Lili
Desperté y al abrir mis ojos, Daniel me contemplaba el cuerpo desnudo. Sonríe coqueto mientras se acomoda encima mío.
— Buenos días princesa. ¿Cómo amanecieron mis dos amores? — Besa mis labios suavemente. Lo miro fascinada. No creí que ese hombre que parecía tan cruel, fuera una caja de sorpresas donde todo su amor estaba bajo llave.
— Buenos días, amor. ¡Mejor que nunca! — Río. Se me olvida hasta respirar sólo con ver su sonrisa. ¡Es mortal!, para mi sensible y
pobre corazón. Qué se deshace completamente con cada uno de sus gestos.
— Mi princesa quiere el desayuno a la cama — Susurra, siento un calor invadir mi aparato reproductor. Baja sus manos acariciando las curvas de mi cuerpo. Me muerdo los labios y cierro los ojos, disfrutando de su caricia&md
Sonrío falsamente mientras sigue descendiendo sus manos por mi cuerpo, al llegar a mi entre pierna, me empieza a estimular un poco, sus pupilas están totalmente dilatadas y sus ojos verdes brillan de excitación.— Estoy volviéndome loca Lili, acuéstate —Ordena, freno su mano y niego con la cabeza.— No, quiero ser yo la que empiece — Digo muy segura de mí. Sonríe.— Como digas. Serás a la primera que permitiré que lo haga — Se separa, baja su vestido quedando desnuda frente a mi—. Amarra fuerte, que no me vaya a soltar, pequeña.Se acuesta, la amarró con unas cuerdas en su abdomen, sujetándola fuerte de la mesa, pongo las esposas en sus manos y seguidamente en sus pies. Agarró una venda negra y la pongo en sus ojos.— Tienes un monumento para
DanielEscuchar y ver a Lili, decir y hacer todo eso; me hizo revolver el estómago, no sentí nada de placer. Y menos escucharla hablar tan convincentemente frente a Elisabeth, que en su cara solo mostraba lo excitada qué estaba, y sin darse cuenta de sus labios fueron saliendo las palabras solas. Al final de todo, fue un buen plan de mi princesa. Miro a Nicolás que está sumido en sus pensamientos, y como lo conozco tan bien se debe estar debatiendo, el peso de su acción. Aún más sabiendo que fue recién se casaron, qué bien lo habían guardado, pero era de esperarse, Elisabeth no quería dejar títere sin cabeza y la verdad sale a luz en cualquier momento. Lili charla con Santiago muy animados, riendo de las ocurrencias de él. Hasta ya le puso nombre a mi hijo.Amanda aparece en la sala con la mirada en el suelo y rápidamente se pierde hac&ia
Desperté sólo en la cama, y me levanté un poco con desconcierto, al tomar mi teléfono veo que son las once de la mañana y este tiene la bandeja de mensajes saturada, con miles de llamadas sin responder. Resoplo tirándolo a un lado. Me paso las manos por el cabello despeinándolo aún más. Lili, entra con una sonrisa y una bandeja en sus manos.— Te preparé el desayuno. — Susurró con suavidad, sentándose a mi lado.— Gracias, cielo, pero y Amanda — Se encogió de hombros.— No le he visto desde que me levanté. Sólo estaban las encargadas del aseo — Fruncí el ceño.— Bien. Ven come conmigo — Negó rápidamente.— No, Daniel. Nosotros ya comimos, sólo quise atenderte un poco, ¿Te molesta? &
LiliUnas semanas después y el escándalo seguía ardiendo, como el primer día. Daniel dormía poco y se veía sumamente cansado. Mi padre al enterarse fue reacio por unos días conmigo, pero luego comprendió, cuando obligada le conté toda la verdad, desde los insultos y maltratos de Sandra. De ella no volvimos a saber absolutamente nada y agradecí a todos los dioses por ello. Nicolás. estaba quedándose con nosotros en la mansión, después que su esposa firmó el divorcio se ha vuelto un borracho, Santiago se ha multiplicado para hacer lo humanamente posible para seguir con las empresas de su gemelo más las suyas. El abogado encontró más pruebas en contra de Elisabeth, que morirá en la cárcel. El juez le dio cincuenta años de prisión, saldrá de ese lugar con las patas hacía delante.
