Mientras Williams y Linda se perdían en una nebulosa de placer y lujuria, fuera de la oficina el ambiente era completamente extraño, los gritos de placer de ambos inundaban el exterior y mientras el custodio de Linda optaba por recordar cada una de las reglas aprendidas en su entrenamiento para mantener la calma y la sangre fría, la asistente quedaba sola ya que su nueva amiga salía de aquel lugar sintiendo más que pena, ya que estas personas sentían que eran ellos lo que estaban invadiendo la intimidad de la pareja y no la pareja infringiendo alguna norma laboral al tener sexo en la oficina. — Hey asistente donde--- — la pregunta de Deivid, quien tampoco se había molestado en aprender el nombre de la pelirroja, quedo flotando en el aire cuando escucho los gemidos que provenían de la oficina. — Dios, que envidia ¿porque mi pequeño ángel no me visita en la oficina? — fue todo lo que el castaño dijo para luego salir con rumbo al ascensor y dirigirse a la reunión que tenían pactada con
Williams escucho el grito de su hermosa reina, esa que le había enseñado lo que era estar enamorado y que le ayudo a sanar todo el daño que aquella mala mujer había provocado en él. Vio lo mismo que Linda veía, un pequeño que corría sin estar consciente del peligro y una madre desesperada por alcanzarlo y evitar lo inevitable, o eso creyó, él realmente pensó que su esposa tendría que aprender a vivir sabiendo que los accidentes ocurren, que hay cosas que no se pueden evitar, como lo que sucedería, que para él era… que su esposa arrollaría a ese pequeño que como burlándose de la muerte dejo ver una sonrisa deteniéndose tras los gritos de su madre, pero se detuvo demasiado tarde, a mitad de la carretera. Nada lo hubiera preparado para lo que su esposa hizo, y es que ella realmente era una reina, y el deber de una reina es sacrificarse por el más débil, Will no lo pensó, Williams no lo supo, hasta que de pronto se vio impactando contra una viga de concreto, trato y Dios sabe que es así
Los años habían transcurrido con calma, por lo menos para ellos cuatro, cuando los mellizos tuvieron 2 años tomaron la decisión de mudarse de la mansión Bach, muy al pesar de Sam, pero debían hacerlo, le tomo más de un mes convencer al mayor de que era lo mejor, y es que la fogosidad de la pareja no disminuía con los años, solo iba en aumento, pero lo que llevo a Sam a aceptar que era mejor que la joven pareja viviera sola fue el día que los encontró en la piscina en una pose demasiado comprometedora, Sam estaba seguro que necesitaría terapia para superar aquella imagen, y es que si para un hijo es impactante encontrar a sus padres teniendo relaciones SEXUALES, imaginen lo que fue para Sam ver el trasero de Williams mientras montaba a su hija en medio de del jardín trasero, en su defensa Linda alego que se suponía que él debía estar en su empresa y ya que su madre había llevado a los mellizos de compra creyó que estaban solos, por lo que finalmente Sam acepto que su hija se marche con
Linda Brown es una joven con una mente brillante, y un cuerpo voluptuoso, a sus 24 años se ha sabido ganar la vida en Nueva York, tanto con su inteligencia como con su cuerpo, vive el sueño de toda mujer independiente, tratando de vencer prejuicios, esos mismos que alagan al hombre por ser mujeriego, pero encasillan a la mujer de fácil si tiene una vida sexual muy activa, en su piso del 242 Broome valuado en 2.8 millones de dólares en el corazón de Manhattan, donde vive junto a su mejor amiga René. ¿Qué Como lo consiguió? fácil, fue el juguete de un hombre por un año, al mejor estilo Christian Grey, pero sin el final feliz de la protagonista, ella antes de conseguir ese trabajo y conocer al señor frío, como lo llamaba, había tenido una vida miserable, jamás besada por amor, solo la besaron para burlarse de ella en el colegio, blanco de todas las bromas por su sobre peso, siempre soñando con el amor, y el príncipe azul que el mundo les hace creer a las mujeres que necesitan y que algún
