¿Qué les pareció el maratón? 💕
—¿Todos estos años estuviste espiándome en el mundo humano? —susurró Devanie aturdida mientras levantaba se cabeza para mirarlo a los ojos.Estaban acostados sobre la cama y más de la mitad de su cuerpo estaba sobre el de Amarok.Sus ojos verdes se clavaron en su rostro.Él no parecía preocupado de lo que pensara ella.La mano de Devanie se posicionó sobre su pecho desnudo mientras fruncía el ceño recordando cuántas veces se había sentido observada en el pasado.—Yo no. Enviaba a mis hombres. Quería asegurarme de que estuvieras a salvo.Amarok estiró una de sus manos tomando un mechón de su pelo largo y rojizo.Jugó con la hebra de cabello sintiendo la mirada fija de Devanie sobre él.—Tú... ¿Por qué...?—¿Por qué no fui por ti desde el principio?La tensión sexual que había entre los dos estaba electrizante a su alrededor. Incluso cuando ya la había tomado tantas veces él no podía tener suficiente de ella.Aún no podía crees que su compañera lo deseara a él.—Sí, ¿Por qué no lo hicis
Devanie no podía creer lo que escuchaba.La palabra "celo" se repitió en su cabeza como una especie de eco que la puso a temblar.Amarok no se perdió de la reacción perpleja de su compañera.—Seguramente era la primera vez que entrabas en celo, por eso no lo notaste.Ella balbuceó aturdida pero ahora que él lo decía se daba cuenta de que tenía la razón.Por eso se había sentido tan atraída por él al punto de que no habían pasado demasiado tiempo el uno sin el otro. La necesidad por tocarlo o estar cerca de él, todo tenía sentido.En otro momento quizás hubieran podido controlarse pero no durante el calor del celo.El deseo irrefrenable los había golpeado dejándolo con la necesidad de más.Pero ella solo se sentía ahora más atraída por su macho. Más aún cuando la noche anterior había aparecido sobre su cuello la marca de compañeros aunque todavía no se habían acoplado.—No pude controlarme esta vez, belleza. Y ahora estoy seguro de que nunca podré hacerlo cuando se trate de tocarte —añ
—¿Qué estás haciendo, Deva? El Alfa Amarok se puede enfurecer si ve como has cambiado todo en la habitación y además trajiste un espejo aquí —murmuró Kathryn al lado de su sobrina.—A mí me parece maravilloso —murmuró Bethany entrando a la habitación mirando todo.Como todos los días, Amarok salía a entrenar a sus hombres dándoles distintas rutas de vigilancia.Resulta que Amarok había dejado pasar al Bosque oscuro deliberadamente a su padre.Después de que mi padre lo atacara y él volviera del Oeste, Amarok había comenzado a darles a sus hombres rutas de vigilancia.No solo por su padre o cualquier posible ataque de los cuatro reinos que ella sabía no se daría, sino también porque Amarok había terminado de contarle que su cobarde tío después de crear un caos había escapado con los machos que lo habían ayudado.Entonces cuando Kian había aparecido para llevarse a Devanie otra vez junto con Nathan, los había dejado pasar.Le gustara o no Kian era el padre de Devanie y por ella debería
Devanie se despertó con un profundo dolor de cabeza pero al abrir los ojos recordó todo lo que había pasado antes de que se "durmiera". Miró a su alrededor notando que estaba en un lugar oscuro y su corazón comenzó a latir de manera acelerada.—¿Dónde estoy?Caminó por el lugar hasta la puerta pero esta no podía abrirse.—¡Sáquenme de aquí!Comenzó a golpear con fuerza la puerta buscando abollarla y abrirla pero no había conseguido nada.Su furia estaba subiendo de nivel al igual que la ansiedad.Era muy fuerte pero la maldita puerta parecía estar forjada de un material extraño.Finalmente Devanie se apartó de la puerta dando un vistazo por el lugar buscando algo con lo que escaparse, alguna pista.Fue entonces cuando la puerta se abrió mostrando a un macho que ya había visto hace años.Un sudor frío la recorrió y dió un paso atrás completamente tensa mientras el sujeto ladeaba una sonrisa maliciosa y salvaje, sus ojos la recorrieron con lascivia asquerosa.Devanie apretó la mandíbula
