Sebastián.
Escucho como suena la puerta de la casa, esta vez estoy decidido a hablar con ella, no pienso dejar pasar un minuto más, no soporto otro día asi esto es demasiado incómodo, me levanto y me dirijo a su habitación pero la puerta está medio abierta así que decido entrar.
No se mira nadie en el cuarto pero se oye la regadera ha de estar bañándose así que decido sentarme en su cama a esperar, miro mis pantuflas y recuerdo cuando la miré por primera vez se miraba delicada, parecía tan frágil, reservada, educada pero poco a poco fue confiando en mí y pude en verdad conocer quién es Anastasia es fuerte, no se deja dominar, ni se deja intimidar por nadie no permite que le digan qué es lo que puede y no puede hacer, no deja que las demás personas le den delimitaciones.
Una voz me sacó de mis pensamientos.
-Está c&oacu
Anastasia.Me dirijo a mi clóset y sigo pensando lo que hice, no puedo creer que lo halla besado pero esa sensación de tenerlo cerca de nuevo hizo que algo despertara en mi, doy un suspiro, Anastasia ya tranquilízate, vístete y ve a dejarle su chaqueta, te disculpas y se acabo, me puse una pijama, tomé suficiente aire y salí.Me dirijo a su habitación toque pero la puerta se abrió decido pasar. No se mira en la habitación a la mejor está en la biblioteca, escucho la regadera iba a dejar su chaqueta en la silla que está a un lado del baño, escucho sonidos que vienen del baño, abro mis ojos como platos y siento mis mejillas arder, acaso él está, los pequeños suspiros y gemidos, tapó mi boca esto es demasiado vergonzoso, debo de salir de aquí pero no me puedo mover lo escucho decir mi nombre, se me cae la chaqueta, retrocedo y salgo de ahí.Se estaba masturbando diciendo mi nombre, no Anastasias ya no pienses nada solo recuéstate en tu cama he intenta dormir, me tapo
Anastasia.Estoy tan agusto recostada en la cama no tengo ganas de levantarme a trabajar, miro el reloj ya son las 8:30, media hora de retraso y ni siquiera me ha pensado por la cabeza levantarme, doy un suspiro de todos modos Ivan, cierro de nuevo mis ojos literalmente me desparramó en la cama , estoy recostada boca abajo y dejo uno de mis brazos colgando, no tardo en quedar dormida en el sueño siento que mi mano está mojada y es cuando abro los ojos, volteo a la dirección de mi brazo, no hay nadie me fijo en el suelo.Miro la cosita más hermosa que e visto en mi existencia, es un perrito blanco y peludo.-Qué hermosa cosita eres.Me siento en la cama y me agacho para tomarlo están esponjosito trae un moño con una nota. "Espero que me disculpes te traje un pequeño compañero" hay viejito.-Eres tan hermoso verdad que eres una cosita hermosa verdad que sí.Le froto su pequeña naricita con la mía, ladra y me mueve la colita, me levanto de la cama sa
Anastasia.Me levanté de muy buen humor y bajé corriendo las escaleras quería ver a embajador, había pasado la noche en mi oficina, no quería que Natacha tuviera que limpiar los accidentes de mi cachorro, al llegar por mi suerte todavía no ha hecho nada, lo tomé y salí corriendo al jardín en cuanto lo baje camino unos cuántos pasitos he hizo del baño, hice una cara de asco y llegó el jardinero.-Yo la limpiare después no se preocupe.-Gracias.Entramos los dos juntos Natacha estaba en la cocina me miró con una sonrisa.-Buenos días Natacha te ayudo con el desayuno.Ella asintió con la cabeza y me señaló la cafetera, creo que no confía en mí para que haga el desayuno.-Está bien.La verdad nunca he sido muy fan de la cocina, pongo la cafetera y busco las galletas, embajador me ladra, busco su plato y le doy croquetas se las come enseguida, creo que le gustaron.Escucho la leve música que tiene Natalia y empiezo a bailar y a
Anastasia.Sebastián cada ves me tiene más confianza, este hombre me gusta pero me da miedo que me vuelvas a lastimar he tenido muy malas experiencias. Estoy con el en la biblioteca y tengo las piernas en su regalo creo que buen momento para saber más de el ya que solo los archivos no dice sus personales.-¿Dime Sebastián cuéntame algo de ti?El me mira y sierra su libro para ponerme más atención.-¿Cómo que quieres saber?-No lo sé dime algo de tu pasado, claro si no te molesta.-Claro que no me molesta, como ya debes de saber trabaje en el ejército solo los dos últimos años de la guerra, cuando acabo todo me case con mi novia una enfermera que conocí, todo fue bien hasta el nacimiento de Nicolás, ella empeso a actuar raro salía por las noches y me ocultaba cosas, tenía sospechas de que me era infiel.Se detuvo, creo que le duele hablar del tema colocó mi mano en su hombro para que sepa que estoy para el, me dio una sonrisa triste que yo de