Apenas llegó a su edificio Linda corrió a hablar con René, necesitaba contarle con lujos de detalle lo que había sucedido en su primer día de trabajo. La joven rubia pasaba gran parte del tiempo pintando, sus cuadros, que alguna vez fueron alegres y coloridos, desde que había sobrevivido al infierno de Terry, se habían vuelto tristes y grises, aun así, no perdía las esperanzas de volver a ser lo que era antes, de poder juntar esos pequeños pedazos de su alma y volver a armarse. — Hasta que llegas, dime, me muero de curiosidad, ¿cómo son?, te juro que después que cortaste la llamada, me quedé con los nervios de punta, no puede ser que te quiera despedir, ¿te dio un por qué?— Tranquila René, mi trabajo ya está asegurado, los tengo donde quiero. Que te digo, son dos bombones que no me molestaría comer, lástima que son mis jefes.— ¡¿Y eso que?! ¡Mira lo que son! estas fotos que me enviaste, te juro ¡monje mi braga!, dime si no tienes curiosidad por contar cuantos tatuajes tiene este c
Cuando Linda llegó a su escritorio su mente, que era un poco masoquista, le seguía repitiendo esa escena en la que su mundo había cambiado por completo, una y otra vez, quizás como un recordatorio del póquer jugaba con los hombres, porque esa necesidad de tratarlos como animalitos que cuando crecían demasiado era necesario desecharlos.Por eso no noto cuando Deivid y Williams llegaron y la saludaron, ambos con ganas de ganar su apuesta y enamorarla, pero no obtuvieron respuesta alguna, ella solo estaba sentada mirando fijo un punto, con cara de haber sido testigo de un crimen, y es que así era, ella fue testigo de cómo un hombre con pocas palabras mato sus ilusiones y sueños de amor, dejándola sin nada en su interior, más que con un rencor, que no la dejaba amar.— ¡Señorita Brown!— Señor Williams, Señor Smith.Williams al verla tan perdida creyó que era su oportunidad para abordarla, él era un experto con mujeres navegando a la deriva, se presentaba como su Salvador, un timón al que
En la empresa, Williams realmente parecía un animal, nunca en su vida se había sentido tan desesperado."¿Que mierda pasa? ¿porque estoy así? No importa si Deivid la está fallando, ella no soltará un te amo, así como así, no, ella es una mujer audaz. Además, no se iría a follar con él a la primera ¿verdad?¡Te apretó las bolas y chupo tu dedo como si de tu pene se tratara, sin contar lo que hizo con tu lengua, claro que se podría ir a follar con Deivid!”El subconsciente le gritaba, que Linda hacía lo que quería sin remordimiento alguno."¡Maldición!"Si, Will estaba enloqueciendo, estaba a punto de llamar a Deivid cuando este abrió la puerta.— ¿Qué te sucede? — Deivid se sorprendió del mal aspecto que su amigo reflejaba.— &
Linda entró en aquel lujoso baño, para ver más de lo mismo, ella había recorrido varios hoteles en sus noches de conquista, exigía solo lo mejor, no se conformaba con cuartos de mala muerte, era lo que se merecía, pero ahora le parecía que todos eran más de lo mismo, ¿acaso todos llamaban al mismo diseñador?"¿Porque todos estos lugares son tan parecidos? ¿Acaso el glamur solo se puede mostrar con mármol negro y terminaciones en dorado?"Se quedó parada frente al espejo, se tomó unos minutos para recitar su mantra, repitiéndose que ella podía con cualquiera, ella podía tener al hombre que quisiera rendido a sus pies, y una vez que estuvo segura de que podría conquistar el mundo si se lo proponía, tomó el teléfono y envió un mensaje.Para: Loquita 😜🤪<