Rebecca se quedó observando la puerta por un rato mientras se preguntaba si quizás sus palabras habían molestado a Liam, tal vez había ido más allá de lo que le correspondía, tal vez la explicación que ella acababa de darle Maya le correspondía a Liam y no a ella. A pesar de eso, ella no sentía ningún arrepentimiento, le había dado ánimos a la pequeña y había hablado muy bien de su jefe, no podía estar molesto por algo tan tonto. Un poco más tarde se encontraban de vuelta en el auto en medio de la carretera, habían retomado su rumbo y no se había mencionado ni una sola palabra sobre la pequeña charla sobre los padres que Rebecca y Maya habían tenido.Maya tenía a la pelirroja agotada de tanto buscar canciones acorde al viaje para ella, alrededor de diez canciones después y cero ideas nuevas, Rebecca se gira hacia Liam por primera vez desde que iniciaron el camino y le dijo:ꟷ¿Qué tal tú, Liam? ¿No conoces alguna canción para el camino? ¿O acaso no les enseñaban cosas tan geniales e
La boca de Rebecca se abre de par en par al observar el torso de Liam ¿Cómo es justo ahora que se daba cuenta de lo bien que se veía? Llevaba años trabajando para él y sabía que era un hombre apuesto, pero nunca antes había llamado tanto su atención como ahora.ꟷ¿Martin? ꟷla voz de él la saca desde lo más profundo de sus pensamientos hacia la realidad donde él está esperando por su respuestaꟷ ¿Qué cómo quieres los huevos?ꟷUmmm… revueltos por favor.Liam asiente con su cabeza, levanta una espátula y voltea los huevos haciendo que cada músculo de su espalda se flexione y se mueva. “Sus hombros son tan amplios como el marco de la puerta, me pregunto cómo se sentirán bajo mis manos”ꟷ¿Dormiste bien? ꟷuna vez más, Liam vuelve a interrumpir los pensamientos poco angelicales de ella.ꟷSí, no tan bien como anoche, pero tampoco mal ꟷdice ella sin poder evitar que el tono rosa adorne sus mejillas.ꟷ¿Por qué? ¿La cama no es cómoda? ꟷle pregunta él preocupado.Por un momento parece que Liam está
ꟷ¡Maya, no lo toques! ꟷvuelve a gritar Liam cuando se da cuenta que la niña no le está prestando atención alguna a su advertencia.Intenta salir corriendo tras ella, pero ya es demasiado tarde, Maya lo está tocando. Los ojos de Liam se abren de par en par cuando ve que levanta al cachorro del suelo y lo abraza contra su pecho.ꟷ¡Siempre quise una mascota! ꟷdice la niña emocionada.ꟷParece que le caes muy bien, pero, ¿no deberías preguntarle a tu papá de nuevo? ꟷle advierte Rebecca quien no ha parado de reírse ante la reacción exagerada de Liam.ꟷPapá ¿puedo tenerlo?ꟷMaya, te dije que no deberías tocarlo, no tenemos idea de dónde viene, podría estar lleno de enfermedades. Ponlo de vuelta donde estaba.ꟷLiam, vamos, es solo un cachorrito, quizás se haya perdido de su camada, quizás no encuentre a su madre, o alguien lo dejó abandonado y ha llegado hasta aquí, sería muy cruel dejarlo aquí a su suerte ꟷle dice Rebecca en un intento por convencerlo, pero, antes de que tengan tiempo de nad
Después de darle vueltas en su cabeza a lo que acababa de suceder entre Liam y ella, Rebecca se preparó para irse a la cama. Estuvieron el resto de la tarde jugando juegos de mesa, tuvieron una cena deliciosa hecha por el mismo Liam y acostaron a Maya lista para dormir.Rebecca se sentía como si estuviese formando parte de una familia, algo que le resultaba encantador y la atemorizaba a la misma vez porque, por más que su cabeza insistiera en olvidarlo, Liam es su jefe, el arrogante y engreído que no soportaba.La vista de Rebecca se enfoca en la cama y frunce el ceño al ver unos pantalones grises que se encontraban sobre las sábanas, su viejo pijama. Después de lo que había sucedido entre ella y Liam, no podía volver a usar esa ropa para dormir, sino una de las tantas prendas que él mismo pagó antes de comenzar ese viaje descabellado en el que ahora estaba metida.Rebecca revisó su maleta y se decidió por un juego de encaje negro que dejaba muy poco a la imaginación, pero que le resu
