Ava Janssen New York–Está bien amor, puedes quedarte – Lo tomé de la mano – Nosotras encantadas de tenerte aquí, gracias por traernos de cenar. Siempre eres muy considerado con nosotras.Me había ganado la lotería con este hombre, siempre estaba en todo, no tenía necesidad de pedirle las cosas, era un amor, la vida me lo había puesto justo en mi camino. Nunca pensé que me podría encontrar a alguien como Eryx.–Gracias mi hermosa morena, ¿Qué dicen si cenamos primero y luego les ayudó si es que necesitan algo? – Propuso Eryx – No es bueno comer la cena, una vez que se enfría.Yo la verdad si tenía hambre, su propuesta era muy bien recibida y Ary, estaba peor que yo, ya que había dicho que se moría de hambre hacía unos minutos antes. No nos podíamos negar, así que aceptamos las dos. Además olía delicioso y eso hizo que se nos abriera más el apetito.–Está bien, Eryx – Respondimos Ary y yo.Sacamos las cosas que Eryx llevó, era una cena gourmet de un exclusivo restaurante. Era tan típi
Ava Janssen New YorkEryx, nos miraba a las dos y por lo que lo llevaba conociendo hasta entonces, podía decir que no le iba a gustar este tipo de alianza entre Ary y yo, para convencerlo de ver a su madre. Pero era necesaria, ella ya había dado un paso, que fue el de ir a hablar conmigo y eso era digno de reconocerse y por otro lado, si ya íbamos a dar el gran paso de vivir juntos, lo idóneo es que nuestras familias puedan verse, convivir y compartir juntas y para eso, él debe estar ya en buenos términos con su madre.–Eryx mi amor, sé que esto no te va a gustar, pero, Ary y yo pensamos que tienes que ir a ver a tu madre, para hablar las cosas con ella – Sugerí – Ella, ya dio un buen paso, de tomarse el tiempo para ir a verme y admitir ante mí su falta que cometió.Le volví a explicar, era un cabeza dura y no me importaba tener que decírselo una y otra vez, tenía que abrirse a esa sugerencia nuestra.–Si hermano, Gaia estaba de verdad arrepentida y además Ava, en ningún momento se r
Eryx DeCostelloNew YorkEsa noche después de cenar con Ary y con mi hermosa morena, las dejé trabajando un rato más y yo me salí a caminar a solas a Central Park, para pensar y para reflexionar todo el asunto de mi madre. Estando allá caminando, pude ver a lo lejos que mi hermano Jerome se bajaba de una limusina, seguramente venía de ver a su novia a Leslie Newman y ella siempre se aseguraba que llegara con bien, después de ir a verla y lo mandaba en una de las limusinas de su familia.Me encaminé hacia donde se encontraba y él no me vio al principio, hasta que yo me acerqué caminando hasta dónde estaba él, se encontraba igual que siempre, y era mentira que yo era el que me creía un rey, él era peor que yo.–Hola su majestad, ¿Qué hace tan noche y fuera de su reino? – Fueron las palabras de mi hermano, que se reía con cinismo de mí – Nunca pensé verte caminando por aquí, es más por ningún lado. La realeza no camina, anda en limusina.Como si él no se acabara de bajar de una, no podía
Eryx DeCostelloNew YorkPor la mañana siguiente, me despertó la llamada de mi hermosa morena y me sobresalté ¿Qué hora era? Me había quedado dormido más de la cuenta y eso era muy raro en mí. Debí haber estado muy cansado para que eso me pasara. Tomé el celular y le di clic a la llamada.–Hola mi Dios griego, buenas tardes, se te han pegado las sábanas – Se burlaba de mí, apenas le respondí la llamada – Te tengo una mala noticia, estás a punto de perder a un cliente que te está esperando aquí en tu oficina. Me ha dicho que tú, quedaste de irte con él a ver unos asuntos y como no estás, mejor no te digo cómo está.Cómo había sido posible que me olvidara de eso, ni siquiera había puesto la alarma y por eso no me había despertado a tiempo, era un error muy grande de mi parte y podía perder a un cliente muy valioso, me senté en la orilla de la cama, ya listo para pararme.–Hola Ava, buenos días, lo siento amor me quedé dormido. Por favor, no permitas que se vaya, dile que me espere que y