Amarok entró a la habitación dándose cuenta lo que Devanie había hecho para él. Su corazón se apretó en un puño sintiendo como la ira se clavaba en su corazón de manera rabiosa y la incertidumbre se hizo mucho peor.—¡¿Dónde está esa hembra?! —rugió haciendo estremecer a más de uno a su alrededor notando las notas mortales en su garganta.—Hijo, la tienen cautiva. Ella le mintió a Devanie y le dijo que estaba esperando un cachorro tuyo. Devanie le creyó y salió corriendo al bosque pero no la alcanzamos. Pareciera que hubiera desaparecido pero esa mujer debe saber algo.—¿Dónde está ella?Enseguida Amarok fue guiado hasta donde estaba su ex amante. Desde que había encontrado a su compañera hacía quince años atrás no había tocado a otra, incluso aunque su impulso no fuera sexual hasta hace unos días. No quería traicionarla y nunca lo haría.Quería matarla por hacerle daño a su mujer y provocar todo ese caos. Él no lastimaba a mujeres pero le faltaba un poco para hacerlo. Estaba perdiend
Cuando se encontraron Kian tomó del cuello abruptamente a Amarok gruñéndole con violencia al tipo.—¡¿Por qué dejaste que esto pasara?!Él ni siquiera se resistió.Se sentía un completo fracaso y se sentía jodidamente mal estando lejos de su hembra.—¡Kian, basta! ¡No hay tiempo para esto, estoy segura de que ya él se siente lo suficientemente mal ahora mismo!Dana lo tomó del brazo y Kian lo soltó abruptamente. —Gala, por favor. Explícanos cómo puedes encontrarla.—Si ese macho está aquí en la manada de Bosque oscuro entonces debe estar usando una cúpula de magia que debemos destruir. Para eso necesitamos la sangre del Alfa del Bosque oscuro.—¿Tardarás mucho en destruirla?—Me llevará tiempo.—En lo que lo haces prepararé a nuestros hombres.Kian le dio una mirada fulminante mientras iba a organizar a los suyos junto a Kieran quien estaba sumamente tenso con la desaparición de su hermana. Dana por su parte se acercó al macho solitario que parecía pensativo.Lo detalló lentamente.
Devanie vomitó lo poco que había ingerido ese día.Había contado que el sol había salido tres veces así que ese era el tercer día en ese infierno.Y se había estado sintiendo tan mal que estaba asustada. No solo el malestar la ponía de nervios, sino la extraña sensación que tenía en su vientre.El cambio era evidente en su cuerpo y el temor de aquella certeza estaba rompiéndole el corazón.—¿Y si estoy embarazada? ¿Puedo saberlo tan pronto?La pregunta que se hizo a sí misma la hizo llorar muy fuerte ocasionando que los sollozos se escucharan por todo el baño.Podía hacerlo porque era una híbrida y los embarazos de ellas eran más breves. En cualquier otro momento se habría sentido feliz. Si estuviera segura de que ese cachorro era de su compañero.Dentro de ella imaginaba que sí, pero ¿Qué pasaría si estaba equivocada? ¿Amarok la querría con el cachorro de otro en su vientre? ¿No la aborrecería?¿Y qué debería hacer con el cachorro?El pensamiento de perderlo solo provocaba el llanto
—Mi amor, tú no causaste nada. No es tu culpa que ese maldito te haya traído aquí.Dana abrazó a Devanie y experimentó un miedo que la sacudió porque jamás había visto a su niña así.Sus manos se dirigieron a su rostro alzándolo para verlo surcado de lágrimas. —Ya estamos aquí, déja de llorar cariño.Su padre la abrazó por atrás pero Deva sollozó más fuerte y Amarok apretó los puños.—¿Podemos ir a casa ahora mismo? —susurró y ellos de inmediato asintieron aferrándose a sus brazos.Amarok respiró profundo siguiendo su paso enseguida justo detrás de ella.Lo irritaba no ser él quien estuviera a su lado pero al ver su expresión y lo rota que parecía solo quería que sus lágrimas desaparecieran y si sus padres lograban quitárselas entonces lo aceptaría.Aunque se moría por ser él quien lo hiciera.*Kian y Dana se habían quedado en el Bosque oscuro sin atreverse a ir debido al estado de Devanie.Ella no dejaba de llorar y cuando la instaban a hablar simplemente no lo hacía.Cada vez sent