ꟷMaya y su nueva mascota están durmiendo plácidamente, pero quiero quedarme aquí por si despierta asustada por los truenos como alguien que conozco ꟷcontinúa diciendo Liam.ꟷSeñor Stewart, ¿está usted intentando emborracharme? ꟷle pregunta ella divertida, de alguna manera, su jefe está logrando que se olvide de la tormenta que hay fuera.ꟷNo, si eso fuera lo que buscara te llevaría a bailar.ꟷMás te vale ꟷvoltea ella a ver la botellaꟷ ¿es tu marca?ꟷ¿En serio crees que tomaría otra cosa cuando soy el dueño del mejor whisky del mundo? Esta es una mezcla nueva, algo con lo que estoy experimentando ¿Quieres un poco? Me encantaría que lo probaras.La voz profunda y suave de Liam pasa a través de Rebecca como una fina sábana de seda. Suena completamente calmado, como siempre, en total control de la situación y esa calma comienza a incidir en ella.Sin pensarlo dos veces, Rebecca toma la botella y pega sus labios a ella directamente, tomando un largo trago.ꟷVaya, sí que estás nerviosa ꟷle
A la mañana siguiente, el sol ilumina todo el paisaje, es como si el clima hubiese sabido que ese día tenían planeada la excursión y hubiera espantado la tormenta que acechaba la noche anterior.Por fin ha llegado el gran día para Maya, quien insiste en llevar a su nueva mascota.ꟷTiene que ir con nosotros, es importante que socialice con personas que no sean habituales en su entorno ꟷcomienza a argumentar la pequeña.ꟷ¿Socializar, eh? Eso me suena a que has estado investigando en internet sobre los cachorros ꟷle dice Rebecca.ꟷSí, también es importante que esté en contacto con la naturaleza, con el exterior, para que luego no lo estrese los grandes cambios de entorno, eso sin mencionar que no debería estar encerrado todo el día.ꟷBueno, en eso sí que estamos de acuerdo, sobre cuando regresemos a la ciudad ꟷla voz de Liam toma por sorpresa a Rebecca, hasta ese momento no se habían visto después del momento tan íntimo que habían compartido la noche anterior.ꟷDeja de actuar como si no
Liam parece ir a podas esa noche, está decidido según parece y, Rebecca se debate entre seguirle la corriente o parar por completo, pero, esto último no parece ser una verdadera opción. Ella se sonroja cuando comienza a recordar algunos de los juegos más picantes que solía jugar cuando era joven.Si quiere una oportunidad perfecta para tomar ella las riendas, esta es la indicada y Rebecca lo sabe, así que, una vez más se arma de valor y decide ir a por todas.ꟷAhora que mencionas la palabra “cama”, recuerdo un juego… “Los cinco minutos” se llamaba, al menos así le pusimos nosotros. En ese juego, te ibas a una cabaña con otra persona y… pues… pasaban cosas.Las palabras de Rebecca captan de inmediato la atención de Liam haciendo que levante una de sus cejas ante la inminente curiosidad que lo atraviesa.ꟷRebecca Martin, te pregunté por juegos traviesos, no por juegos sucios ꟷla molesta todo divertido, pero ella no se deja amilanar.ꟷHabía otros juegos más atrevidos, solo que no eran pa
Antes de que Rebecca pueda dar una respiración completa, la boca de Liam ya está sobre la suya encendiendo su sangre en llamas. Su olor a menta y a roble, la llena, la absorbe haciéndola sentir todo de forma magnificada, como si él estuviese por todos lados.Liam se presiona contra ella, volteando su espalda contra la pared ahogándola en su sabor mientras ella piensa que él es su nuevo aroma favorito, huele a su deseo más oscuro, a pecado.Las manos de su jefe trazan sus costillas, bordeándolas a un ritmo lento, pero ejerciendo presión, electrificando los nervios de ella y quemando sus sentidos.En todas las imágenes de Liam Edwards, en todos sus sueños más salvajes, Rebecca jamás soñó con algo tan apasionado como lo está siendo la realidad. Él se detiene justo antes de tomar sus senos, levantando la cara para verla a los ojos.ꟷNecesito que sepas que, si esto no es lo que quieres, puedes cambiar de opinión en cualquier momento, solo tienes que decírmelo y me detendré de inmediato ꟷdi