Anastasia.
Me despierto y me levanto hago mi rutina de aseo, bajo las escaleras en la mesa para desayunar ya están todos menos Sebastián. Me siento y saludo a todos cordialmente, ya cuando estábamos todos terminado de desayunar entra Sebastián, está muy serio no dice nada y solo se va a su habitación, miro a los hermanos.
-Qué le pasa a su papá.
Se mira entre ellos un poco extraño.
-Está enfermo.
-No está enfermo solo son cosas de ancianos.
Alzó mis hombros restándole importancia, el resto del día transcurre normalmente, miro a Sebastián pero no me dirige la palabra, bueno tampoco rogaré por su atención, después de la cena Nicolás se acerca y me abraza por los hombros.
-Anastasia qué tal si miramos una película todos juntos.
-Está bien cuál vamos a ver.
-No sé linda tu di cuál te gusta.
Pienso por un momento cuál película seria excelente para ver.
-Huy que tal una de terror.
-Claro porque no.
-Haremos las
Anastasia.Escucho como alguien toca mi puerta y no es un toquido live sino uno bastante fuerte, así que me levanto y voy a abrir la puerta para mí sorpresa es Sebastián está recargado en el marco de la puerta está mirando al suelo, creo que está enfermo.-Sebastián te encuentras bien.Al decir esas palabras also el rostro y me sonríe, yo hago lo mismo, creo que ya no está enojado conmigo, me tomo desprevenida y me jala del brazo me casa de habitación y me abraza por la sintura, empieza a decir muchas incoherencias, no le entiendo está hablando en ruso está hablando corrido, está ebrio huele a vodka, es cuando me doy cuenta pobre hombre.-Sebastián tranquilo.Empieza hacer mucho ruido y miro cómo de las demás habitaciones empiezan a salir los demás los miro pidiendo ayuda.-Está pegado a mi cintura no me quiere soltar
Sebastián.Me despierto con una horrible resaca, me siento en la cama, la boca me sabe a mierda, perdí de nuevo el control.-Buenos días padre.La voz de Iván, ya se lo que se viene, lo miro no se mira nada contento.-Buenos días Iván.-Veo que te divertiste anoche padre, creí que tenías eso bajo control.No estoy de humor para contestarle, me da vergüenza admitir esto.-Hace atea y baja que tienes que disculparte con Anastasia.Lo que acaba de decir me preocupa, que habré hecho lo miro salír de la habitación, no me dice nada más, pasó una mano por mi cabello, qué estupidez ise ahora, le habre faltado de nuevo al respecto, fui grosero con ella, doy un gran suspiro, me levanto de la cama y me dirijo a mi baño, ya bañado me miro en el espejo tengo ojeras y una barba un poco larga, me quitó la camisa para no mancharlo de crema para afeitar.Cuando acabo me miro al espejo quedé otravés decente, no puedo dejar de pensar en lo que me d
Sebastián.Me enfurece que Anastasia se dirija así a mi persona no lo tolero, esploto y me desquitó con ella, proceso todo lo que dije y miro en sus ojos puro odio así a mi. Me retiro y me voy al jardín a fumar un puro.Paso el resto de la mañana centado afuera no quiero hablar con nadien, no quiero escuchar más sermones. A la hora de comer todo está silencioso, ni Nicolás dice una palabra, Anastasia no me mira para nada, ya se le pasara. Los días transcurren y mis hijos ya se tienen que ir. Vamos en camionetas separadas, ellos van guntos, Sebastián y Anastasia van conmigo ella mira por la ventana, estoy tan cerca de ella y aun así no me mira, no me gusta que me ignore.En el aeropuerto todos nos despedimos, Nicolás le da un fuerte abrazo a Anastasia, ella se lo coresponde con una sonrisa.-Recuerda lo que te dije Nicolás.El la suelta enseguida.
