La fiesta fue todo un éxito. Alonso no pudo estar más agradecido con David el ideologo y con Anna, quien lo había secundado en todo.

Diana estaba feliz de ver por primera vez en muchos años a su hijo, con una sonrisa que sólo reflejaba felicidad y paz. Luego miró a Julia, quien sostenía la mano de Javier mientras charlaba con los demás. De pronto la chica había dejado fe poner objeciones a la hora de ir a rehabilitación y estaba considerando hacerse la cirugía que los médicos habían sugerido tiempo atrás y a la cual se había negado de manera determinante.

_¡ Gracias Dios mío por haberme escuchado! _ musitó. _ parece que hubieses enviado a Anna para ayudar a mis hijos.

Solo Dios sabía toda la angustia que había transitado durante todos esos años a partir de la depresión de Alonso, luego la muerte prematura de su esposo y después el accidente de Julia.

Quiso borrar esos recuerdos y plasmar los nuevos momentos que estaba viviendo.

Mientras Lucy, Anna, Blanca y Patrick bailaban y cantab