Ava Janssen New YorkEsa noche, cuando salimos de la empresa, con Eryx y Ary teníamos doble motivo para celebrar con un helado. Me sentía muy contenta que fuera el propio Tommaso DeCostello quién me propusiera hacerme cargo del nuevo cliente y que además iba a trabajar en equipo con Ary, la experta en esas cuestiones cibernéticas para que el asunto con el cliente fuera a resultar todo un éxito.–Ava, estoy muy contenta porque vamos a trabajar en este proyecto juntas – Ary no podía ocultar su entusiasmo – Tenemos que ir a comer mañana para ponernos de acuerdo con lo que vamos a hacer para ese cliente.Esto iba a ser mucho más que una comida, íbamos a formar una mancuerna muy sólida, estaba segura de que nos llevaríamos muy bien en el aspecto laboral, le entendía a la primera, aunque ella llevara la parte electrónica, sus puntos de vista eran muy parecidos a los míos.–Sí Ary, descuida, ya había pensado que fuéramos a comer antes de la cita con el cliente para afinar detalles. A él lo
Ava Janssen New YorkSeguimos disfrutando de nuestros helados y Eryx me invito del suyo y yo le di del mío, hasta que los terminamos, desechamos los restos que quedaban y nos fuimos caminando hasta el auto y después nos subimos a la limusina para que nos llevara a nuestro destino.–Ava, ¿Me recibes a dormir en tu suite? – Eryx me hizo ojos de bebé llorón – Por favor, mi hermosa morena.No me iba a negar, yo quería estar todo el tiempo con él, sería como negármelo a mí misma. Por eso no pondría ninguna negativa.–Ay sí Ava, recíbeme también a mí – Ary no perdía oportunidad de reírse – Por favor, amiga.–Ustedes son incorregibles y sí quieren sí, los recibo a los dos ¿Acaso tengo otra opción?–No la tienes amor – Eryx me abrazó y me mantuvo así – Ya en serio, ¿A dónde irás Ary?, no me digas que te atreverás a ir a la cueva del dragón.Ya caía en cuenta hasta ahora, pues pensé que se trataba de una broma entre ellos, pero Ary en si estaba huyendo del encuentro entre ella y su mamá.–No,
Ava Janssen New York–Hola mi Dios griego – Llegué y lo abracé con ternura – Ya he llegado mi vida.Me alegraba todo el tiempo de estar así con él, aunque fueran a ratitos, teníamos demasiado trabajo que hacer y más de mi lado, tenía e iba a dar todo de mi parte. Esta era una gran oportunidad para mí.–Hola mi hermosa morena, ya pensaba que no ibas a llegar nunca – Me miró con tristeza – Quería verte antes de irme, tengo que apoyar a Dante con un cliente y ya me espera allá abajo.Mi Dios griego era tan solicitado, pero lo bueno era que nunca se negaba a echarle una mano al que lo necesitara, siempre estaba dispuesto a ayudar, me encantaba su manera tan humanitaria de tratar a los demás. Aunque siempre esté tan serio.–Muy bien, que te vaya bien y buena suerte amor. Yo me ocuparé de los pendientes y te veo por la tarde, después de comer con Ary.Dejaría todo ordenado, tenía todo el tiempo hasta que llegar la hora de la comida y de la planeación del nuevo proyecto, estaba muy emociona
Ava Janssen New York Ary y yo, nos pusimos a hablar cosas del cliente nuevo que teníamos en conjunto y únicamente pedimos unos refrescos, en tanto esperábamos a la mamá de Ary, quién no tardó mucho en llegar.–Buenas tardes – Nos saludó apenas llegó a la mesa – Disculpen por favor, la tardanza.–Buenas tardes – Respondí – No hay cuidado.–Hola mamá, siéntate – Ary respondió – Ava y yo, estábamos platicando de un asunto de trabajo que tenemos mientras llegabas.El mesero se acercó para llevarle a la señora Gaia una carta y nos pusimos a verla las tres, nuestra plática tendría que esperar a que comiéramos por lo que me podía dar cuenta. Pues íbamos primero a pedir los alimentos.–Si ya están listas para ordenar ¿Les puedo tomar su orden? – El mesero preguntó amablemente – Si no es así, ahora regreso.–Estamos listas – Habló la señora Gaia – Me trae un filete de salmón con ensalada y un té helado, por favor.–A mí me trae, por favor una sabana de pollo con ensalada de manzana – Respond
