—Bueno, para nadie es un secreto que me he esforzado mucho para alcanzar mis objetivos y llevar mis negocios más allá, incluso he probado hacer cosas diferentes, y ha ido excelente. Es cierto que hay otras cosas más importantes que el trabajo y quiero darle la primicia al finalizar la entrevista, por eso voy a darle respuesta a tu pregunta al final, ¿está bien? En ese momento la cámara enfocó a la periodista, quién no quitó la expresión de asombro en el rostro y luego dibujó una sonrisa bastante interesada, sabía muy bien que era su entrevista, nada pudo salir mejor. Eso también lo suponía Victoria, quién ya se hacía a una película. —Por supuesto, sigamos con la siguiente, ¿es cierto que se habla sobre un posible enlace con una reconocida compañía alemana? —Vale, no es así exactamente estoy hablando con un empresario de Alemania quién es un tipo bastante serio en lo que hace y me ha parecido idóneo para hacer negocios con ella, pero de ninguna manera mi empresa estaría enlazada a o
Llegó a la oficina como de costumbre dando órdenes por doquier y los empleados acataron despavoridos y poniéndose manos a la obra con mucha premura. Ese día había mucho trabajo que hacer en la oficina, por lo que sería un día muy largo y también ajetreado para todos por igual. Rashid entró a su oficina enfadado al ver el problema que había surgido en el nuevo proyecto de Roma, sabía que se estaba jugando una gran cantidad de dinero, no podía simplemente suspenderlo por algún otro inconveniente que apareciera en su vida, como continuar en la marcha y solucionar el problema que había aparecido. Para ello se puso en contacto con su abogado qué le prometió estar en la oficina en cuanto terminara un caso. —Salvatore, este es un asunto muy importante necesito que estés aquí lo antes posible. —El caso que estoy atendiendo también es relevante, pero iré allá dentro de unos minutos. Colgó la llamada, se dirigió a su silla giratoria y se tumbó allí frustrado e impaciente por no ver la hora
Victoria recibió la visita sorpresa de Amina, ese mediodía. Justo antes de que la muchacha llegara a tocar la puerta ella se encontraba en la cocina preparando el almuerzo, celebró mucho de verla y no pudo contener esa emoción, se aventó a ella abrazándola con cariño. —Pero mira nada más, gracias por venir, es una grata sorpresa Amina. Pasa, por favor —declaró, haciéndose a un lado. A lo que ella pasó de inmediato y dejó las cosas que había traído sobre el mesón. —Creí que era una buena idea preparar una pizza, pero no sabía que ya habías hecho el almuerzo.—Así es, es que no sabía que vendrías. Pero te agradezco mucho que te hayas tomado el tiempo y también la amabilidad de querer hacer algo conmigo. —Sí, hoy tuve el día libre de la universidad y como ya había terminado los pendientes que tenía, entonces aproveché de venir y así pasar un día contigo; además me comentó mi novio que Rashid había estado bastante ajetreado con muchísimo trabajo y probablemente tú estaría sola aquí. E
—Vale, pero no creo que sea una buena idea lo que estés planteando, si algo va a surgir que sea de la forma natural, y si ambos no estamos destinados a estar juntos, lo acepto. Pero de ninguna manera voy a forzar las cosas. Es algo que yo nunca haría, Amina. —No lo veas así, no estarías forzando nada, solamente tomando una decisión qué puede beneficiarte, estarías haciendole un gran favor a todos, quizás la solución para que mi amigo Rashid deje de ser tan cretino y odioso al encontrar el amor. —Lamento no ser esa solución. —Está bien, no sigamos hablando del tema quizás ha sido algo ridículo de mi parte. Mejor cuéntame cómo fue tu mañana y yo también te hablaré de la mía. La muchacha suspiró, definitivamente era lo mejor dejar ese tema atrás y no darle más vueltas. No llegarían a ningún lado continuando con la misma charla. —No he hecho nada interesante, háblame del tuyo. La joven puso una sonrisita. —Estaba esta mañana en centro comercial y hay descuentos en una de las tiend