LiliMeses Después...Estos últimos meses no ha sido fácil, como se lo dije a Daniel una noche; puede que haya perdido gran parte de sus cosas materiales. Pero son sólo eso, cosas desechables. Lo único que tenemos es nuestras propias manos y nuestra salud, con ello podemos lograr todo lo propuesto.De a poco se han ido levantando las empresas nuevamente, varios inversionistas decidieron invertir dinero en las grandes distribuidoras, me he metido de lleno y he logrado aprender de a poco en todo el ámbito de la única empresa con la que quedó. Sus centros comerciales, los centros informáticos; tocó rematarlos a bajos precios, para pagar a muchos empleados. Más todo lo que la ley ordena. Varias propiedades también se vendieron. Las deudas lo estaban sofocando y esa fue la solución más rápida.Me di cu
DanielLas gotas de sudor bajan por su frente, mojando la almohada de la camilla del hospital. Las venas de su cuello resaltan al igual, que el rojo de sus mejillas. Su fuerte agarré en mi mano casi clavando las uñas en mis palmas me advierte de que otro pujo más viene, cierra los ojos con fuerza mientras muerde su labio inferior casi haciéndolo sangrar.— Eres fuerte, princesa. Tú puedes. Recuerda que te amo — Asiente con la cabeza, da un grito ahogado y de inmediato un llanto se escucha, mi corazón late fuertemente de felicidad. Se me plasma una sonrisa y con ojos llorosos, veo como la doctora sostiene en sus manos a mi hija. Una princesa hermosa, que llora fuerte mientras limpian su pequeño cuerpo, luego de envolverla en una manta, la enfermera la acerca a nosotros, Lili está bañada en sudor y lágrimas.— Es una preciosa nena, mira
Lili¿Realmente que era lo bueno que sacaría vendiéndome a un desconocido?, en un principio creí que acabaría mal, que, por ser tan ingenua, mi vida sería muy diferente; donde ya no tendría ningún brillo en mis ojos.Daniel, me salvó del pozo sin salida donde caí. Es un bello ángel que me brindó todo ese amor que no sabía que existía en el mismo. La vida me dejó en claro que todo pasa por algo.Deseaba con todo mi corazón salir de casa, tener mi propia independencia, tener mi propio apartamento, obtener mi dinero que ganaría con el sudor de mi frente. Pero que erróneas expectativas me hice de cómo era el mundo fuera, sabía que existía la gente mala como Sandra. Que con sus maltratos me dejaron vacía. Lo que no sabía; es que me estrellaría con un muro, y to
Las campanas de la pequeña, pero muy bien decorada capilla sonó; dando entrada a la hermosa novia sujeta del brazo de su padre. El vestido color marfil, de corte princesa. Suavemente cayendo por los hombros hacia abajo, rozando las curvas en lugar de aferrarse a ellas, para crear una silueta elegante. Con un largo cubriendo sus pies a la hora de dar el paso. Peinada en un semi recogido trenzado, por la cual pequeña flor adorna su cabello. Su suave maquillaje más su hermosa sonrisa, la hace ver como un ángel caído del cielo para Daniel; que impaciente espera por la llegada de su futura esposa. No puede estar más feliz, y decirse a sí mismo, que, sin duda alguna, se llevó el mejor premio en aquella subasta. Con orgullo podría decir que la inocente chica sería su esposa, y quién iba a pensar que, en ese lugar, se iba a dar un amor fuerte como el de ellos. De pie junto al padre; Daniel, enfundado en un traje gris, acentuado a su buen trabajo cuerpo y con la sonris