Al día siguiente, Patrick retomó sus actividades regulares como el novio de Nicole, llevándola a la empresa, buscándola a la hora del almuerzo y pasándola a recoger a la hora de la salida.Sin embargo, él no parecía el de siempre, se veía muy serio y concentrado, a los ojos de Nicole, ¿acaso tendría esto que ver con la sentencia de divorcio que ella le enseñó la noche anterior?, no dejaba de preguntarse ella.Pero Patrick tenía su propia película armada en la mente, había estado planeando algo y esperaba que saliera bien, para que Nicole no pensara mal de él.Él ya había hablado con varios abogados y todos terminaron aconsejándole lo mismo, si quería recuperar una empresa para alguien, para entregársela a quien consideraba el verdadero heredero y sin hacer un escándalo o un show mediático con abogados y demandas, solo había una solución, comprar dicha empresa.Y eso estaba bien, Patrick no tenía ningún problema en comprar esa empresa para entregársela a Nicole, solo faltaba ver si
Patrick comenzó a hurgar en la gavera sacando una botella de vino con dos copas, que sirvió para ambos y una ensalada de frutas que repartió entre ambos platos.—¿Sabes?, al principio pensaba que hubiera quedado mejor si ponía algunas velas… — Comenzó a contar Patrick mientras servía. — Pero luego pensé que sería muy peligroso si hacíamos un movimiento en falso… — Concluyó sonriendo.—Claro, por la alfombra y los cojines, ¿no?, entonces tendríamos que tener cuidado con el vino también… Podría mancharse… — Contestó Nicole, pensativa.—¿Crees que me detendría una mancha? — Preguntó Patrick elevando una ceja con un tono insinuante. — Pero, en cambio, un incendio si podría arruinar las cosas cuando salte sobre ti…—¿¡Mmm!? — Nicole casi escupe el trago de vino al escuchar las palabras de Patrick.—Ja, ja, ja. — Se carcajeó Patrick al ver la linda expresión de Nicole, completamente colorada. — Seré sincero, pensaba hacer una cena normal, pero luego de todo lo que hemos hecho, pen
«¿Algo que necesito saber?», sin saber por qué, esas simples palabras provocaron un pequeño susto en el interior de Nicole.Claro, ella no sabía prácticamente nada de Patrick, ese hombre que apareció un día en ese bar porque su amiga, Brenda, lo contactó desde una página web para contratarlo como gigoló.Y Patrick nunca antes había hablado sobre él, siempre había esquivado el tema y Nicole lo entendía por su profesión.Bien que él podría haber sido un psicópata o un asesino en serie y Nicole hubiera caído redondita, pero en defensa de ella, había una especie de energía en él.No es que se tratara de un asunto místico o sobrenatural, solo que por haber estado rodeada durante tanto tiempo por un hombre cruel como su padre y uno antipático como su exesposo, Nicole ya había aprendido a reconocer esos rasgos rápidamente, adquiriendo como un sexto sentido y Patrick, no emitía la misma energía que ellos.Entonces, ¿qué era lo que Patrick decía que Nicole necesitaba saber?, ¿quizás era a
Al ver que Nicole no se movía, Patrick bajó su rostro lentamente y la besó, saboreando entre el dulce de sus labios y el toque de sal que se colaba por las lágrimas derramadas por ella.Y ese tierno beso que la hizo reaccionar, se fue transformando en un ardiente y profundo deseo.Poco a poco, ambos cayeron sobre el cálido cobertor estirado en el suelo y en medio de los cojines, tocándose, mordiéndose, rasguñándose, entregándose a la pasión y las ansias del uno por el otro.Las prendas de ropa salieron volando y la tenue música era opacada por los gemidos y gruñidos que ambos emitían.Entre más continuos eran sus encuentros, mayor era el frenesí que ambos experimentaban, parecía que ya no era suficiente con solo tocarse o con besarse, cada parte de sus cuerpos y de su piel ardía, necesitando más uno del otro.Al final, las embestidas de Patrick en el interior de Nicole, ya se habían convertido en un torbellino que arrasaba con cada pedazo de consciencia que quedaba en ella, blanq