—Pero ahora lo sabes y podrías pensar más allá de lo que alguna vez habrías imaginado, tomando en cuenta que eres excelente cocinando tienes habilidades para esto. El talento qué se necesita para hacer un curso o llevarlo a lo profesional y adquirir más conocimiento es una magnífica idea. —Es muy alentador lo que dices pero en estas condiciones no es muy real. —Lo sé, estoy al tanto de que las circunstancias cambian de un momento a otro sin embargo llegará un momento en el que podrás tomar las riendas de tu vida y hacer algo que te llene y te haga sentir realizada como persona. Yo presiento mucho éxito en tu futuro. —No quiero arruinar tus palabras pero a veces hay mucho positivismo en ti y no lo creo así. —Está bien, tú piensas las cosas de una forma, yo de otra, pero de lo que estoy segura es que siempre debemos pensar en positivo y arraigarse justo a eso, a un cambio bueno. No volvió a emitir otra palabra pero si reflexionóbmucho en ello, en lo que la muchacha le acababa de de
—Sí, me ha dicho que habló con un organizador de fiesta algo que veo innecesario, podría haberle dicho a sus padres que nos comprometimos y ya,.sin hacer una fiesta e invitar a personas. Es ridículo que involucre a más personas en esto que solo es una mentira. —Sé lo que quieres decir. Está haciendo todo esto demasiado real es lo que haría él para convencer a todos que efectivamente existe algo y no se trata de una mentira. —¿Ahora te das cuenta de qué es ridículo que siento algo por él? Definitivamente no es el momento equivocado sino el hombre incorrecto. Siempre dando órdenes y definiendo mi futuro. Pero esto me pasa por tonta, solo tendría que haberle... Se detuvo. No quería ni pronunciar la palabra, aunque la muchacha conocía sobre el embarazo por contrato, de lo otro no quería mencionarle. —Ahora ya no puedes devolver el tiempo y así es la vida, tomaste decisiones y eso trae a veces consecuencias, pero tú decides si ver los resultados de una manera positiva. Por eso soy de l
Victoria ya no sabía qué hacer para calmarse un poco y olvidar el tremendo hecho de que faltaba poco para que se llevara a cabo una fiesta de compromiso falsa de la que no quería participar y sin embargo estaba empujada a hacerlo. Aprovechando la ausencia del magnate quién le había exigido o dado la demanda de que no se encargara de los asuntos de la casa, cómo limpiar, pues para eso llegaba una mujer que hacía todas las tareas allí, comenzó a limpiar la cocina. Y luego de eso pasó la aspiradora por las alfombras de living, se sentía exhausta pero haciendo eso de alguna forma estaba liberándose de todo ese enojo que sentía dentro de ella. En su sistema no se detuvo esa furia, sino que continuó con la labor al dirigirse a la habitación de Rashid y tomarse el atrevimiento de cambiar algunas. No tenía idea en el lío en que se iba a meter, pero ahora eso mismo le importaba un rábano. Podría ser una habitación muy grande y lujosa con todo lo que nunca se habría imaginado pero le faltab
—No como crees, es decir, hice lo que es correcto. Pero finalmente cedido por ella misma. Sabes qué no estoy de acuerdo con todo esto qué estás haciendo. Ella es una chica muy buena y no se merece estar metida en esta mentira que puede terminar afectandole. —¿Por qué crees que la afecta haría todo? —Porque... Pues, las mujeres son muy diferentes a los hombres. Es decir, sensibles y emocionales y tendemos a confundir las cosas o caer con mucha más facilidad. Mientras que ustedes pueden tomarse las cosas más a la ligera en cambio uno puede incluso llegar a meter en el corazón y sabes que eso es igual a salir herida. —¿Qué? Yo no le voy a romper el corazón a nadie. Además, Victoria es una muchacha fuerte, incluso impulsiva, ¿es que estás queriendo decir que ella podría enamorarse de mí? Porque me odia y mucho. Nosotros no somos compatibles y sabes que no está mi plan, solo quiero el bebé. Ya no digas más tonterías. —Solo estoy diciendo la verdad, además tú eres el causante de todo es