Sebastián.Me entristece tanto ver a Anastasia asi no me gusta verla sufrir, así que la abrazo y le intento confortar. Estoy compartiendo un hermoso momento con ella pero su celular sonó, se levantó tan rápido que se callo.Esta teniendo una combersacion interesante con alguien supongo que es con Iván ya que es el celular que el le dio. La invitó a salir pero que traído es mi hijo trendre que hablar de hombre a hombre con el. Ella cuelga y me sonríe.-Bueno Sebastián tengo que salir de compras para mañana.Me levanto y camino a la puerta.-Te acompaño si no te molesta.-Para nada me gusta tu compañía.Al escuchar esas palabras siento mis mejillas arder un poco por la vergüenza, miro asía otro lado para que no me vea, le ofresco mi brazo para acompañarla a la puerta, ella lo toma y me aserca a su cuerpo, siento mi corazón latir más fuerte y el sonrojo en mi cara se asé más notorio, ella se da cuenta y con su mano libre frota mi brazo.
Sebastián.Al entrar en la tienda nos atiende una dependiente una señora, alto y ya mayor. Me indica qué puedo esperar en una pequeña sala he insinua que soy el esposo de Anastasia. Eso quisiera. Anastasia se ríe y juegan poco con lo que dijo la señora, yo le sigo el juego. Estoy tomando un té que me sirvieron cuando escucho a Anastasia.-Cómo me veo.La miro de pies a cabeza, se ve realmente bella la dependiente de la tienda se acerca y discuten de que le hacer falta algo ellas sujieren zapatillas y unas medias, Anastasia tienen el atrevimiento decir que mejor un liguero y lencería que le vaya a juego. Empiezo a imaginarme cómo se vería ella solo utilizando la lencería, mi puso se acelera y empiezo a fantasíar, cuando siento que alguien me toca ir, es Anastasia con sus dedos recurre mi cuello, mi barbilla y me hace verla a los ojos.Me pide que la acompañe al vestidor y que le quite la ropa, no sé dónde quedo mi educación yo solo me levanto y la sigo, pero e
Anastasia.Hoy por fin voy a salir con Iván, voy a ir a un evento espero no arruinalo, que todo salga bien y no dejarlo en vergüenza él y a mí, ya tengo el vestido y las zapaterías puestas, estoy terminando de arreglar mi cabello lopeino acia un lado y le doy forma me miro al espejo y conforme con el resultado doy un suspiro.-Tranquila Anastasia ya has sido a eventos como estos claro con un imbécil, todo saldrá bien y nada malo sucederá.Después de esas palabras de aliento me dirijo a la sala dónde ya está el señor Ivan esperando él está sentado en el sofá, trae un esmoquin y está viendo algo en su celular.-Estoy lista señor Iván disculpe por la tardanza.Me voltea a ver, miro como Sebastián se levanta del sofá y se dirige a mí, me mira de pies a cabeza, me toma de ella mano y sonríe.-Te ves realmente hermosa Anastasia.-Gracias Sebastián.Siento como mis mejillas arder, Iván se rie un poco y se levanta del sofá.-Padre ya dej
Anastasia.Me acerco al señor a Iván y le susurro.-Señor Iván necesito que usted y otros dos hombres muevan esa mesa que está ahí yo les daré la señal.Me doy la vuelta para alejarme de él, pero me toman de mi mano y me jalan.-Anastasia que vas a hacer.Voltéo y le sonrío.-Intentaré sacarlos de aquí señor confie en mí.Me dirijo a uno de los hombres, recuerdo todo mi entrenamiento, todo lo que pase para llegar aquí, no dejaré que estos hombres acaben con la vida de ninguna de estas personas inocentes, intento verme lo más inofensiva que puedo.-Disculpe señor necesito ir al baño.El hombre me mira y se me acerca, me mira de pies a cabeza, me recorre el cuerpo con la mirada, qué asco me da.-Lo siento señorita nadie puede salir de esta habitación entiende.Me acerco un poco más y le toco el pecho.-Por favor me daría pena tener un accidente aquí adentro hay muchos hombres y me están observando, además us