Anastasia.Los días han pasado y yo sigo sin hablarle a Sebastián, no voy a dar mi brazo a torcer yo no hice nada malo solo estaba dando mi opinión, no tengo la culpa de que él sea un analcolico, aunque en verdad extraño esa sensación de tenerlo cerca poder hablar con él y quisiera volver a tocar esos labios.Anastasia qué estás pensando sacas esos pensamientos de tu mente, estoy trabajando en mi oficina ya que es sábado y hoy solo trabajo hasta medio día, mi laptop empieza a sonar es una videollamada, es Julio.-Hola cómo te va Julio.-Me va muy bien borreguita y a ti.-Pues estoy bien recuerdas el pequeño problema que te conté la otra vez.-El anciano.-Si el anciano.-Ya isieron las paces o siguen en guerra.-Yo no tuve la culpa.-Siempre tienés que tener la razón verdad Anastasia.-No pero es que yo no hice nada malo yo solo quería ayudar y el se comportó muy grosero conmigo en verdad me lastimó en serio pensé que
Sebastián.Anastasia sigue sin hablarme bien solo me da respuesta frías y secas o aveces ni me contesta, estos días se me han hecho duros ya me avía acostumbrado a sus pláticas, a sus risas, a su tacto. Iván tiene razón me gusta Anastasia, no lo quería asectar pero es la realidad, no sé cuántas veces e soñado con ella en tenerla entre mis brazos, son puras fantasías mías.Iván entra a la biblioteca y me saca de mis pensamientos, está vestido de forma informal.-Padre voy a salir, regresare en 4 días.-Que tengas un buen viaje y cuídate.-Padre por favor en estos días intenta disculparte con Anastasia, se que sientes halgo por ella y las mujeres de hoy en día tienen más orgullo y no necesitan de los hombres.-Lo se Anastasia me lo ademostrado más de una ves.-Solo inténtalo si.
Sebastián.Escucho cómo suena la puerta de la casa, me levanto del sillón y salgo de la biblioteca, devo de alcansarla e intentar hablar con ella, pero fue demasiado tarde, escucho la puerta de su habitación, doi un suspiro y me recargo en el marco de la puerta del pasillo.Miro como Natacha sale del comedor.-Señor la cena está lista.-Yo le avisaré a Anastasia.Ella asiente con la cabeza y se retira de nuevo al comedor, al estar solo doy un suspiro y pasó mi mano por el cabello, después de estar un rato recargado ahí me levanto y me dirijo a las escaleras, subí y me detengo en su puerta estaba apunto de tocar pero escuché que esta hablaba con alguien por el teléfono.Está llorando, soy un imbécil por mi culpa esta llorando, erí a la mujer que quiero, doy un largo suspiro y recargo mi espalda en su puerta, me duele tanto oírla llorar, cómo pude ser tan imbécil, ella solo estaba dando su opinión, decido darle espacio y me retiro, llegó al co
Sebastián.Escucho como suena la puerta de la casa, esta vez estoy decidido a hablar con ella, no pienso dejar pasar un minuto más, no soporto otro día asi esto es demasiado incómodo, me levanto y me dirijo a su habitación pero la puerta está medio abierta así que decido entrar.No se mira nadie en el cuarto pero se oye la regadera ha de estar bañándose así que decido sentarme en su cama a esperar, miro mis pantuflas y recuerdo cuando la miré por primera vez se miraba delicada, parecía tan frágil, reservada, educada pero poco a poco fue confiando en mí y pude en verdad conocer quién es Anastasia es fuerte, no se deja dominar, ni se deja intimidar por nadie no permite que le digan qué es lo que puede y no puede hacer, no deja que las demás personas le den delimitaciones.Una voz me sacó de mis pensamientos.-Está c&oacu
Anastasia.Me dirijo a mi clóset y sigo pensando lo que hice, no puedo creer que lo halla besado pero esa sensación de tenerlo cerca de nuevo hizo que algo despertara en mi, doy un suspiro, Anastasia ya tranquilízate, vístete y ve a dejarle su chaqueta, te disculpas y se acabo, me puse una pijama, tomé suficiente aire y salí.Me dirijo a su habitación toque pero la puerta se abrió decido pasar. No se mira en la habitación a la mejor está en la biblioteca, escucho la regadera iba a dejar su chaqueta en la silla que está a un lado del baño, escucho sonidos que vienen del baño, abro mis ojos como platos y siento mis mejillas arder, acaso él está, los pequeños suspiros y gemidos, tapó mi boca esto es demasiado vergonzoso, debo de salir de aquí pero no me puedo mover lo escucho decir mi nombre, se me cae la chaqueta, retrocedo y salgo de ahí.Se estaba masturbando diciendo mi nombre, no Anastasias ya no pienses nada solo recuéstate en tu cama he intenta dormir, me tapo