de tratar, incluso se preguntaba cómo había terminado siendo pareja de él, aunque en años anteriores no era tanto como ahora. Había cambiado para peor.Se apretó el tabique, debía relajarse o su cabeza explotaría. Tenía demasiadas cosas en ella. Entró cerrando l
Scarlet sabía que ese día tendría que volver y cocinar algo para comer lo suficientemente ligero como para no vomitarlo. Pues no tenía intenciones de comer nada de lo que Axel le invitara. Lo menos que quería en este momento era estar con él y menos en público. Y si de casualidad Eagle los veía a ellos dos. Como lo explicaría. Bueno, no podría explicárselo dado que ellos ya no eran pareja y no hablaban. De recordarlo su noche se hizo más amarga.Como se esperaba de Axel la llevó a un restaurante caro de la ciudad que no estaba lejos de la casa de ella. Se había tenido que cambiar rápido otra vez por un vestido en el cual no se fijó y simplemente lo había tomado del armario. Su cabello simplemente suelto y unos aretes comunes. No se iba a arreglar para él, pero Axel no parecía interesado en su aspecto, mejor para ella.Para su mala suerte, como si su noche no pudiera ser peor Axel había reservado una mesa pegada a la enorme pared de cristal que daba a la calle. Scarlet se
Daniel estaba entregando los últimos pedidos hecho por el ala oeste del restaurante cuando su celular sonó. Se extrañó encontrar el nombre de Eagle en la pantalla de su celular cuando este nunca lo llamaba en su horario laboral. Podían despedirlo por atender en medio de la jornada, por lo que esto lo hizo preocuparse.-Jefe- se giró al chef principal de allí, este lo miró por debajo de la rendija de entrega de platos.-¿Qué ocurre?- a pesar de su porte serio era alguien bastante tranquilo y agradable.-Alguien me está llamando y puede ser algo urgente ¿cree que pueda responder solo unos minutos? -El hombre asintió lentamente.-Tienes 5 minutos y retoma el trabajo, el restaurante está lleno hoy.-Gracias- con eso Daniel se apartó a la zona de los baños y respondió –Eagle, que pasó, no es normal que me llames en este horario--Daniel- la voz de Eagle sonaba nerviosa del otro lado de la línea- Scarlet está en el restaurante ahora con otro homb
Eagle se dejó caer en la cama después de un baño que tenía la intención de ser relajante sino fuera porque en ese momento sus ojos todavía brillaban dado que los síntomas de su enfermedad aun lo atacaban. Y ahora más, después de haber estado tan cerca de Scarlet y no haber podido tocarla.Se llevó la mano al rostro. Dios la extrañaba tanto que se estaba volviendo loca. Ella era la mujer de la que estaba completamente enamorado, con la que se sentía pleno y ella había influido tanto en su vida que la distancia dolía. Sobre todo, cuando él sabía que ella aún seguía amando. Porque no había dudas. Después de ver como ella reacciona y analizado la situación con mente fría gracias a la ayuda de sus dos amigos, Scarlet lo estaba protegiendo.Se mordió los labios con impotencia por no poder hacer algo en ese momento pa