Se suponía que Patrick se iría en solo unos días, así que Nicole no pensaba en otra cosa que no fuera aprovechar a su lado por el tiempo que les quedara juntos.No había otra cosa más en que pensar, el trabajo, Patrick, ir a ver cómo estaba su madre, Patrick, volver a casa, Patrick, dormir, Patrick y al despertar, allí estaba Patrick.Por eso, la visita de Brenda, su amiga, le cayó a Nicole como un balde de agua fría.—¡Vaya, vaya! — Brenda giró la silla en la que estaba sentada, quedando frente a Nicole, apenas está abrió la oficina. — Parece que la nueva gerente de marketing, ahora es una mujer muy ocupada…—¡Oh, por Dios! — Nicole se llevó la manos a los labios, emocionada! — ¡Brenda! — Corrió hacia su amiga, quien se levantó de la silla para abrazarla.—¡Mírate! Estás espectacular y con una enorme y hermosa oficina consiguiendo que tú primera campaña sea todo un éxito, sabría que lo lograrías, estoy orgullosa. — Comentó Brenda apenas se separaron del abrazo.—Gracias… —
Walter se había tropezado con una elegante mujer desconocida esa mañana en la empresa, ella parecía perdida por lo que él no pudo evitar preguntarle si podía ayudarla.Y fue una gran sorpresa cuando esa mujer, quien se presentó como Brenda, declaró que era amiga de Nicole Matthew, pues habían estudiado juntas y venía para visitarla.Instintivamente, Walter intentó ser más amable y se presentó también, de inmediato, Brenda reaccionó con una mueca de incomodidad y molestia al saber quién era él.Nicole se lo había mostrado una vez por fotos, se suponía que era más atractivo, pero Brenda casi no lo recordaba.Walter se quedó pensativo, ¿qué le pudo haber dicho Nicole sobre él a esa mujer para que lo mirara con tanta rabia?, era mucha la curiosidad.Así que Walter solo simuló como si no se hubiera dado cuenta de la expresión hosca de Brenda y se ofreció para acompañarla, mandó a buscar otro juego de llaves de la oficina y algo de café, y dejó a la amiga de Nicole muy bien instalada e
Los ojos de Brenda brillaban emocionados, ella nunca antes había visto un hombre tan atractivo y tentador, ahora tenía que considerar seriamente tener que contratar un gigoló también para ella.—Mucho gusto, ¡Soy Brenda! — Estiró la mano hacia Patrick, quien le sonreía con amabilidad.—Es un placer conocer a una amiga de mi hermosa Nicole y además, la persona responsable de que nos conociéramos. — Contestó Patrick, apretando la mano Brenda.Pues ya Nicole le había hablado un poco de su amiga antes, y él ya sabía que fue Brenda la que ideó el plan del gigoló contra el exesposo.—Deberíamos brindar y celebrar este encuentro, vamos, las invito al mejor restaurante de la ciudad para almorzar. — Completó Patrick.Estos gigolós debían ser muy bien entrenados y preparados, pensaba Brenda al tiempo que charlaba con la pareja, Patrick era amable, atento, respetuoso, inclusive el tono de su voz y la forma de moverse parecía muy bien estudiada.Él no parecía un tipo cualquiera, sino un
— ¡Señor!, ¡¿a dónde va?! — La asistente seguía a Walter por el pasillo, alcanzándolo en los ascensores. — No puede irse, en una hora tiene una importante reunión…—No me iré y sé lo de la reunión, puedes ir preparando todo, solo iré a ocuparme de algo por un momento. — Replicó Walter cerrando el ascensor, mientras que la asistente se quedó al pendiente del piso al que bajaba.Era un almacén viejo, otro que Walter había mandado a clausurar, pero este era más grande y estaba alejado de las oficinas principales, allí nadie los molestaría.Ambos hombres llegaron puntuales a su cita y ninguno de los dos mostraba rasgos de debilidad, ambos erguían el rostro con orgullo y altanería.—Muy bien, aquí me tienes… — Señaló Patrick. — Así que no me hagas perder el tiempo y vayamos al grano, ¿qué es lo que quieres?—Imbécil altanero… — Gruñó Walter.Ante el insulto, Patrick se dio la media vuelta para marcharse, pues él no estabas allí para ponerse a pelear como un inmaduro, había ido a e