Eryx DeCostelloNew YorkElla se había sorprendido, porque nadie me había anunciado, pero no había problemas, porque seguramente ya les había dicho que de un momento a otro yo aparecería, pues no le había dado una hora exacta de mi llegada.–Eryx, mi amor, has venido hijo. Anoche que Jerome me dijo que vendrías a comer conmigo, no lo podía creer. Por eso no estoy arreglada para salir.Lucia como una reina, mi madre era una mujer sofisticada, era elegante y podía vestir desde lo más sencillo hasta lo más glamoroso y le sentarían de maravilla, a pesar de ya no ser una jovencita, aún conservaba esa frescura, porque se conservaba muy bien.–No es necesario que salgamos madre, podemos comer aquí y no tienes que arreglarte. Siempre estás hermosa, no sabes lo preocupado que estuve, supe lo que ayer, te pasó ¿Te encuentras bien?, ¿Ya te dieron atención?Sé que debí llamarla desde ayer, pero como Jerome me había tranquilizado, ya no quise molestarla, era demasiado tarde y mi padre debía estar
Ava JanssenNew YorkEse día que Eryx se fue a comer con su madre, ya no lo vi en todo el día y saliendo de la empresa yo, me fui a comprar unas cosas que iba a necesitar con Ary y a llevarla al lugar en el que, si todo salía bien, esa misma noche le daría a Eryx una enorme sorpresa, ahora iba a ser yo la que lo conquistara, porque quería que él viera que no todas las veces iba a ser él el que me sorprendiera.–Andas muy misteriosa Ava Janssen, desde hace algunos días te noto así – Ary ya me estaba conociendo – Me has dicho que te acompañe y no sé ni a dónde me llevas.Como siempre, Ary tan impaciente como solo ella lo era, en cuanto llegáramos a lugar se iba a enterar, entonces debía esperar tan solo ese tiempo.–Ya lo verás, eres la única persona que lo sabrá. Claro antes que Eryx y espero que me des tu opinión.No es que estuviera yo indecisa, era que esto nunca lo había hecho y yo estaba cien por ciento segura que a Eryx le iba a encantar y a sorprender de una manera muy particula
Ava JanssenNew YorkTerminé la llamada con Eryx, le envié la dirección del otro hotel y después, volví a mi hotel a llevarme todo lo que tenía preparado y listo ya en una maleta. Me sentía nerviosa, pero al mismo tiempo muy emocionada por lo que iba a hacer y por lo que nunca imaginé hacer, me desconocía a mí misma pero esta nueva versión de mí, realmente me estaba encantando, ser más arriesgada y más atrevida para dar ciertos pasos en mi vida.Ya con todo en orden me fui a ese lugar en un taxi, llegué a la suite, me cambié y me puse un vestido rojo corto pegado a mi cuerpo, con unas zapatillas de tacón alto y me hice un elegante peinado recogido en mi cabello. Luego de eso, bajé al lobby a esperar a Eryx que estaba entrando justo en ese momento. Venía caminando hacia mí, con ese andar que me encantaba.–Hola, mi hermosa morena – Me atrajo a sus brazos – Se me ha hecho una eternidad, mi día sin ti.Como extrañé a este hombre, a pesar de que habían sido muy pocas horas yo ya me había
Ava JanssenNew YorkMe quiso interrumpir, pero esto no iba a ser el día de hoy. Debía terminar con todo lo que le iba a decir, porque de lo contrario no tendría el mismo efecto.–Déjame terminar, por favor mi amor. – Le pedí.–Lo siento, mi amor, sigue por favor. – Me pide apenado.–No sólo yo te salvé Eryx, nos salvamos ambos y es por eso que sé que, aunque vamos a vivir juntos y es un paso más en la relación yo quiero dar un paso más definitivo contigo. No tengo dudas de lo que quiero en esta vida y eso se resume en una vida llena de amor, de risas, de hijos y de momentos que quiero pasar contigo a mi lado, para siempre – Suspiré hondo – Eryx DeCostello ¿Te quieres casar conmigo?Eryx se quedó perplejo y unas lágrimas bajaron por sus mejillas, yo abrí el cofre y saqué un elegante anillo para colocarlo en su dedo. Él se puso de pie, me abrazó y me besó con mucha ternura dándome esa respuesta que yo pedía sin palabras, nos perdimos en ese tierno beso, en ese momento en el que amar er