Ava Janssen New York La señora DeCostello, se recompuso, cuando me escuchó decir eso, era como si supiera que no todo estaba perdido y de inmediato su percepción hacia mí cambió. Nos estábamos dando una oportunidad de conocernos que se debió dar desde que nos presentaron, creo que éramos unas de las mujeres muy importantes para Eryx y debíamos llevarnos bien.–Gracias Ava, por la oportunidad que me das de poder empezar de nuevo. – Habló mi ahora suegra.–No tiene nada que agradecer, yo no tengo ningún problema y en lo que a mí respecta, siempre me es más cómodo que las cosas se hablen directas y sin darles tantas vueltas.En ese momento nos fueron a llevar la comida y la plática se interrumpió por un momento, en el que aprovechamos para comer, en silencio como teníamos acostumbrado y después se retomó nuevamente, cuando pedimos un postre para tomar un café.–Ava, quisiera que me platicaras si no tienes inconveniente del motivo de tu divorcio – Lanzó así sin filtros lo que quería sab
Ava Janssen New York –Muy bien Gaia, muchas gracias por todo y que te vaya bien.Dije de manera cortes, Gaia me caía muy bien, esperaba que no tuviéramos más diferencias, aunque eso no habia sido un problema creado por mí, debía evitar en el futuro que se dieran más desacuerdos de cualquiera de las partes. Yo sabía que me la iba a ir ganando poco a poco y no con regalos e hipocresía, con mi manera de ser la convencería, buscaría la manera de estar más en contacto con ella, Eryx iba a ser nuestro punto de contacto.–A ustedes también, que les vaya bien – Se despidió nuevamente de nosotras.Se retiró elegantemente de donde nos encontrábamos y se fue hacia el auto, donde un chofer le abrió la puerta de la parte trasera y se subió sin mirar atrás, era una mujer con mucho porte, vimos cómo se alejaba el auto y ya que nos encontramos solas Ary y yo, cuando íbamos de vuelta a la empresa, ella no se pudo quedar callada y mucho menos ocultar su felicidad.– ¿Y ahora qué te pasa a ti? pareces
Eryx DeCostelloNew York Había dejado a mi morena de fuego, porque se iba a ver con Ary para su comida de negocios, y yo me acababa de ver con Dante, el cliente estaba bastante apresurado, porque la entrega de unos rollos de tela y no había tenido la producción adecuada.–Hola, Eryx, hola Dante.–Hola, Benjamín, ¿en qué podemos ayudarte? – Le preguntó Dante.–Sé que ustedes manejan ciertas máquinas de textil y voy a necesitar que me consigan por lo menos dos automáticas, pero que ya estén probadas al cien por ciento.–Muy bien, pero dinos ¿qué es lo que está pasando? – Le pregunté.El asunto que lo aquejaba era que estaban teniendo problemas con una de las máquinas tejedoras, habían adquirido unas máquinas automáticas, pero en la noche cuando nadie estaba supervisando se detenían a cierta hora, pensábamos que era cuestión de que se contratara a personal para el turno de la noche. Sin embargo ese no era el problema en sí.–No podemos detener el surtido de los rollos de telas, los pedi
Ava Janssen New YorkEl resto de ese día Eryx y yo, ya no tocamos el tema de su madre. No tenía caso caer en una discusión con él por esa situación. Además, Ary y yo teníamos que avanzar con el asunto de lo del cliente, pues lo teníamos que ver de nuevo en dos días. Cuando terminé mi trabajo y aprovechando que Eryx estaba en una llamada telefónica bajé al piso de Ary, para ver si nos íbamos a quedar esa noche a trabajar. Me gustaría que por lo menos tuviéramos la primera parte bien definida.–Hola Ava – Ary me saludó apenas me vio – Pensé que ya te habías retirado, con su majestad.No me había retirado porque estaba segura que ella iba a estar trabajando en el proyecto y porque yo no me quería quedar atrás. Las dos íbamos a trabajar parejo, y ninguna de las dos nos íbamos a desanimar, éramos un equipo y nos ayudaríamos entre nosotras.–No Ary, Eryx y yo hemos tenido una especie de desacuerdo – Admití con ella – Le platiqué de lo de la comida con tu madre y no se lo ha tomado nada bie